Tras dos días de competición, los participantes llegaron a Malibú. La última prueba de consumo fue íntegramente por autovía por lo que quedaba pocas posibilidades de remontar. Hoy, además de las fotos del coche y del cuadro de instrumentos, les pongo fotos del entorno. Quiero darles envidia, que vean lo que se perdieron por no intentarlo. Si no quieren saberlo, mejor que no miren las fotos. Bueno sí, mírenlas, porque podrán ver uno de esos camiones americanos tan bonitos. Yo pagaría por conducirlo durante unos días, por mucho que consumiera.

 

La entrega de premios no fue en Malibú, sino en Santa Mónica, localidad en la que los participantes pernoctaron un par de noches, antes de regresar a sus países de origen. el final de la prueba coincidía con el la apertura del Salón del Automóvil de Los Angeles, al que también acudieron.

El coche ganador en su última maniobra de la prueba.


Video (en inglés) con las instrucciones que reciben los participantes en la última jornada y entrega de premios. En este vídeo se ve que el ganador consiguió un consumo de 49,9 millas / galón, que en nuestras unidades significa 4,7 litros cada 100 kilómetros. La austeridad de estos alemanes empieza a ser insultante 🙂

VidVieo con el