Lexus comercializa en España la berlina ES, una berlina de casi cinco metros de longitud que hasta ahora no había estado disponible en nuestro mercado pero que, con esta, va por la séptima generación. En España, sólo está en venta una versión híbrida (ES 300h) que tiene una potencia total de 218 caballos.
Su precio parte de 45 000 euros con el nivel de equipamiento ECO y llega hasta 65 800 en el caso del más equipado (Luxury). Precio, equipamiento y ficha técnica de todas las versiones. Por lo tanto, es más barato y menos potente que los híbridos de tamaño parecido que hay en el mercado (listado ordenado por precio).
Lexus vende el ES con un precio de salida mucho más bajo que el GS (ficha comparativa), que no significa que haya un abaratamiento claro en los materiales y en los detalles. En conjunto, el ES deja buena impresión tanto en parado como en marcha. El sistema híbrido de ambos es completamente distinto, aunque la potencia total es parecida.
El espacio interior es bueno en sentido longitudinal (para las piernas). Debido a la línea afilada del techo, el espacio para la cabeza no es grande pero tampoco falta para ocupantes cuya estatura esté próxima a 1,80 metros. Con el acceso al interior pasa algo parecido; no es malo, pero en una berlina de diseño tradicional (como un GS) se entra mejor porque la puerta deja un hueco mayor para pasar.
Al ES 300h le pasa como a otros híbridos de Lexus y Toyota: la aceleración no es grande para la potencia disponible. Todos los híbridos de su tamaño son más veloces, aunque también más caros y consumen más (sólo gastan menos, al menos según el ciclo de homologación, los híbridos enchufables).
Es muy silencioso a ritmo tranquilo o velocidad sostenida. Con el acabado F Sport es menos cómodo puesto que su suspensión es más firme (y de dureza variable) y sus ruedas más grandes.
Las diferencias de las versiones F Sport no se ciñen sólo a los ajustes en la suspensión, sino que también afectan al campo estético. Por ejemplo, las llantas de 19 pulgadas (las del resto de modelos son de 17 ó 18) son similares a las que puede llevar el Lexus LC. En el interior hay unas molduras de aluminio inspiradas «en la fabricación de una espada japonesa tradicional» y presenta «patrones de onda que le dan una apariencia tridimensional que varía según el ángulo de visión». Su instrumentación (imagen) tiene cierto parecido con la que tenía el Lexus LFA, mientras que en el resto de versiones es más tradicional.
Entre los sistemas de asistencia a la conducción que tiene está el frenado automático de emergencia, que como novedad, tiene reconocimiento de ciclistas y ha sido mejorado para detectar mejor a los peatones por la noche. También tiene el asistente que mantiene el coche en el centro del carril (es una función más avanzada del asistente por cambio involuntario de carril, que sencillamente evita —en algunos casos— que el coche se salga de las marcas viales), programador de velocidad activo con reconocimiento de señales de tráfico (que además de mantener la velocidad y una distancia determinada respecto al vehículo precedente, es capaz de mantener al vehículo dentro de la velocidad máxima permitida en la vía) y conexión automática de luces largas. Las versiones más equipadas, tienen, adicionalmente, faros de ledes (24 por faro) que se pueden encender y apagar selectivamente para iluminar lo máximo posible sin deslumbar a los conductores que están por delante (imagen esquemática de cómo funcionan).