Este fin de semana me he animado a ir al cine – a pesar de los pesares- para ver la última entrega de Terminator, esa cosa llamada Terminator Salvation. O lo es lo mismo, la cuarta entrega de la saga que se saco de la manga James Cameron hace ahora 25 años.
Debo reconocer que he sido incapaz de abandonar mis prejuicios, y que el hecho de que la película vaya firmada por un personaje tan lamentable como McG (¿quién coño puede llamarse McG?) me atormentó desde el minuto uno. También confieso que el filme me engañó durante un periodo muy limitado de tiempo y hasta creí que el señor que había firmado ese engendro titulado Los ángeles de Charlie había conseguido revitalizar la franquicia a base de pulso.
Pero va a ser que no amigos/as, el temible McG ha vuelto a meter la pata y hasta me atrevo a decir que la tercera parte –no del todo olvidable, pero bastante mediocre en su conjunto- tenía ideas mucho más atractivas que las que atesora Salvation.
En primer lugar tenemos a Christian Bale, a quien le importa un comino ser John Connor, y de hecho podría usar la misma actitud para interpretar al Algarrobo o a la gallina Caponata…el hombre tiene esa mirada de “¿me deben haber ingresado ya la paga?” que identifica a los actores que interpretan papeles puramente alimenticios (o muy alimenticios).
El problema con este punto es que John Connor es el líder de la resistencia mundial, y por lo tanto nuestro guía a través del futuro cuidadosamente diseñado por Skynet. Todos los personajes que orbitan a su alrededor, excepto el magnífico Kyle Reese (a quien se cargan en dos planos, aun siendo el mejor personaje de la película, de largo), son pesados, planos, inconsistentes. Sam Worthington, quien en teoría debe llevar el peso de la historia en sus hombros, tiene carisma cero y sus diálogos resultan cansinos (por utilizar un adjetivo benévolo).
Helena Bonham Carter está horrorosa, Common hace lo que puede pero el devenir del argumento tampoco da para más, y da la impresión de que Bryce Dallas Howard pasaba por allí, vio luz, y entro.
Bueno, dicho esto, con pena, penita, de mi destrozado corazón cinéfilo quien amo con locura las dos primeras entregas del maestro Cameron, destacaremos las cosas positivas: las escenas de acción son impresionantes, tremendas, maravillosas…pero ya son muchos los que dicen –ya, quizás es falso, pero “piensa mal y acertaras” reza el dicho- que fueron rodadas por la segunda unidad de la película y que McG ni las olió. Me lo creo.
Hay un par de persecuciones (especialmente la de las motos Terminator) increíbles y tanto el diseño de producción –hay que sacarse el sombrero ante el trabajo de estos tipos- como el montaje son exquisitos. El problema es que la película no tiene alma, no hay en ella nada que emocione o excite al personal: simplemente asistimos a una sucesión de malos diálogos donde se intercalan efectos especiales de primera clase.
Mucho me temo que sin Governator Schwarzenegger (que por cierto tiene una especie de “aparición especial” cortesía del departamento de efectos visuales del desaparecido Stan Winston) la franquicia seguirá su trastabillado camino a ninguna parte, como Depredador, como Alien, como cada clásico de ciencia-ficción que nos hizo disfrutar hace ya muchos, muchos años.
Hollywood sigue cargándoselo todo. Sin prisa, sin pausa, sin miramientos.
Es lo que hay.
¿Alguien más tiene algo que decir?
T.G.
Yo sí.
El otro día leí una entrevista en El Semanal a Christian Bale, de esas de 15 minutos de hotel, en la que le preguntaba el periodista de turno por cómo le había llegado el proyecto de Terminator y tal, el Bale soltaba que cuando le llegó el guión le pareció que era malo, y que lo rechazó, luego se lo enviaron con modificaciones y volvió a decir que no, y entonces le llamó el director y cuando le dijo «¿qué te parece si empezamos de cero?», Bale dijo «¡Bale!», digo, ¡Vale!.
Cualquier periodista mínimamente incisivo hubiera preguntado a continuación, y en qué consisten los cambios que usted sugirió, o en modo todavía más puñetero, qué parte del guión de Terminator es entonces suya, no se, un poco de mordacidad y de profundidad al respecto, pero no, se trataba de una entrevista de esas de quince minutos de hotel, de esas en las que te toca el turno siete, y existe un alto porcentaje de probabilidad de que el entrevistado esté aburrido, dormido, hasta las pelotas, borracho, drogado, de mal humor, o una mezcla de todas ellas, y el entrevistador anglosajón se fue a otra cosa.
Pero vamos, que yo se la hubiera hecho así, tal cual, entonces podríamos decir que Terminator es obra suya, ¿no?, y probablemente tras uno de sus arrebatos de furia, compartido por mi ser, nos hubiéramos liado a hostias ipso facto como dos hombres que somos, y tras perder el aliento, él candelabro en la mano agarrado a las sábanas de la cama, yo con su Ipod metido por una oreja y el puño golpeando sin fuerza su rodilla, hubiéramos firmado la paz, y hubiéramos salido en todas las revistas de celebritis corriendo un tupido velo sobre esa porquería de película.
Volvamos a la tierra, y dicho todo esto, me gustaría preguntarle a usted si ha asistido a muchas de esas entrevista de hotel y quince minutos con artistas encantados de haberse conocido y hasta las pelotas del proletariado prensil, y cuáles son sus experiencias y anécdotas más jugosas al respecto, ya sabe, hable si no quiere que le localice en el próximo hotel y acabe acariciándole la mejilla con el peine del neceser de cortesía.
