Opel Crossland X (2017) | Información general

25/10/2018 |Alfonso Herrero (@alf_reguart)

Con el Crossland X, Opel reemplaza el Meriva. Este modelo tenía forma de monovolumen, en cambio la del Crossland X no es fácilmente definible (Opel lo denomina «crossover urbano»). Es algo más largo que el Corsa y muy similar al Mokka X, el modelo derivado del Corsa con carrocería de tipo todoterreno.

Tanto de coche único o como segundo coche en casa nos parece más recomendable que el Mokka X. El Crossland X es cinco centímetros más bajo y unos 100 kg más ligero (ficha comparativa). Gasta menos, es más ágil en ciudad y, si solo se va a utilizar sobre asfalto, la carencia de un sistema de tracción total o la menor altura libre no suponen ninguna desventaja (es preferible montar unos neumáticos de invierno si se va a conducir por zonas frías). Además, cuesta menos.

Una de las principales diferencias del Crossland X respecto al Mokka X está en el habitáculo. Su aspecto es similar, pero el del Crossland X es más amplio y luminoso (la superficie acristalada es mayor) y además tiene varios elementos funcionales que permiten modular el espacio disponible en función de las necesidades de carga: los asientos traseros, es una opción, se pueden desplazar longitudinalmente 15 cm a través de un carril y los respaldos pueden estar divididos en tres partes (en proporción 40:20:40; de serie lo están en proporción 1/3 y 2/3). El maletero tiene 410 litros de capacidad en su posición menos favorable; si se adelantan los asientos de las plazas traseras, el volumen crece hasta 520 l. Hay más información en las Impresiones del interior.

La versión más asequible tiene un motor de gasolina tricilíndrico de 82 CV y cuesta 15 880 €, un precio menor que el de un Peugeot 2008 1.2 PureTech 82 (que tiene el mismo motor) y mayor que el de un Renault Captur TCe 90 (ficha comparativa). Un Nissan Juke 1.6 94 CV también cuesta más (ficha comparativa). Con la versión Diesel de menor potencia —1.5 Diesel 102 CV: 17 484 €— pasa algo similar. Es más cara que un Ford EcoSport 1.5 TDCi 100 CV o un SsangYong Tivoli D16T de 115 CV (ficha comparativa) pero más barata que un Jeep Renegade 1.6 Multijet 120 CV o un Mazda CX-3 1.8 SKYACTIV-D 115 CV (ficha comparativa). Fichas técnicas con precios y equipamiento del Crossland X.

El rival más directo es el Citroën C3 Aircross. Lo es porque se trata básicamente del mismo coche (ambos se fabrican en la planta de Opel en Figueruelas, Zaragoza). A igualdad de motor el Citroën es más barato (ficha comparativa con el motor de gasolina de 82 CV).

La gama de motores está compuesta por tres de gasolina —1.2 82 CV, 1.2 Turbo 110 CV y 1.2 Turbo 131 CV— y dos Diesel —1.5 102 CV y 1.5 120 CV—. Desde octubre de 2018, la gama Diesel recibe nuevos motores de 1,5 litros de cilindrada en sustitución de los anteriores, de 1,6 litros. La versión menos potente pasa de 99 a 102 caballos, da unas prestaciones similares y tiene un consumo medio homologado más alto. La más potente mantiene la cifra declarada (120 CV) pero ahora sólo está disponible con cambio automático en lugar de manual, por lo que sus prestaciones son notablemente peores pero el consumo es menor (ficha técnica comparativa).

Además, en otoño de 2017, Opel añadió a la gama una variante del motor de gasolina de menor potencia —1.2 82 CV— preparada para funcionar indistintamente con gasolina o con GLP aunque, a la fecha en que actualizamos este artículo, no está a la venta (pero suponemos que es cuestión de tiempo que vuelva a estarlo, tras los cambios efectuados para adaptar la gama a la normativa WLTP). Todos los motores están desarrollados por PSA Peugeot-Citroën, grupo al que ahora también pertenece Opel. Las cajas de cambios pueden ser manuales de cinco o seis velocidades (en función de la versión elegida) o automática con seis relaciones. La tracción es siempre en las ruedas delanteras.



Hemos conducido el Crossland X con los motores de gasolina de 110 y 131 CV y con el antiguo motor Diesel de 120 CV. Resultan muy satisfactorios en términos generales porque dan una respuesta buena, hacen poco ruido y no consumen mucho carburante (al menos, según nuestras primeras impresiones, que ampliamos en el apartado de Impresiones de conducción). El Diesel de 120 CV es silencioso y progresivo, y pasa desapercibido durante la conducción. No sabemos si el nuevo motor 1.5 será igual de agradable. Los de gasolina tienen muy buen rendimiento, aunque son algo más ruidosos cuando se les exige. El cambio manual es algo tosco y el automático, más refinado.

Tras la actualización de octubre de 2018 hay cuatro niveles de equipamiento disponibles: Edition, Design Line, Innovation y Ultimate. Desaparecen los anteriores Selective y Excellence. Desde el nivel más sencillo son de serie elementos como el programador de velocidad, el sistema de reconocimiento de algunas señales de tráfico, la alerta por cambio involuntario de carril o el sistema multimedia IntelliLink con pantalla táctil de siete pulgadas (ficha comparativa de equipamiento). Como elementos propios de los niveles superiores están las luces y el limpiaparabrisas automáticos, la iluminación interior mediante ledes o la pintura bitono para la carrocería. Desde verano de 2017 están disponibles elementos de seguridad adicionales como el servofreno de emergencia con detección de obstáculos y peatones o la alerta por cansancio.

Desde finales de 2018 se podrá elegir la tapicería de cuero como opción en las versiones con nivel Innovation y Ultimate, en combinación con los «asientos delanteros ergonómicos AGR», que sí se pueden adquirir ya.

Además, opcionalmente puede tener elementos que aún no son demasiado frecuentes en vehículos de este tamaño. Es el caso de los faros de ledes con alumbrado adaptativo, el sistema de proyección de información sobre una lámina de plástico (Head-up Display; uno de los mejores que hemos probado) o la zona de recarga inalámbrica para móviles. En cambio, el freno de estacionamiento sigue siendo de palanca en vez de eléctrico (imagen) y su palanca está dispuesta de una forma que no nos parece la más fácil de accionar. El techo puede ser de cristal —no se abre—.

Según nuestro comparador de seguros, una póliza a todo riesgo sin franquicia para un Crossland X 1.2 Turbo 110 CV con el nivel de equipamiento Selective tiene un coste mínimo de 469 € y la ofrece la compañía Nuez Seguros. El tomador es una mujer de 35 años con más de 10 de carné, que recorre unos 10 000 km anuales, aparca en un garaje comunitario y reside en Valladolid.