La cuarta generación del Porsche Cayenne es eléctrica y llegará al mercado a principios de 2026. Convivirá con el actual Cayenne de combustión durante varios años (motor V8 y versiones híbridas enchufables incluidas, todos ellos convenientemente adecuados para cumplir con la normativa europea que corresponda).
Es un vehículo eléctrico de categoría «800 voltios», con una batería de 113 kWh (capacidad total), una autonomía WLTP superior a 600 kilómetros y versiones de más de 1000 caballos. Su plataforma es la Premium Platform Electric (PPE), la misma del Porsche Macan Eléctrico (información técnica).
Batería
La batería es parte integral del chasis, lo que ayuda a mejorar la rigidez global del vehículo. Contiene 192 celdas de tipo bolsa, con ánodo de grafito y silicio (el grafito es el componente habitual del ánodo, el silicio no) y cátodo de óxido de níquel, manganeso, cobalto y aluminio. El porcentaje de níquel es del 86 %, un valor muy alto y que ayuda a incrementar la densidad energética. De acuerdo con Porsche, la densidad energética de la batería del Cayenne eléctrico es un 7 % superior a la del Taycan.
Con corriente continua, la batería se puede cargar del 10 al 80 % en menos de 16 minutos (más de 300 km de autonomía en 10 minutos). Hasta aproximadamente el 55 % de carga, la potencia de recarga se mantiene por encima de 350 kW. De acuerdo con Porsche, estos datos se logran incluso a una temperatura de 15 ºC. En estaciones de 400 voltios, el Cayenne llega a un máximo de 200 kW.
Una de las opciones que tendrá disponible será la carga por inducción, pero no para el teléfono móvil (que será de serie), sino para la batería del coche. Mediante esta tecnología (que tiene una eficiencia del 90 %), el Cayenne eléctrico cargará a través de corriente alterna a una potencia máxima de 11 kW.
Las celdas están refrigeradas por unos conductos que recorren la superficie inferior y superior de la batería (lo normal es que la refrigeración solo se haga por debajo). Porsche dice además que en vez de emplear ventiladores de caudal, utiliza ventiladores de presión estática, que consumen un 15 % menos de energía. Estos últimos mueven menos caudal del aire que los primeros, pero lo empujan con más fuerza, a más presión.
Habitáculo
No conocemos su aspecto exterior, pero sí el interior (galería). En el salpicadero puede haber hasta tres pantallas: instrumentación, sistema multimedia y una opcional que va frente al pasajero (es de 14,9 pulgadas y en ella se pueden visualizar contenidos audiovisuales incluso en marcha). La del sistema multimedia es «la más grande instalada en un Porsche hasta la fecha», pero curiosamente, la marca no ha dado a conocer su tamaño exacto. Es de tipo OLED y tiene una característica muy poco vista: está curvada en su parte inferior, siguiendo las formas del salpicadero (imagen).
La de la instrumentación también es de tipo OLED, de 14,25 pulgadas y permite personalizar la información mostrada. Opcionalmente, este nuevo Cayenne también podrá tener un sistema de información proyectada en el parabrisas con realidad aumentada y una superficie de proyección equivalente a 87 pulgadas.
Porsche afirma que este modelo tendrá más opciones de personalización del interior que el modelo anterior (el que está a la venta actualmente). Se podrá elegir entre 13 colores para el habitáculo, tapizados de piel, piel sintética o tela y cinco paquetes de «detalles decorativos». Además, también se podrá ir un paso más allá con el programa Porsche Exclusive Manufaktur, que prácticamente no tiene límites en este sentido.
Otro elemento novedoso es que el reposabrazos central y los paneles de las puertas estarán calefactados (además de los asientos). Además, los asientos posteriores contarán con ajustes eléctricos como parte del equipamiento de serie. Por otra parte, en opción, habrá disponible un techo panorámico de cristal con la posibilidad de modificar la transparencia del vidrio en varios niveles (transparente, 40 % de opacidad, 60 % de opacidad y opaco); la parte delantera del techo se puede abrir.
El Cayenne también estrenará un sistema llamado «Mood modes» (algo así como Modos de humor o de estado de ánimo) que coordinará las luces ambientales del interior, el climatizador, el sistema de audio y los asientos para crear diferentes atmósferas en el habitáculo. Por ejemplo, un ambiente calmado, un ambiente alegre o uno que invite a realizar una conducción deportiva.