Me parecen más aconsejables los asientos «deportivos» opcionales que los que tiene de serie. Hemos tenido la ocasión de probar los dos, y los opcionales sujetan mucho el cuerpo de manera más adecuada, aunque la conducción no sea nada parecido a «deportiva».
Los asientos de serie son buenos dimensionalmente y tienen todas las posibilidades de ajuste que me parecen necesarias, pero dejan el cuerpo muy suelto. Esto estaba agravado en la unidad que hemos probado por una tapicería opcional («Cuero Valcona», 2.860 €) muy suave y agradable al tacto, pero resbaladiza.
Varios conductores de distinta estatura y forma de conducir nos hemos sentido a gusto en el A6. Además de la amplitud ajuste y las distancias relativas entre volante, asiento y pedales, puede influir el hecho de que sea un coche automático. En un coche manual, donde hay que llevar el pie hasta el final del recorrido del embrague, puede haber más dificultad para encontrar la postura elegida.
Las unidades que hemos probado tenían las luces opcionales «xenón plus» (1.230 €) pero sólo una tenía el sistema de iluminación en curva (1.730 €). Las luces de xenón me parecen muy buenas porque iluminan un área muy ancha de manera intensa, pero no tanto como para que fuera de esa área solo se aprecie oscuridad.
El sistema de iluminación en curva (con faros giratorios) también funciona muy bien, pero sólo me parece recomendable para quien vaya a circular frecuentemente por carreteras lentas y sin iluminar. En carreteras iluminadas o en las que son muy rápidas (curvas poco cerradas), la ganancia es menor, aunque palpable.
Entre los métodos para manejar distintas funciones del coche, este «MMI» es el que menos me gusta. El mejor me sigue pareciendo el Comand de Mercedes-Benz, que está limitado a cuatro botones en el volante, un sistema inteligible de menús y sub menús, y una pantalla en la instrumentación. Es el único que, con un poco de práctica, se puede manejar con el coche en marcha.
La pantalla táctil del Jaguar S-Type y el «iDrive» requieren apartar la vista de la carretera para mirar a la pantalla, que está algo mejor colocada en el BMW. Prefiero el sistema de Jaguar porque hay menos submenús y también menos funciones que requieren manejar ese sistema.
El del Audi es el que me parece menos conseguido porque, para hacerlo más fácil, han rodeado al botón principal con otros quince botones (sin contar el que sirve para conectar y desconectar el equipo de sonido). Es posible reconocer la posición de cada botón al tacto (sin apartar la vista de la carretera), pero me parece muy difícil retener para qué sirve cada uno. Más comentarios sobre el MMI.
Lo peor de este MMI es la advertencia que hace Audi: «A pesar de su funcionamiento sofisticado y del elevado grado de desarrollo tecnológico, es posible que en un momento dado el sistema no responda». En otro lugar dice: «Si falla el MMI, la solución más sencilla es reinicializar el sistema», y dice el procedimiento para hacerlo (equivalente al «Control + Alt + Supr» de un PC). Es decir, ahora ocurre en un automóvil algo instaurado por la informática: se acepta que el fallo es parte del funcionamiento normal.
Junto con el manual de instrucciones editado en un libro, hay un manual en CD con documentos «html». Este manual en CD está hecho para que se consulte en el coche mediante el sistema MMI, pero también se puede consultar en un ordenador (ejemplo), aunque sin los colores ni la tipografía con que aparece en el monitor del coche.
Aunque en varias ocasiones he criticado que los coches actuales no tengan un manual de instrucciones en formato interactivo, creo que el del A6 no está conseguido. Para consultar algunos datos he acabado recurriendo al libro porque resultaba más rápido (más comentarios sobre este manual en CD).
El sistema de ventilación automático funciona de manera completamente satisfactoria. Después de seleccionar una temperatura, no he tenido que hacer correcciones ni porque hiciera mucho sol, ni porque viajaran varias personas. Es de esos sistemas en los que no entra aire a menos que el ventilador esté funcionando, pero no resulta molesto porque es muy silencioso hasta en velocidades altas.
No hay muchos huecos alrededor del conductor para dejar cosas. El que me parece más útil para dejar cosas pequeñas (y no muchas) es uno que hay bajo una tapa en la consola. Curiosamente, el encendedor está bajo esa tapa, separado del cenicero que están en otro hueco y bajo otra tapa. Las unidades que hemos probado tenían la opción «paquete portaobjetos (135 €), que incluye dos posavasos en apoyabrazos trasero, dos redes detrás de los asientos delanteros, cajones bajo los asientos delanteros y una red a los pies del asiento del acompañante.