Señores/as, después de este post van ustedes a amarme (aún más). Gracias al señor Wert, ese genio renacentista (que de haber nacido en el s.XIII hubiera dejado en ridículo al mismísimo Giotto) he tenido una epifanía: hay que salir del euro inmediatamente.
Se estarán ustedes preguntando qué demonios estoy diciendo pero enseguida se lo explico: el otro día oía al maestro Wert –ese alquimista de la palabra- comentar que hay que pasar del ladrillo al conocimiento.
Oh, ¡qué belleza!, ¡qué concepto! Obreros en paro, dirigíos en tropel a las bibliotecas, asaltad las estanterías, ¡leedlo todo!. Joder, no sé qué hemos hecho todo este tiempo sin los consejos de Wert, cuya calva es como el Palantir de Sarumán: el futuro está ahí.
Ya, ya sé, este blog está lleno de escépticos y casi puedo verles en sus casa, en sus puestos de trabajo, torciendo el gesto y chascando la lengua, hombres y mujeres de poca fe. “¿De qué vivirán esa gente?” les oigo clamar. Bien, pues aquí es donde todo adquiere sentido: este año debemos dejar el euro y abrazar el gallifante.
Propongo un cambio simple: un euro = un gallifante.
¿Se acuerdan del gallifante? Ese animal entrañable que daban, si no recuerdo mal, en Saber y ganar (el concurso de la 2). ¿Lo pillan? Saber y ganar [gracias a un lector rectifico, el Gallifante lo daban en Juego de niños]. Puedo ver a Wert, con esa aura que le acompaña, sonriendo en su trono mientras una virgen le limpia los pies.
Así pues, alcanzaríamos la paridad total: todos/as cobraríamos en gallifantes y santas pascuas.
¿Y cómo estructuraríamos el tema? Pues muy sencillo: en la oficina y antes de salir a desayunar el jefe diría –por ejemplo- “Gómez, si un tren sale de Madrid dirección Barcelona a 200 kilometros por hora y otro de Barcelona a Madrid a 150, ¿cuánto cuesta un colacao en el vagon-bar?”. Si el empleado no sabe la respuesta se le descuenta un gallifante del sueldo.
Lo mismo en el super. Uno hace su compra y a la hora de pagar la cajera dice: “¿Raiz cuadrada de 78940?”. Si no se sabe la respuesta pues se paga el doble de gallifantes.
¿Se imaginan ustedes que sociedad de conocimiento construiríamos en España? Ya no haría falta sufrir porque no se tiene trabajo o porque no entra dinero en casa: el gallifante traería una nueva época de prosperidad a la piel de toro. Seríamos la envidia de nuestros vecinos, la España Gallifántica se levantaría como un boxeador hasta las cejas de cocaína.
En realidad yo iba a hablarles de lo cojonuda que es Los vengadores, probablemente –y junto con el Superman de Richard Donner- la mejor película de superhéroes de la historia pero es que Wert me ha convertido en un portador de luz y quería compartir mi recién adquirida sabiduría con todos ustedes/as.
Abrazos/as,
T.G.
Recuerda usted mal. Los gallifantes los daban en «Juego de niños».
Saludos cordiales.
Gracias is85656, espero que ese no sea su nombre real.
¿Saber y ganar? Los daba Javier Sardá en juego de niños…
Saludos
JoMaCo, como puede ver, se rectificó el dato ya hace un rato…
Que le pasa a usted cuatrolatas ¿Algún problema con los nombres alfanuméricos?
Tenga cuidado ¡Que me pongo to lokoooo!
No, Dios me libre, amo los nombres alfanuméricos. Son mi pasión, eso y que me hagan cosquillas con un soplete.
«Wert, cuya calva es como el Palantir de Sarumán» jejeje esta bien aunque al señor Wert le encuentro mas parecido la Sr Burns (de los simpsons)
«Oh, ¡qué belleza!, ¡qué concepto! Obreros en paro, dirigíos en tropel a las bibliotecas, asaltad las estanterías, ¡leedlo todo!.»
