Nunca hasta ahora SEAT había tenido un coche con la calidad de materiales y el refinamiento interior del Exeo. La sensación de ir sentado en un Exeo es casi idéntica a ir sentado en un Audi A4 de la generación anterior (más información), con alguna excepción: los paneles que hay en la mitad inferior del salpicadero son de un plástico duro, con buena apariencia, aunque peores que los acolchados de aquel A4. El salpicadero del Exeo proviene del A4 Cabrio.

El tacto de los mandos y botones y el cuidado por los detalles es notable para un coche de su precio.

El mayor inconveniente de que tenga tanta relación con la anterior berlina media de Audi es la falta de espacio en los asientos traseros: hay poca anchura y espacio para las piernas. En una prueba del A4 lanzado en 2001 resumíamos el interior del Audi A4 de la siguiente forma: «Mucha calidad y poco espacio». Varios años después sigue vigente (más información). SEAT ha solucionado parcialmente este inconveniente porque desde principios de 2011 los asientos posteriores del Exeo tienen 4 cm más de espacio longitudinal para las piernas, que se consiguen (según SEAT) con la reducción del mullido de los respaldos delanteros y gracias a que se ha retrasado ligeramente la estructura de la segunda fila de asientos (sin restar espacio al maletero).

El puesto de conducción nos parece excelente, especialmente para quien prefiera ir sentado cerca del suelo, algo cada vez menos frecuente en las berlinas modernas.Los asientos de todas las versiones son muy cómodos, de una dureza adecuada para viajar sobre ellos varias horas seguidas y con muy buena sujeción lateral. Tienen un gran recorrido longitudinal y en altura para adaptarse a la mayoría de estaturas y gustos.

Es especialmente grande la regulación de altura, con ocho centímetros de desplazamiento y la longitudinal, que hace que el asiento pueda ir muy cerca o muy lejos del volante. Lo que no nos ha gustado es que el reposabrazos que hay entre los asientos molesta cuando hay que cambiar de marcha. Por esa razón, siempre lo hemos llevado levantado.

Los asientos tapizados de cuero resultan claramente más incómodos que los tapizados con material textil. Esto es así porque el material de recubrimiento (cuero) es más duro. También los asientos de cuero dan la sensación de ofrecer mayor sujeción lateral, pero no creemos que compense.

En función de los niveles de equipamiento hay ciertas diferencias en el interior. Las versiones más económicas («Reference») tienen un volante de plástico que no tiene un tacto áspero como es frecuente en muchos volantes fabricados en este material. Otra diferencia de la versión más económica es que el cajón que hay en la parte superior de la consola no lleva tapa.

La conexión Bluetooth funciona muy bien, no tanto por la calidad de sonido que da, sino por su facilidad para vincularlo con el teléfono móvil y porque, automáticamente, «lee» la agenda y el conductor puede consultarla desde la pantalla de la instrumentación utilizando unos mandos en el volante.

El climatizador no tiene un funcionamiento completamente satisfactorio porque tiene poca capacidad para enfriar el habitáculo con rapidez cuando el coche ha estado mucho rato al sol. No lo hemos probado con tiempo frío. Opcionalmente, puede tener un dispositivo que reconoce si la calidad de aire del exterior es adecuada.

El maletero tiene 460 litros de capacidad. Está en la media de las berlinas de tamaño similar. Así, por ejemplo, es un volumen mayor que el del Peugeot 407, similar al del Renault Laguna e inferior al del Toyota Avensis (ficha comparativa). Tiene una boca de carga pequeña para cargar objetos de cierto volumen. El maletero de la versión familiar (Exeo ST) tiene 18 litros menos de volumen, pero es mucho más fácil de cargar (más información). Todas las versiones del Exeo llevan rueda de repuesto del mismo tamaño que las otras cuatro —salvo si se opta por las llantas de 18 pulgadas—.