La conducción asistida sigue avanzando y BMW se ha convertido en el primer fabricante en recibir la aprobación internacional bajo la nueva regulación DCAS (Driver Control Assistance Systems), que establece un marco normativo para sistemas de asistencia al conductor de nivel 2.
Esta certificación permite que sus clientes disfruten de funciones como el Motorway Assistant, cumpliendo con los estándares de seguridad de la UNECE (Comisión Económica para Europa de la ONU). Inicialmente, BMW ofrecerá estas funciones en Alemania desde el lanzamiento del iX3.
¿Qué es eso del nivel 2?
La Sociedad de Ingenieros de la Automoción (SAE) estableció cinco niveles para clasificar la conducción autónoma. Actualmente, la mayoría de coches están encuadrados en el nivel 2 y tan solo BMW y Mercedes-Benz ha conseguido la homologación en Europa para que un par de modelos funcionen como nivel 3 en entornos muy concretos.
Lo que complica el salto del nivel 2 al 3, es que el 3 el conductor puede dejar de mirar la carretera mientras el coche se autoconduce. En caso de problema, el vehículo debe ser capaz de avisarle con un margen de tiempo prudencial para retomar el control.
Con la dificultad que supone conseguir ese margen de seguridad, el nivel 2 se ha convertido en un batiburrillo de posibilidades. En la mayoría de coches no se puede soltar nunca el volante (por eso las alarmas cuando se deja de hacer), pero hay algunos en los que el conductor puede soltar las manos, eso sí, sin dejar de prestar atención a la carretera. En ámbitos técnicos se habla de niveles 2, 2+ e incluso 2++.
¿Cómo funciona el Motorway Assistant de BMW?
Este sistema de asistencia permite a los conductores del BMW iX3 retirar sus manos del volante a velocidades de hasta 130 km/h en autopista, aunque deben permanecer atentos y preparados para intervenir en cualquier momento. El sistema también se encarga de mantener el vehículo dentro del carril. Esto no es novedoso, el sistema BlueCruise de Ford también lo hace.
Lo que ha logrado BMW al obtener la aprobación DCAS es que el coche pueda hacer cambios de carril automáticamente, simplemente con la mirada del conductor, que autoriza la maniobra con un vistazo al retrovisor.
Esto no solo sirve para adelantar, BMW dice que si está activada una ruta en el navegador (el de BMW, no servirá con Google Maps, Waze u otros), también se podrá dirigir el coche hacia la salida de la autopista sin usar las manos.
Legalmente, este tipo de sistemas está permitido siempre que se cumpla la normativa DCAS, que establece que el conductor debe poder retomar el control en cualquier momento y que la intervención del sistema sea predecible y reproducible. Esto significa que la función no exime al conductor de su responsabilidad, sino que es un soporte avanzado más para mejorar la seguridad.
Otras funciones interesantes
El iX3 puede detenerse automáticamente en semáforos y reanudar la marcha sin intervención del conductor gracias a la función City Assistant. BMW afirma que irá introduciendo más funciones avanzadas a través de actualizaciones de software.
BMW también ha aprovechado para presumir del BMW Symbiotic Drive. Este concepto se basa en la interacción fluida entre la asistencia y el conductor, haciendo que este último pueda influir en todo momento mediante ligeras intervenciones en la dirección o en el frenado del vehículo. Mientras tanto, el sistema sigue activo para ofrecer soporte.
Impacto y diferencias con la normativa actual
Hasta ahora, sistemas similares habían sido aprobados mediante excepciones temporales otorgadas por autoridades nacionales, como la KBA en Alemania. Con DCAS, estas autorizaciones especiales ya no son necesarias, ya que la homologación internacional permite que BMW ofrezca sus asistentes en toda Europa y en otros países miembros de la ECE sin recurrir a permisos individuales.
Esto marca la diferencia frente a la normativa vigente en muchos países, donde funciones de manos libres estaban limitadas o sujetas a una aprobación excepcional. Además, la regulación internacional exige que los sistemas cumplan con criterios de seguridad estrictos, pruebas de reproducibilidad y la obligación de que el conductor mantenga la atención, cerrando vacíos legales y unificando criterios en los distintos mercados.
La llegada de DCAS también abre la puerta a futuras innovaciones. A partir de ahora, BMW podrá actualizar y añadir funciones mediante software, siempre que sigan cumpliendo con la regulación. Esto permitirá que los vehículos evolucionen sin necesidad de modificaciones físicas o nuevas homologaciones individuales en cada país.
