Dacia Duster y Dacia Bigster, dos modelos de tipo SUV y ambos éxitos de ventas en sus respectivos segmentos. El primero, el Duster, lleva con nosotros desde principios de 2024 y es el que tiene un tamaño más contenido: 4,34 metros de longitud. El segundo, el Bigster, llegó un año más tarde —enero de 2025— y como su nombre sugiere, es más «big»: 4,57 metros de longitud.
A pesar de ello comparten muchos elementos, como la plataforma o muchos de los motores con los que están disponibles. Una de las características más llamativas de las dos gamas es que el distintivo medioambiental que le corresponde a todas las versiones es el ECO, bien sea por utilizar la microhibridación, la hibridación convencional (e-Tech, en términos de Dacia) o incluso el uso de GLP (versiones bifuel). Pero Dacia ha ido un paso más allá con las versiones que acaba de poner a la venta en ambos modelos.
Su nombre comercial ya da algunas pistas de sus características y peculiaridades: hybrid-G 150 4×4. La base que ha tomado Dacia es la versión mild hybrid-G 140, es decir, la que tiene un motor 1.2 turbo de gasolina con 140 CV capaz de funcionar con gasolina o con GLP, una caja de cambios automática de 6 relaciones (EDC) y un sistema de hibridación ligera a 48 V. Pero en este caso hay un añadido importante: un segundo motor eléctrico, en este caso de 31 CV y 87 Nm, que va asociado a una caja de cambios de dos relaciones y que se encarga de mover exclusivamente las ruedas traseras (lo hace hasta los 140 km/h). De esta manera se consigue tener un sistema de tracción total sin necesidad de un eje de transmisión.
La potencia máxima conjunta del sistema es de 154 CV y según la marca, tiene un consumo medio homologado de 4,1 kg/100 km de GLP en el caso del Duster y de 4,0 kg/100 km de GLP en el Bigster (no es una errata, el modelo más pequeño tiene un consumo homologado superior). También las prestaciones son muy parejas en ambos modelos: de 0 a 100 km/h en 10,2 y 10,5 segundos respectivamente y una velocidad máxima idéntica, de 180 km/h. Ficha técnica comparativa.
Y como buenos 4×4, tienen varios elementos electrónicos para mejorar sus aptitudes fuera de la carretera: un control de descenso de pendientes, un modo «bloqueo» del diferencial central (que no lo tiene, pero simula su funcionamiento haciendo funcionar los dos ejes de ruedas) y varios modos de conducción: Auto, Eco, Snow y Mud/Sand.
Todo ello manteniendo el distintivo ECO —que en este caso le corresponde por varios motivos— y sin gastar ni una gota de gasolina… si su conductor quiere que sea así o se agota el depósito de GLP (que es de 28 kg, por cierto).
Y por curiosidad, ¿ese motor eléctrico de 31CV se alimenta de la batería de 48V o lleva el coche una batería adicional? Porque si es el primer caso, me da la sensación de que ese empujoncito extra del eje trasero apenas durará un suspiro. Y si se trata de lo segundo, ¿qué tensión nominal y capacidad tiene la batería «de alto voltaje»?