La segunda generación del Hyundai Kona es sensiblemente más grande que la anterior: mide 4,36 metros de longitud (150 milímetros más), 1,83 m de anchura (25 mm más) y tiene una distancia entre ejes de 2,66 metros (60 mm más). Con este crecimiento se acerca mucho al tamaño de un Kia Niro (4,42 m de longitud y 1,83 metros de anchura, con 2,72 m de batalla). Está en venta desde 28 490 euros con un motor de 120 caballos (todos los precios del Hyundai Kona 2023) que es un precio alto (listado, ordenado por precio, de SUV entre 4,3 y 4,4 metros de longitud con motores de gasolina entre 110 y 130 CV)
Como hasta ahora, del Kona hay versiones de gasolina, híbridas no enchufables y eléctricas (si bien estas últimas todavía no están disponibles). Tienen pequeños cambios en el diseño frontal y posterior para reconocerlas a simple vista. Por tamaño, es un modelo parecido al Mazda CX-30, MG ZS, Peugeot 2008, SEAT Ateca, Škoda Karoq, Suzuki S-Cross o Toyota C-HR. Ninguna de estas alternativas están disponibles con tanta variedad de sistemas de impulsión como el Kona.
Del Hyundai Kona Electric habrá dos versiones. Una con una batería de 48,4 kWh de capacidad y un motor de 156 caballos; otra, con una batería de 65,4 kWh y un motor de 218 caballos (fichas técnicas). Hyundai estima que la autonomía WLTP será superior a 490 kilómetros en el mejor de los casos.
En todos los Kona hay una línea de luz que va de lado a lado del frontal. En el caso de las versiones eléctricas, da la impresión de estar pixelada por su parte central. En los Kona de gasolina e híbridos el parachoques tiene un aspecto más agresivo. Con el nivel de equipamiento «deportivo» N Line, muchas partes van pintadas en negro, como la parrilla y los retrovisores. En la parte posterior de también hay una tira de luz que une los pilotos. El coeficiente aerodinámico de la carrocería es 0,27.
El interior del Kona 2023 sigue las líneas de diseño de los últimos productos de Hyundai, como el IONIQ 5. Hay dos pantallas (instrumentación y multimedia) de 12,3 pulgadas colocadas una tras otra en la misma horizontal y bajo un mismo plástico protector curvo. El mando para manejar la transmisión es ahora una palanca situada en la columna de la dirección (como en el IONIQ 5). También hay un sistema HUD que utiliza un área de proyección en el parabrisas de 12 pulgadas. Hay cuatro cargadores USB-C, dos en las plazas delanteras y otros dos en las traseras. Además, delante hay una toma de 12V. Algunas funciones se podran actualizar de forma inamábrica (OTA). Desde el teléfono móvil o un reloj inteligente será posible abrir y cerrar el vehículo, así como ponerlo en marcha (esta función se llama Digital Key 2 Touch y utiliza la tecnología NFC o Near Field Communication).
En la segunda fila, el suelo es plano. En el actual KONA hay un pequeño abultamiento, incluso en la versión eléctrica. El maletero tiene una capacidad de 466 litros (en el modelo que aún se vende es de entre 332 y 374 litros según la versión). En la parte frontal hay otro sitio para guardar objetos, de 27 litros de capacidad.
El Hyundai Kona eléctrico tendrá cosas interesantes como el Vehicle-To-Load (V2L), es decir, la capacidad para alimentar consumidores externos y para ello hay tomas de corriente tanto dentro como fuera del habitáculo. También dispone de i-Pedal, que es el modo de conducción con un solo pedal. Hay un sistema que produce sonido artificial en el interior durante la conducción. Sus características dependen de la velocidad o de la aceleración, y es posible graduar su volumen y configurarlo según las preferencias del conductor.
Entre los sistemas de asistencia a la conducción más novedosos están el Smart Parking Assist, que permite al conductor mover el coche hacia delante y hacia detrás desde el exterior utilizando la «llave inteligente». En el interior hay una cámara que analiza la cara del conductor para detectar posibles despistes o falta de atención. Hay un sistema que puede actuar sobre la dirección si detecta peligro de colisión en cruces o con un vehículo que venga de frente (adelantando o no). También dispone de asistencia de conducción en autopisa que ayuda al conductor a mantener una distancia respecto al vehículo precedente y ayuda en las maniobras de adelantamiento a coches más lentos (Highway Driving Assist 2). El sistema de alerta de vehículos en el ángulo muerto puede actuar sobre los frenos para evitar un accidente.