Esto me recuerda a aquel ensayo de finales del siglo XIX (creo que de Leopoldo Alas Clarin), en el que afirmaba como casi seguro el hecho de que, cuando los obreros consiguieran su anhelo de trabajar 8 horas al día, y por tanto, tener horas de descanso, acudirían en masa a las bibliotecas a instruirse, leer, meditar, sobre ciencias, poesía, filosofía…
Más bien, la realidad es que a partir del logro de conseguir las 8 horas de trabajo, y por tanto el merecido descanso… lo que se llenaron fueron los bares.
«En realidad yo iba a hablarles de lo cojonuda que es Los vengadores, probablemente –y junto con el Superman de Richard Donner- la mejor película de superhéroes de la historia pero es que Wert me ha convertido en un portador de luz y quería compartir mi recién adquirida sabiduría con todos ustedes/as.»
Aún no he visto Los vengadores, pero hasta ahora, la mejor películas de superhéroes es El caballero oscuro. Gracias Nolan. Gracias Ledger.
Saludos.
Nelo, yo creo El caballero oscuro es espectacular y -sin duda- estaría en el Top3, pero Superman es de los 70 con la dificultad que conllevaba por aquel entonces hacer una película de superhéroes; el malo era Gene Hackman; el padre de Superman era Marlon Brando; la música era de John Williams; el padre adoptivo era Glenn Ford (ese plano de Ford muriendo al atardecer contra un campo de trigo es de lo más bonito que se ha filmado nunca en cine); el bufón era Ned Beatty; el director era un genio llamado Richard Donner. Lo siento pero Superman es por derecho propio el padre y la madre de todas las pelis de superhéroes. A lo mejor dentro de 40 años cambio de opinión, ahora no.
Cómo no hablar de una película y hacer que le entren ganas de acudir a una sala a una persona contraria a esos teatros de pantalla. Le gustará saber que usted le hace un gran favor a ese arte que le apasiona llamado cine.
¿Superman? Puajjj
¿Los vengadores?
Para vengador el Vengador Tóxico.
El mejor superheroe de todos los tiempos.
El vengador tóxico hace tiempo que colgó la fregona…
Si el mal avanza, progresa y se hace fuerte, quiza lo veamos de nuevo, blandiendo su mocho justiciero.
¡¡¡Una virgen!!!
¿Todavía quedan? ¿No les rasgan el himen en la maternidad a las niñas recién paridas? Igual que lo de los pendientes.
Si pretendía hacer una comparación entre el Maestro y Wert, lo siento mucho, pero María de Magdala no era virgen. Ya era una mujer crecidita. En aquellos entonces las mujeres a los 15 ya se habían casado con un cuarentón y empezaban a morir.
Sí. San José era un «menorero». Pero es que en la Judea de Tiberio todos lo eran. Por Norma.
Aprovechando que estamos entre españoles rabiosamente nacionalistas. Y me refiero a nacionalistas centrípetos, lo que algunos llaman «españolistas», ¿no sería mejor castellanizar el apellido de herr Wert? (Aunque me da que no es de origen alemán).
Yo propongo rebautizar a este abogado que nunca ejerció de abogado desde que en 1973 le colocaron en la televisión «pública» de Franco.
Huerta como el general Huerta. El general mejicano (calvo) que traicionó y fusiló al presidente Madero. No me digan que no lo han visto en montones de películas. Siempre calvo y con bigote. A veces con gafas oscuras y bronceado.
No se equivoquen. El mejor superhéroe de todos los tiempos fue sin duda alguna Superlópez. Y no me refiero a López de Arriortúa. Que hay por aquí mucho abuelo con coche. No. me refiero a Superlópez. Busquen en la http://es.wikipedia.org/wiki/Superl%C3%B3pez.
Además. Es el más adecuado para los tiempos que corren. Es el único que podrá librarnos de los cabecicubos que intentan cuadrar España. (Malditos boches).
Se me olvidaba. Cuádrense ante el general cabecicubo Huertas:
http://www.elmundo.es/elmundo/tags/ae/jose-ignacio-wert.html
La foto se la hicieron amigos. Si llegan a ser enemigos…
Lo mejor que hizo este buen hombre fue montar Demoscopia. Que tras aquella sonada falsa victoria de Aznar en 1992 fue rebautizada como TIMOscopia. Es lo que tienen las encuestas pagadas. Que luego no se cumplen. Aunque el general Huertas pretenda cuadrarnos a todos como / con sus mentirosas encuestas, la gente aún tiene una cierta autonomía. (En aquellos entonces inercia).