Una asociación empresarial entre Clairvoyant, General Motors, Veolia, y el Gobierno de Aragón va a invertir 50 millones de Euros en construir la planta solar más grande del mundo realizada sobre un tejado. Será en el tejado (183.000 m2) de la factoría que GM tiene en Figueruelas, en Zaragoza, donde se fabrican casi 500.000 coches al año.

Varios aspectos me parecen interesantes en esta noticia que avanzaba ayer el Financial Times.

La producción anual de la planta se estima en alrededor de 15 millones de kWh. Con los precios subvencionados actuales (42 céntimos de euros por cada kWh para plantas con potencia instalada entre 100 kW y 10 MW) (Real Decreto 661/2007, BOE 26 mayo 2007) los ingresos de la sociedad serán de 6,3 millones de euros anuales, por lo que se requieren 8 años para amortizar la inversión (sin tener en cuenta ni inflación ni gastos corrientes de la planta) y presumiblemente un par de años más, como mínimo, para obtener rentabilidad.

Otro aspecto interesante de esta inversión son los paneles fotovoltaicos que se van a emplear. Son planchas flexibles, de unos 5 mm de grosor, que recuerdan a tela asfáltica, fabricados por Clairvoyant y sobre los que se puede pisar. Se sujetan con velcro al tejado de la fábrica. (La inversión, dividida por el número de metros, sale a unos 275€ por cada metro cuadrado). Este tipo de paneles, quizá pueda utilizarse más adelante en los tejados de muchas casas. Intenté averiguar si sería posible y rentable. «Posible seguro», me dijo Arthur Mohr, Director de cuentas estratégicas de Uni-Solar. «La tecnología está. La rentabilidad es mucho más difícil de estudiar, porque hacen falta capacidades mínimas de potencia instalada para que el sistema resulte eficiente.»

Al ver las planchas, tan finas y dúctiles, la idea de colocarlas sobre los coches me rondó la cabeza. Sería factible, pero el aumento de peso induciría más gasto energético que el ahorro conseguido por la energía aprovechada del sol.

Prácticamente toda la energía que consumimos proviene del sol. La hidráulica y la eólica sin duda. También el petróleo. El petróleo que ahora quemamos fue antes materia vegetal, que gracias a la fotosíntesis creció y almacenó energía. Al quemar petróleo realizamos un proceso parecido al que realizamos cuando quemamos biocombustibles, sólo que en poco tiempo hemos consumido la producción de muchos millones de años.

En la página web de Clairvoyant aseguran que toda la energía acumulada en la tierra en forma de petróleo crudo, carbón y gas natural es equivalente a la energía solar que recibe la tierra en 20 días de sol. Es un dato esperanzador, que yo desconocía.

Una pequeña parte de esa energía la aprovechamos sin mucho retraso con saltos de agua y molinos de viento. La naturaleza ha hecho desde siempre estos procesos de transformación de la energía solar y los humanos hemos aprendido a aprovecharla después de las transformaciones «naturales». Sin embargo, la energía directa del sol, la que la naturaleza no procesa previamente y no nos sirve acumulada en grandes cantidades, no sabemos aprovecharla.

¿Tendrá sentido aprender o ya es tarde? ¿Aprovecharán los humanos la energía solar (de forma industrial) únicamente durante un periodo de transición hasta que controlemos la fusión nuclear?