Toyota Corolla Verso 2.0 D4D (2004) | Cinco plazas cómodas

17/05/2004 |Enrique Calle

Es un coche que debe comprarse como cinco plazas. No hay que pensar en los dos pequeños asientos de la parte trasera como una solución para transportar a dos personas de forma habitual, sino como una solución de emergencia (casi extrema). Lo peor de estos asientos es el escaso espacio que queda para las piernas y que la banqueta está tan cerca del suelo que obliga a llevar las rodillas muy elevadas; una posición ciertamente incómoda.

Una solución es adelantar la fila de asientos intermedia, con lo que se gana algo de espacio detrás, pero tampoco soluciona mucho el problema. La segunda fila de asientos tiene 140 mm de recorrido longitudinal y los respaldos se pueden inclinar 30 grados.

El rango de edad para los ocupantes de estas plazas no es amplio. Algunas sillas infantiles no caben, sobre todo si obligan al niño al llevar las piernas estiradas (golpearían con el respaldo de las segunda fila de asientos) y algunos capazos que se colocan en sentido contrario a la marcha del coche son muy voluminosos. Quizá (no lo he visto) estos asientos sean adecuados para aquellos grupos de edad que sólo necesiten un cojín elevador (algo que viene muy bien cuando la banqueta está tan cerca del suelo).

Por espacio, es menos indicado para llevar pasajeros en la tercera fila de asientos que un Touran y que un Zafira; aunque las diferencias entre los mejores y los peores son pequeñas. Todas las plazas tienen un cinturón de seguridad de tres puntos de anclaje.

En la segunda fila de asientos hay la misma anchura entre hombros que en un Touran (142 cm), que es un dato claramente por encima de la media y por ello más recomendable que otros para cinco ocupantes.

El espacio para las piernas con el asiento en la posición más retrasada es más que de sobra para viajar cómodo pero no llega a lo que tiene otros de cinco plazas como un C-Max o un Scénic (no Grand Scénic). Incluso hay otros monovolúmenes más pequeños con mucho más espacio, como un Opel Meriva o un Mercedes Clase A Largo.

El Corolla no es un monovolumen con mucha capacidad de maletero (tabla comparativa). Para quien no necesite el máximo volumen de carga y sí una superficie de carga plana creo que puede ser una alternativa muy a tener en cuenta. Los asientos de la segunda y tercera fila son muy fáciles y ligeros de abatir, se hace con un solo movimiento (los de la segunda fila tirando de una cuerda y los de la última fila tirando de una palanca). Toyota lo denomina Easy Flat-7. En otros monovolúmenes para conseguir una superficie de carga más o menos plana hay que quitar los asientos, que habitualmente son pesados y difíciles de transportar.

Cuando los cinco asientos de la segunda y tercera fila están abatidos queda una superficie de carga completamente plana de 170 cm de longitud; la anchura mínima (limitada por los pasos de rueda a la altura de la tercera fila de asientos) queda en 107 centímetros.

Ninguno de los plásticos que tiene en el interior están almohadillados ni laminados con goma o pintura, pero creo que a pesar de ello dan buena impresión por aspecto y tacto. Sí hay superficies blandas en el fondo de algunos huecos portaobjetos y guanteras.

Lo que no me ha gustado es que hay muchas uniones irregulares entre las piezas que componen el salpicadero; no dan la impresión de estar mal cortadas, pero no se ha conseguido una unión fina entre ellas. Probablemente es una carencia derivada del proceso de ensamblaje en fábrica. Sin embargo, no se escucha ningún ruido extraño rodando por carreteras muy rotas.

Tiene detalles buenos, como asideros con muelles de silicona (que ralentizan su movimiento), una tela muy agradable al tacto que recubre los montantes, techo y parasoles.