Yo, personalmente, al Sr. Bale no le veo, ni le leo, ni le oteo desde que oí esto:
http://www.youtube.com/watch?v=klOFz_VGpUg&feature=bz301
Entiendo la necesidad de un protocolo, un orden y un respeto en un rodaje pero ese respeto tiene que ser bidireccional. Hasta que lea sus disculpas, me ahorraré sus bodrios, los escriba él o no. Amos anda, decir que ha escrito él el guión de «Terminator». ¡Y encima estar orgulloso de ello!
Saludos.
Excelente crítica.
«¿Algo más que decir?» Pues que servidor se limitó a hacer una breve apostilla en su humilde y desatendido blog personal, copio y pego:
Empieza genial: ambiente, cámara, secuencias, sonido e historia. Se mantiene así, casi sin baches, hasta los últimos 30 minutos, las cosas comienzan a sucederse con una velocidad propia de quien no ha preparado bien el desenlace, 10 minutos para el final y ya parece que el de montaje se ha quedado dormido encima de la tecla FFWD, 2 minutos para el final y un absurdo infantilismo se apodera del guión.
Los últimos 10 segundos, música incluída, son un copia & pega del final de El Caballero Oscuro, exigencias de Christian Bale supongo…
Un 10 si quitamos los últimos 30 minutos, un 7 si sólo quitamos los últimos 15 y un devaluado 5 por el suspenso absoluto del ridículo e innecesario final-final-que-se-acabe-ya-y-dejen-de-decir-gilipolleces-con-gesto-solemne.
La primera entrega, soberbia. La segunda, apoteósica. La tercera, prescindible. Y esta cuarta, ya no se la tenían ni que haber planteado. He ido a verla al cine y me ha parecido floja, muy floja. Tan sólo algunos efectos especiales y poco más. Y ahora entiendo lo del guión… si Christian «educación sublime» Bale está detrás, junto a ese director… Nada más hay que agregar.
Saludos.
Para que nadie tenga dudas o falsas interpretaciones, he localizado el fragmento de la entrevista que leí en papel y que transcribí de memoria. Yo en ningún momento dije que el guión lo ha escrito Bale, yo dije que de haber estado ahí le hubiera preguntado cuánto del guión era suyo, a raíz de esta respuesta:
XLSemanal. Ya estaba embarcado en un proyecto de largo recorrido, como Batman, cuando lo tentaron con Terminator, otra posible trilogía. ¿Qué pensó cuando le ofrecieron encarnar a John Connor?
Christian Bale: No quería ni leer el guión. Era fan de las dos primeras películas, pero la tercera me decepcionó. Así que mi primera reacción fue: «No». Mi agente me pidió que, al menos, echara un vistazo al guión. Lo hice, pero no encontré nada que me atrajera. Luego, me reuní con McG, el director, y hablamos de sus ideas: quería algo diferente a lo que se había hecho hasta entonces, pero yo seguía sin verlo. Mi motivación por la película nació en una conversación en la que pensamos: «¿Por qué no empezamos desde cero?». Así es como cobró sentido para mí.
Y si alguien quiere leer la entrevista completa:
http://lasprovincias.xlsemanal.com/web/articulo.php?id_edicion=4187&id=43438
¡Y el autor de este bloz, que se moje hombre!, echamos de menos que los autores de los blogs se impliquen en las respuestas más allá de poner su huevo y hasta la siguiente entrada.
Aquí estamos…no he podido entrar al trapo antes porque un servidor está en el festival de TV de Montecarlo currando y no siempre tiene acceso a internet.
Dicho esto, y por partes:
Señor JFKA, habré hecho (sin exagerar) unos buenos cientos de entrevistas con famosetes/famosillos/famosos a lo largo de mi vida profesional. A Christian Bale le he entrevistado en tres ocasiones y en las tres ha sido muy correcto, dándome lo que necesitaba para hacer mi trabajo, lo cual no deja de ser parte de sus obligaciones.
Dicho esto, es verdad que metió la pata con los famosos insultos pero no es menos verdad que se ha disculpado unas 500 veces y que llamo a un programa de radio en Estados Unidos poco después del incidente y durante 12 minutos de autocalificó de «estúpido» y cosas peores. A mi me parece un actor estupendo, un tipo con una fuerza descomunal.
La entrevista que comenta ha aparecido también en el último número del GQ americano y ciertamente es incomprensible que el periodista no siguiera con esa linea de preguntas para averiguar que había cambiado exactamente desde el primer guión, pero eso ya no tiene remedio.
Yo no culpo a Bale del resultado final (aunque es obvio que está -muy- mal dirigido) pero tampoco le resto méritos: que cada palo aguante su vela.
La película es mala, no hay que darle más vueltas. Y yo ya han empezado a volar rumores de una quinta entrega.
Pues vale. Y piensen ustedes habitantes del blog, que entraré al trapo tanto como pueda…
T.G.
P.D.: El más insoportable de todos los que he entrevistado (prometo dedicar un día un post al tema) se situaría en algun lugar entre Terrence Howard y Anthony Hopkins).
Muchas gracias por los comentarios :-).
A mi Bale me cabe bien, incluso me cae mejor después de su famosa acción/reacción. /Recordemos que además su madre y su hermana le denunciaron por amenazas… en fin, el tío tiene un pronto potente, pero eso no dice todo sobre su personalidad.