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Ya pueden ver ustedes que últimamente no paro de escribir. Sí, confieso que el motivo principal es que me pagan por ello, negarlo sería un error y yo no cometo errores. Bueno, voté a Convergencia una vez, y otra al PP, y otra al PSOE… bueno, vale, sí, cometo un montón de errores pero escribo porque me pagan.

 

Sin embargo, en esta bonita web que el bendito señor Moltó tuvo a bien sacarse de la manga me siento como en casa. Ya he dicho muchas veces que son ustedes un grupo de cabronazos bastante divertidos y muy bien educados. También hay alguna cabronaza, pero la mayoría tienen la desgracia de pertenecer al género masculino. Claro que la Coixet es mujer, así que ellas tampoco pueden presumir de su condición de féminas.

 

Bueno, oigan, esto venía porque el calor me pone blando y mis emociones salen de mi cuerpo a borbotones, como si estas fueran las cataratas de Iguazú. Aún recuerdo cuando hace un mes, porque en junio hacía un par de grados menos, pudo leerse a varios expertos [risas enlatadas] afirmando que “este año no habrá verano”. A esos expertos [risas enlatadas] los ataba yo en alguna plaza sevillana de 10 de la mañana a 4 de la tarde. A las 4 y un minuto asaríamos unas gambas en sus torsos y nos beberíamos unas cervezas a su salud. Y después discutiríamos de si hay verano o no hay verano. Como personas, sin faltarnos al respeto y sin levantar la voz.

 

Pero no venía yo a hablarles de mi política con los expertos [risas enlatadas] de cualquier tipo, sino a recomendarles a algunas peliculillas para el verano.

 

Esta semana estrenan The East, una película sobre una tipa infiltrada en un grupo de eco-terroristas (joder, qué bien hablo) que acaba por… bueno, no voy a hacer spoilers. Sale Brit Marling, que es una actriz cojonuda y muy peculiar, entre otras cosas porque ha escrito el guión de la película. Es un filme independiente, así que no esperen despliegue de fuegos artificiales, pero tiene bastante tela. Es una película inquietante, ahora que ese adjetivo se usa sólo para referirse a políticos y adoradores de Satán.

 

Y ahora podría hablarles de dos películas que podría o no haber visto, cosa que no puedo desmentir ni confirmar. Las dos películas son Pacific rim y Tú eres el siguiente. La primera (y hablo en un plano puramente hipotético, que quede claro) podría ser la película más entretenida del verano, un espectáculo increíble para amantes del cine de aventuras. Ya saben (eso lo puedo confirmar porque es del dominio público) que explica la invasión de la tierra a cargo de un montón de bichos gigantes (kaijus) que sólo pueden ser rechazados con unos robots tripulados por dos pilotos a un tiempo. Si la hubiera visto (que ya digo que ni afirmo, ni desmiento) se la recomendaría vivamente. Ojo, si la hubiera visto. Con esto no digo que la haya visto, sino que si la hubiera visto debería recomendarla.

 

La otra película, que podría haber visto pero que no habría visto si con ello atrajera algún prejuicio para mi persona (con lo cual puedo haberla visto o no, cualquiera de las dos posibilidades podría ser cierta), es Tú eres el siguiente. Echándole imaginación y fabulando con la (nula) posibilidad de que la hubiera visto, podría decirles (especulo, huelga decirlo) que hace mucho que no veía (o que dejaba de ver) una película de terror tan potente, original y divertida. Eso si la hubiera visto. Si no la hubiera visto (que también es muy posible) diría que el cartel es muy bonito, que da miedo y eso. La trama es la siguiente: unos tipos vestidos con caretas de animales irrumpen en una fiesta familiar y lían la de Dios es Cristo. Eso lo sé porque lo he visto en los trailers, porque si dijera que lo he visto en la película podría estar incurriendo en algún tipo de delito.

 

Y ya está, dos películas que podrían ser magníficas y que podría haber visto o no,  porque ya no he afirmado nada taxativamente. He dicho que igual las había visto pero que, igual que decía eso, podía decir lo contrario. ¿Queda claro?

 

La otra, The East, sí la he visto. Sí. Me ha gustado, sí. No hay hipótesis, no especulo, afirmo (y no desmiento) haberla visto.

 

Las otras no. Las otras no es seguro.

 

Abrazos/as,

T.G.