El Mercedes-Benz Concept GLB es un prototipo de SUV que, por tamaño, se encuentra entre los GLA y GLC actuales. Según Mercedes-Benz, muestra con fidelidad el diseño y muchos de los detalles técnicos que tendrá el modelo de producción que lanzará al mercado en 2020.

Está fabricado sobre la plataforma que Mercedes-Benz utiliza en los Clase A, Clase B y CLA actuales, aunque con una batalla mucho mayor (2,83 metros en lugar de 2,73). La carrocería mide 4,63 metros de longitud, 1,89 metros de anchura y 1,90 metros de altura (incluido el cofre que está colocado sobre el techo), unas proporciones similares a las de un Honda CR-V, un Toyota RAV4 o un Jeep Cherokee.

El Concept GLB tiene un habitáculo con capacidad para acomodar a siete personas distribuidas en tres filas de asientos, una característica que no está presente en ninguno de los modelos citados en los párrafos previos, pero sí en un Land Rover Discovery Sport, que es otra de sus alternativas. La segunda fila tiene unos respaldos divididos en tres partes (en proporciones 40:20:40) con ocho niveles de ajuste en inclinación y una banqueta con 14 cm de ajuste longitudinal. Para acceder a la tercera fila, Mercedes-Benz ha implementado un sistema denominado «Easy-Entry», que permite abatir el respaldo y deslizar la banqueta de la segunda fila mediante un único mando situado en el lateral de la butaca.

El diseño del salpicadero es muy similar al de los Clase A, Clase B y GLA. Uno de los detalles más llamativos está en la instrumentación y en el sistema multimedia, que muestran la información en dos pantallas contiguas sin una cubierta que las tape por la parte superior (imagen). El sistema multimedia es el que Mercedes-Benz denomina MBUX, que entre sus funcionalidades más destacadas está el reconocimiento por voz, capaz de entender frases dichas de manera natural (se activa diciendo «Hola Mercedes», por ejemplo).

Los asientos y los paneles de las puertas están tapizados en una mezcla de piel napa y nobuk de color marrón castaño con pequeños detalles decorativos en naranja, mientras que las molduras decorativas presentes en la consola central y las puertas están fabricadas en madera de nogal de poros abiertos. Además hay algunos elementos acabados en aluminio cepillado, como la pieza que hay frente al copiloto o los asideros de las puertas.

Tiene un motor de gasolina de cuatro cilindros turboalimentado (código M 260) con 224 CV de potencia y una caja de cambios automática de doble embrague con ocho relaciones (8G-Tronic). La tracción total, que funciona mediante un embrague multidisco controlado electrónicamente, varía el reparto de par entre los dos ejes en función de las condiciones de adherencia y del modo de conducción seleccionado. Así, al elegir los programas Eco y Comfort, el reparto es 80:20 (eje delantero / eje trasero), con el programa Sport es de 70:30 y con el Offroad, 50:50.

Aunque se trata de un vehículo muy cercano al modelo de producción, el Concept GLB tiene algunos detalles propios de los prototipos, como por ejemplo una batería de luces de ledes para la iluminación del entorno situadas en la parte superior del parabrisas (imagen), una caja portaequipajes integrada en el techo o unas llantas de 17 pulgadas con neumáticos BF Goodrich All Terrain T/A K02 con marcaje LT (Light Truck, o camión ligero), pensados para practicar una conducción exigente fuera del asfalto.