Mercedes-Benz GLC (2023) - Prueba | Información técnica

15/04/2024 |Fernando Ríos (@RiversChains)

Todos los GLC tienen el mismo esquema de suspensión: doble horquilla delante y multibrazo detrás. Con la opción «Paquete técnico» los muelles pasan de ser metálicos a neumáticos (AIRMATIC) y los amortiguadores de ser de dureza fija a variable. Además, este paquete añade la dirección de las ruedas posteriores, es decir, que estas pueden torcer hasta 4,5 grados en las curvas (gracias a ello se consigue reducir el diámetro de giro de 11,8 a 10,9 metros).

La altura libre al suelo es de 179 mm con la suspensión estándar. Con la suspensión neumática es de 189 mm, pero al toque de un botón se puede incrementar 15 mm (hasta 204 mm). Si además se pide la opción «Paquete técnico Offroad» es posible subirla 45 mm adicionales y llegar hasta los 249 mm, siempre y cuando se circule por debajo de 20 km/h. Este último paquete incluye asimismo una protección de bajos.

Los GLC híbridos enchufables llevan de serie muelles neumáticos en el eje posterior para sistema de nivelación automática. Con el paquete AMG Line se incluye una suspensión deportiva, que no reduce la altura al suelo (se queda en 179 mm), pero que cuenta con unos muelles y amortiguadores con un ajuste más firme.

Gama de motores

Las versiones GLC 200, GLC 300, GLC 220 d y GLC 300 d incluyen un sistema de hibridación ligera con el que les corresponde el distintivo medioambiental ECO de la DGT. Su sistema eléctrico funciona a 48 voltios y cuentan con un motor eléctrico de 23 CV y 200 Nm que puede apoyar al motor de combustión en momentos puntuales. Esta máquina no tiene capacidad para mover el coche por sí mismo, pero sí permite que en determinados momentos en los que no se pisa el acelerador el vehículo se desplace con el motor de combustión apagado.

Las versiones híbridas enchufables (GLC 300 e y GLC 300 de) tienen un motor eléctrico de 136 CV y 440 Nm de par capaz de acelerar el coche hasta 140 km/h sin la intervención del motor de combustión, que es de gasolina en el 300 e y Diesel en el 300 de. La batería es idéntica en ambas versiones. Es una de iones de litio con una capacidad bruta de 31,2 kWh (la útil es de 23,4 kWh) que permite superar los 120 km de autonomía homologada WLTP en modo eléctrico (128 en la 300 de y 130 en la 300 e). Esta batería se puede cargar con corriente alterna a un máximo de 11 kW y, en opción, con corriente continua a un pico de 60 kW (a esa potencia la carga completa se realiza en 30 minutos). Llevan el distintivo medioambiental 0 emisiones de la DGT.

Todos los motores son de cuatro cilindros, tienen dos litros de cilindrada y van asociados a un cambio automático de convertidor de par y nueve relaciones (9G-TRONIC). El sistema de tracción total tiene un reparto de par (en condiciones óptimas) de 45/55 % delante/detrás, excepto en la versión 300 e 4MATIC, que es de 31/69 % (estos porcentajes van variando según las circunstancias de conducción).