Las versiones básicas del Fiesta y del Corsa, cuyo precio es prácticamente idéntico, resultan 225.000 pesetas más baratas que la del Clio (ficha comparativa de estos tres modelos). Sin embargo, a igualdad de equipamiento, el Renault cuesta lo mismo y —además— da cinco caballos más de potencia. El aire acondicionado es de serie en el Clio Expression 1.9 TDi y cuesta 150.000 pesetas tanto en el fiesta Trend TDdi como en el Corsa Comfort 1.7 TDi.
Si además queremos ABS, también de serie en el Clio, tenemos que pagar 100.000 pesetas adicionales en el Fiesta y 75.000 en el Corsa, por lo que el Clio ya se pone en ventaja. Los espejos eléctricos, que son de Serie en Clio y que no están disponibles en las versiones básicas del Corsa y del Fiesta, le dan finalmente un poco de ventaja. Al comparar al Clio Expression con las versiones más equipadas de Fiesta y Corsa (Ghia y Elegance, respectivamente), también queda claro que es el que tiene mejor relación entre precio y equipamiento (ficha comparativa de estos tres modelos).
Si se quiere optar por uno de estos tres coches con aire acondicionado y ABS, el Clio parece la mejor opción. Tiene más potencia y resulta más barato a igualdad de equipamiento. Es claramente más ancho que el Fiesta y ligeramente más ancho que el Corsa, por lo que caben mejor cinco pasajeros.
La ventaja del Corsa es que ofrece tres centímetros más (que el Fiesta y que el Clio) para las piernas de los pasajeros de atrás, si bien todavía se queda lejos de coches como el Seat Ibiza, que dispone de 4 cm más para las piernas que el Corsa. Tan importante como esos 3 ó 4 centímetros a favor de uno o de otro es la posibilidad de colocar cómodamente los pies por debajo del asiento delantero y en el Corsa se consigue con facilidad. Ayuda, claro está, que el conductor eleve ligeramente la altura de su asiento, pero no es imprescindible. Incluso en la posición más baja hay espacio para colocar los pies.
Un posible inconveniente del Clio es que se deja de vender después del verano, reemplazado por el 1.9 dCi. El dCi debe ser un motor de mucho mejor rendimiento que el dTi.
Otros coches de este tamaño con motor Diesel son más caros y más rápidos que el Corsa DTI. Es el caso del Polo TDI, el 206 HDI, el Seat Ibiza TDI 90 y —sobre todo— el Skoda Fabia y el Rover 25.