El TATA Indica es un utilitario que mide 3.675 mm de largo, casi como un Citroën C2 y mayor que un Fiat Panda o un KIA Picanto (ambos miden 3,5 m). Está disponible únicamente con carrocería de cinco puertas y una gama de dos motores, uno de gasolina con 85 CV o un turbodiésel de 71 CV. Está a la venta desde 8.272 € con motor de gasolina (MPFi) y 10.272 € con motor Diesel (Dicor). Todos los precios del TATA y de otros modelos mostrados en este artículo incluyen el descuento promocional vigente para cada uno.

El Indica está disponible en tres niveles de equipamiento GLS, GLX y Sport. Todos los Tata Indica tienen de serie aire acondicionado, cierre centralizado con mando a distancia, cuatro elevalunas eléctricos, asiento posterior abatible, radio con lector de MP3, cinco plazas (con reposacabezas) y dirección asistida. A la versión más barata le falta antibloqueo de frenos ABS.

El Indica en su versión con motor de gasolina, no es el coche más barato que hay a la venta en España, pero no hay ningún coche más barato con aire acondicionado. Eso sí, salvo el TATA todos los utilitarios tienen ABS de serie.

Para adquirir el ABS hay que optar por la versión GLX, 9.172 € (que sobre el GLS, además viene con airbag frontal para el pasajero y faros antiniebla). Incluso esta versión tiene un precio ventajoso: si se añade a un Fiat Panda 1.1 Active, todo el equipamiento que tiene de serie el TATA Indica GLX, el Panda es 500 € más costoso, con una carrocería más pequeña y un motor menos potente.

La versión del Indica con motor Diesel también tiene un precio interesante: a igualdad de equipamiento con otros utilitarios Diesel, es con diferencia, el más barato que hay. No obstante, la diferencia de 2.000 € entre la versión Diesel del Indica y el gasolina es muy grande, y difícil de amortizar salvo que se realicen muchos kilómetros al año (y este TATA no es un coche para viajar mucho).

El interior del TATA Indica está muy bien aprovechado porque hay sitio suficiente para cuatro adultos; teniendo en cuenta su longitud, lo más llamativo es el espacio longitudinal que hay para los ocupantes de las plazas traseras. Su maletero tiene 220 l de capacidad, que es un volumen normal para un coche de su tamaño (un Suzuki Swift mide 3,7 m y tiene 213 l y un Citroën C2 193 l).

Lo que no tiene el TATA Indica es una calidad de acabado a la altura el de los utilitarios más baratos de otras marcas; un Fiat Seicento o un Chevrolet Matiz están claramente mejor hechos y tienen un aspecto fresco. El Indica da sensación de coche antiguo y poco cuidado. La tolerancias en los ajustes de muchas piezas del interior son deficientes; al margen de los desajustes, hay numerosos elementos del interior que quedan como un añadido, como si se hubieran colocado después de que el coche saliera de la cadena de montaje, sin que el coche estuviera previsto para ellos (como las tapa del airbag de acompañante, los asideros del techo o el plafón de iluminación del maletero).

Un Dacia Logan está claramente por encima del TATA Indica en calidad de acabado y es mejor coche desde casi todo punto de vista. Si se valora este la mayor calidad que aporta el Dacia puede compensar pagar su mayor precio (a igualdad de de equipamiento); el Dacia Logan también es un coche mayor por dentro y por fuera y con más maletero. Un Fiat Panda o un Fiat Cinquecento pueden ser mejores alternativas como coche para ciudad y si no de da valor al mayor espacio interior que tiene el Indica.

He conducido brevemente la versión Diesel y me ha dado la sensación de que la respuesta al acelerador es relativamente enérgica para 71 CV de potencia. A margen de que la aspereza de este motor Diesel es notable, hasta una velocidad no muy alta el TATA Indica no tiene fuentes de ruido que lo hagan incómodo, ni su suspensión es seca o dura. Lo que más puede cansar a la larga son los asientos, porque no ofrecen un apoyo cómodo y apenas sujetan el cuerpo.

El motor de gasolina tiene 1,4 l de cilindrada y da 85 CV. Con él, el Indica alcanza 160 km/h y obtiene un consumo medio de 7,4 l/100. No es un consumo bajo en relación a sus prestaciones, ni sus prestaciones son rápidas en relación a su potencia.

El motor Diesel es de 1,4 l, tiene de inyección directa y conducto común. Da una velocidad máxima de 155 km/h, acelera de 0 a 100 km/h en 15,2 s y consume 6,0 l/100km de media. Con este motor tampoco es un coche rápido y, sobre todo, su consumo es mucho mayor a otros coches semejantes.

La caja de cambios es, en ambos casos, de cinco relaciones. No puede tener una automática. Los dos motores cumplen la norma anticontaminación Euro 4.

La suspensión es independiente delante es de tipo McPherson y la trasera de rueda tirada. Los frenos delanteros son de disco (231 mm) y de tambor los traseros.