El Mazda CX-30 es un modelo que, por tamaño, se sitúa entre el CX-3 y el CX-5. Es un coche con un buen acabado interior, una amplitud normal para su tamaño y una gama de motores —dos de gasolina: Skyactiv-G de 122 CV y e-Skyactiv-X de 186 CV; hasta marzo de 2021 también se podía pedir con uno Diesel de 116 CV— en la que prevalece la eficiencia y la suavidad sobre las prestaciones. Está a la venta desde 25 675 euros (listado de versiones y precios).
Las alternativas en el mercado a este modelo de Mazda son muchas y de precios muy dispares, entre ellas: BMW X2, Jeep Compass, KIA Niro, Kia XCeed, Mercedes-Benz GLA, Nissan Qashqai, SEAT Ateca, Škoda Karoq, Toyota CH-R o Volvo XC40. En esta página se pueden ver todos los modelos con carrocería todoterreno de 4,30 a 4,50 metros de longitud que tienen versiones con motores de entre 110 y 200 CV y aquí aparecen todas las versiones ordenadas de la más asequible a la más cara.
Todos los CX-30 actuales llevan la etiqueta ECO de la DGT porque todos llevan un sistema de hibridación ligera. Esto se logra mediante un motor eléctrico de 24 voltios, que no sirve para impulsar el coche por sí solo, sino para realizar la función de motor de arranque y como ayuda puntual al motor térmico (más información en el artículo del Mazda3). El cambio de marchas puede ser manual o automático de tipo convertidor de par. Además, la versión de 186 CV se puede pedir con tracción total.
Como en el Mazda3, uno de los principales puntos fuertes del CX-30 es el tacto de conducción, que es más preciso, ágil y placentero que el de la mayoría de sus rivales. La suspensión es uno de los elementos que más influye al respecto, pues da un buen resultado desde el punto de vista del confort y además contiene bien los movimientos de la carrocería. Un CX-5 es más amplio y su puesto de conducción y reacciones son menos de turismo comparados con el CX-30.
Los dos motores disponibles —122 y 186 CV— funcionan con una suavidad sobresaliente y exigen al conductor que esté muy pendiente de usar el cambio de marchas para circular con agilidad. Precisamente por esto último, y a pesar del buen tacto de la palanca de cambios, consideramos interesante optar por el cambio automático si se valora el confort de conducción.
Hasta abril de 2021, Mazda ofrecía el motor Skyactiv-X de 179 CV, pero desde esa fecha pasó a vender el e-Skyactiv-X de 186 CV (es una evolución del primero). Ambos son técnicamente interesantes, dado que Mazda ha hecho que puedan funcionar por encendido (como un motor de gasolina) o por compresión (como un Diesel). En este artículo hay información detalla sobre cómo funcionan. La ventaja teórica es que consiguen consumos muy bajos.
Con el e-Skyactiv-X 186 CV hemos logrado mejores cifras de aceleración pura y, sobre todo de consumo, que con el Skyactiv-X de 179. No obstante, sigue sin ser un motor sobresaliente en ninguno de esos apartados. La capacidad para recuperar velocidad con marchas largas no ha mejorado y continúa siendo mala. Más información en las impresiones de conducción.
Según nuestras mediciones, el CX-30 no tiene un habitáculo especialmente amplio, pero permite transportar a cuatro personas de talla media sin demasiados problemas. Tampoco el maletero tiene una capacidad sobresaliente (listado ordenado de mayor a menor capacidad). Damos más detalles en el apartado de Impresiones del interior.
Mide 4,40 metros de longitud, 1,80 de anchura y 1,53 de altura. Es, por tanto, seis centímetros más corto y diez más alto que un Mazda3, con el que no comparte la distancia entre ejes (2655 mm el CX-30, frente a 2725) aunque sí la parte fundamental de la estructura. Una ventaja del CX-30 para algunos usuarios será que se va sentado más alto, no sólo respecto al asfalto (hay 9 cm de diferencia), sino también respecto al piso del coche (4,5 cm); es decir, es más fácil entrar y salir de él y se va sentado un poco más erguido. En las plazas traseras, según nuestras mediciones, las diferencias de espacio son mínimas, pero el diseño de la carrocería hace que el acceso en el CX-30 sea mucho mejor. Una ventaja más: el maletero tiene 72 litros más de capacidad (430 l). A igualdad de motor, un Mazda3 es más barato, un poco más rápido y tiene un consumo homologado prácticamente idéntico (ficha comparativa de las versiones de gasolina).
Hay tres niveles de equipamiento: Origin, Evolution y Zenith. Entre los elementos de equipamiento posibles relacionados con la seguridad están el sistema de proyección de información sobre el parabrisas (imagen), un asistente de tráfico y crucero (CTS; sigue al coche de delante durante una retención en carretera), los detectores de fatiga, de tráfico delantero (FCTA) o trasero, el programador de velocidad activo, el detector de vehículos en el ángulo muerto o el sistema de frenada de emergencia en ciudad con detección de peatones.
También es posible pedir un portón con apertura y cierre automáticos, asientos delanteros y volante calefactados, tapicería de piel, un sistema de cámaras que generan una vista cenital del vehículo (cuya resolución y calidad de imagen son excepcionales; imagen) o unos asientos con ajustes eléctricos y memorias de posición. Las versiones Zenith tienen unos faros de ledes con función de encendido y apagado selectivo; para quien use el coche frecuentemente de noche nos parecen muy recomendables.
Hasta mediados de 2021 estuvo disponible un nivel de equipamiento llamado 100 Aniversario, que era como el Zenith pero con algunos elementos decorativos específicos que conmemoraban los 100 años de la fundación de Mazda (en 1920).
El aspecto del salpicadero es prácticamente idéntico al del Mazda3, con el que también comparte sistema multimedia —con pantalla de 8,8 pulgadas de serie; imagen— e instrumentación (imagen). Los acabados y los materiales empleados para fabricar el habitáculo son buenos para lo que cuesta y las posibilidades de personalización, más amplias que las de cualquier otro modelo de Mazda (incluyen varias combinaciones de color para los asientos, el salpicadero o el guarnecido las puertas).
De acuerdo con nuestro comparador de seguros, el precio más bajo para una póliza a todo riesgo sin franquicia de un Mazda CX-30 2.0 Skyactiv-G 122 CV lo ofrece la compañía Mapfre (240 euros al año). El tomador de este ejemplo es una mujer de 33 años que reside en Madrid, recorre unos 15 000 kilómetros al año y aparca en un garaje comunitario.