En el Impreza WRX hay leves cambios en la estructura de la carrocería, el diseño exterior, el motor, los frenos, la suspensión, los acabados interiores y el equipamiento.

La mayor modificación mecánica está en el motor del WRX, que pasa de 218 a 224 CV (en ambos casos a 5.600 rpm); el cambio principal es que ha sido adaptado para utilizar gasolina de 98 octano. Sigue siendo el mismo motor bóxer turboalimentado de cuatro cilindros, 2 litros de cilindrada y 16 válvulas al que Subaru ha mejorado la respuesta al acelerador mediante un colector de escape nuevo (que facilita la circulación del gas y es más resistente al calor), una nueva gestión electrónica, nuevas válvulas de admisión huecas (para reducir inercias) y válvulas de escape refrigeradas por sodio en su interior. Con estos cambios también se ha incrementado ligeramente el par máximo, que ha subido de 292 Nm a 3.600 rpm hasta 300 Nm a 4.500 rpm.

El motor del STI no aumenta de potencia (265 CV), pero tiene un difusor de agua para el intercooler más eficaz. Mediante un botón situado en el salpicadero (imagen), el conductor puede pulverizar agua sobre dicho elemento y así lograr una mayor refrigeración del aire de admisión. Subaru anuncia la misma capacidad de aceleración (0 a 100 km/h en 5,5 s) y una mayor velocidad máxima (244 km/h y antes 238 km/h).

El Impreza 2.0 WRX sigue acelerando de de 0 a 100 km/h en 6,2 s (6,3 s el WRX Sports Wagon) y es ligeramente más veloz: 232 km/h (230 km/h el familiar). El consumo medio es de 9,2 litros/100 km en este modelo y 11,1 litros/100 km en el STI, es decir, se ha reducido 1 litro/100 km en ambos casos.

Su mayor velocidad máxima se debe, en buena medida, a la mejor aerodinámica obtenida con los cambios introducidos en la carrocería, si bien no parece tampoco uno de los coches más aerodinámicos de su categoría. Son nuevos los paragolpes (el delantero tiene tomas de aire más grandes para refrigerar el motor), la parrilla frontal, los faros delanteros y traseros, el capó, los retrovisores exteriores y la forma de los aletines de los pasos de rueda. Los faros delanteros son de doble parábola y en Subaru aseguran que aumentan un 30 % la capacidad de iluminación respecto a los anteriores faros.

Sobre el capó se ha colocado una toma de aire de nuevo diseño para permitir una mayor refrigeración del intercooler. En el STI es 30 mm más alta. El modelo más potente lleva además unos deflectores específicos en los laterales del paragolpes, para canalizar mejor el flujo de aire, y un alerón trasero de mayores dimensiones realizado por «Prodrive Style» (que ya se ofrecía en otros mercados pero no en España).

La versión con carrocería familiar (Sports Wagon) tiene en la parte superior de la luna trasera un alerón de nuevo diseño que mejora el flujo de aire. Para el 2.0 WRX de cuatro puertas también se ofrece un alerón opcional como accesorio (900 €). El trabajo aerodinámico se completa con unos nuevos deflectores situados sobre las escobillas del limpiaparabrisas (antes sobre el brazo del limpia).

Las suspensiones reciben ligeros cambios en el Impreza 2.0 WRX (sedán y familiar). Ahora llevan resortes helicoidales diferentes y nuevos amortiguadores invertidos que llevan válvulas de diámetro variable (permiten cambiar la dureza del amortiguador en diferentes frecuencias). La versión STI no cambia de amortiguadores, pero sí tiene casquillos distintos; según Subaru, esto evita modificaciones en la alineación de las ruedas cuando el coche está fuertemente apoyado. Para incrementar la rigidez torsional se han aplicado nuevos refuerzos en las zonas más críticas de la estructura.

El equipo de frenos apenas tiene cambios. El 2.0 WRX mantiene la misma medida de discos ventilados (294 mm de diámetro delante y 290 mm detrás), pero tiene unas pastillas de freno con mayor superficie de fricción. Lleva delante pinzas de cuatro pistones y detrás de doble pistón. En el STI no cambia nada: tiene los mismos discos ventilados de 330 mm delante y 305 mm detrás y pinzas Brembo de aluminio con cuatro pistones delante y dos pistones detrás. En todos los Impreza se introduce un nuevo ABS con repartidor electrónico de frenada (EBD).