Volkswagen Scirocco (2008) | Impresiones del interior

16/04/2013 |Alfonso Herrero

El salpicadero, el cuadro de instrumentos, el volante y la consola central son muy similares a los del Golf 6 —dejó de venderse a finales de 2012, cuando llegó al mercado el Golf 7—. El Scirocco ha sido desarrollado en base al Golf 6. El tirador interior de las puertas, de forma triangular (imagen), es diferente al de cualquiera de los dos Golf.

Respecto al Golf, hay una pérdida clara en amplitud y funcionalidad del habitáculo, sobre todo en las plazas traseras, que lo asemeja más a un cupé de cuatro plazas que a un turismo de tres puertas. Creo que es algo que hay que tener en cuenta a la hora de decidirse entre uno u otro.

Comparándolo con un modelo muy parecido a él, el Volvo C30 —retirado del mercado a finales de 2012—, el Scirocco tiene unas plazas traseras con más espacio para las piernas, menos anchura y una altura libre semejante. Delante hay pocas diferencias entre uno y otro, pero la mayor amplitud de los reglajes del asiento y del volante del Volkswagen permite que conductores de diversa estatura encuentren una posición de conducción más adecuada.

Los asientos delanteros que tiene de serie sujetan muy bien el cuerpo, tanto la espalda como los muslos. De los tapizados posibles, el de redecilla nos parece el más recomendable porque transpira mucho mejor que el de cuero. Las bolsas de las puertas tienen un recubrimiento de tela que impide que los objetos que se depositen en ellas hagan ruido al moverse.

Los conductores de mayor estatura notarán que el techo cae por el lateral más de lo normal, por lo que tendrán menos visibilidad —por ejemplo, les resultará difícil ver si un semáforo se pone verde—. Otro inconveniente de la forma de la carrocería es que la vista en tres cuartos traseros es muy reducida, algo molesto cuando hay que incorporarse oblicuamente a una vía.

La visibilidad hacia atrás, a través del retrovisor, también es reducida, independientemente de la talla del conductor, si bien cuanto más alto sea o más alto esté sentado, más reducido es el campo de visión.

Esto es debido a la caída pronunciada del techo en la zona trasera, al pequeño tamaño de la luna y a que los apoyacabezas traseros –fijos e integrados en el respaldo– ocupan una superficie amplia. Para paliar este inconveniente, los reposacabezas son huecos (imagen).

El acceso a las plazas traseras es correcto, puesto que los asientos delanteros se pueden desplazar lo suficiente hacia delante y, además, tienen memoria —vuelven a su posición original después de abatirlos—. El gran tamaño de las puertas facilita el acceso a estas plazas pero, por contra, requiere que haya una distancia generosa entre la carrocería y el obstáculo más próximo, por ejemplo, el coche que aparca en la plaza de al lado, para que la puerta se pueda abrir y deje un hueco suficiente para poder entrar.

El mejor dato en las plazas traseras es el espacio para las piernas, pero falta altura para personas de más de 1,75 metros —Volkswagen asegura que entran bien adultos de 1,90 metros—. Las dos plazas traseras tienen asientos individuales, que sujetan bien, pero tienen un respaldo algo estrecho y no especialmente cómodo para personas de complexión normal.

El interior del Scirocco está cuidado. Tiene materiales de recubrimiento agradables y bien hechos. A mediados de 2009 recibió varios cambios (más información).

Maletero y huecos para objetos

El maletero no es grande. Tiene 292 litros de capacidad. En un Golf 7 hay 380 litros —en el Golf 6 había 350 litros disponibles—. El volumen puede llegar a 755 litros abatiendo los asientos traseros.

El inconveniente del maletero del Scirocco es que el borde de carga está muy lejos del suelo. Hay unos anclajes destinados a sujetar una red que separa las plazas delanteras del resto del habitáculo para evitar que la carga pueda llegar a golpear al conductor.

Las versiones que se venden en España tienen rueda de repuesto de emergencia. El maletero sólo se puede abrir desde el mando a distancia o desde un botón que hay en la parte interior de la puerta del conductor.

Por el habitáculo hay repartidos diversos huecos donde dejar pequeños objetos. El único con tapa, además de la guantera, es el que hay bajo el apoyabrazos central delantero y está ocupado casi en su totalidad con el modulo de la conexión USB o iPod, si lo lleva.