Según nuestras mediciones, el KIA Cerato de cuatro puertas tiene las mismas medidas interiores que el Hyundai Elantra con idéntica carrocería. Es algo normal teniendo en cuenta que parten de la misma base. Lo bueno de sus dimensiones interiores es la distancia disponible para las plazas traseras; en el resto de los aspectos no destaca.
El en Cerato de cinco puertas las dimensiones interiores son exactamente iguales que en el de cuatro, salvo la altura disponible para la cabeza de las plazas traseras, que tiene cuatro centímetros más. Estos centímetros adicionales pueden ser muy importantes si en las plazas traseras viajan personas altas.
Donde se nota la diferencia de longitud entre la carrocería de cinco puertas y la de cuatro es en el maletero. La de cuatro puertas tiene un maletero con un fondo de 96 centímetros, por 79 cm que tiene la versión con portón.
La versión de cuatro puertas tiene un acceso al maletero estrecho y un interior menos funcional. El de cinco puertas tiene un acceso mucho más cómodo y dos huecos grandes de plástico debajo del piso y alrededor de la rueda de repuesto. Estos dos grandes cajones son muy útiles para guardar cosas, pero ocupan mucho espacio y hace que el plano del maletero quede más bien alto. El volumen del maletero que da KIA para la versión de cinco puertas es 538 litros; este dato incluye parte volumen que ocupan los cajones debajo del piso. El de cuatro puertas mide 345 litros de volumen (poco para su longitud).
El interior tiene una combinación de materiales que parece adecuada teniendo el cuenta el precio de partida. Hay detalles buenos; la parte superior del salpicadero está fabricada de plástico blando, la guantera tiene apertura ralentizada y hay luces en la parte interior de las puertas delanteras. Sin embargo, me parece poco generoso que en las versiones «LX» no haya luz de lectura de mapas o iluminación para las plazas delanteras (eso sí hay un plafón pero en el centro del coche que es incómodo accionar).