Renault Twizy Z.E. (2012) | Información general

22/03/2012 |Alfonso Herrero

El Renault Twizy es un cuadriciclo de propulsión eléctrica que mide 2,32 metros de longitud. Tiene dos plazas, situadas una detrás de la otra (imagen).

Hay dos versiones que se diferencian por la potencia máxima del motor: 5 y 17 caballos de potencia. Y para ninguna de ellas es necesario tener carné de conducir (tipo B). La primera se puede conducir con la licencia AM —ciclomotor— y la otra con el carné A1 de motocicletas —hasta 125 cm³—. La variante de 17 CV alcanza 80 km/h, mientras que la de 5 CV sólo llega a 45 km/h. De ahí el origen del nombre de las versiones: Twizy 80 y Twizy 45.

He probado la versión más potente por carretera. Aunque Renault la cita como alternativa al smart fortwo y el Toyota iQ, no me parece comparable a ninguno de ellos por confort —el habitáculo va abierto, no tiene ni calefacción ni aire acondicionado, la suspensión es muy dura y los asientos mucho menos cómodos—. Tampoco creo que lo sea por seguridad: no responde como un turismo en situaciones límite y, además, no puede tener antibloqueo de frenos ni control de estabilidad. Creo que el Twizy se parece más a una moto, con la que también comparte algunas ventajas e inconvenientes. Entre las ventajas está que es más seguro por las dos ruedas adicionales, porque tiene una carrocería que es la que recibe los golpes y porque tiene cinturones de seguridad y un airbag. En el apartado de impresiones de conducción hay más información.

En uno de los blogs de km77.com, el de Celedonio y Cogolludo, hay fotos de la presentación y algunos vídeos del Twizy en parado y en movimiento.

El Twizy 45 se puede adquirir desde 4917 € contando las subvención estatal vigente (sin ella, el precio es 6990 €). Y el Twizy 80 por 5409 €. Hay tres variantes de equipamiento, llamadas «Urban», «Color» y «Technic»—. Las reservas se pueden hacer en la web www.renault-ze.com. El precio no incluye la batería ya que Renault, tanto en el Twizy como en el resto de modelos eléctricos, la alquila por una cuota mensual. En el caso del Twizy es 50 euros al mes (en el caso de un alquiler de 36 meses con un máximo de 7500 km al año, que supone 600 euros al año).

Recargar completamente la batería cuesta aproximadamente un euro y tres horas y media. Se hace en una toma de corriente de 230 V.

Renault da unos datos de autonomía que no se pueden comparar con los que publicamos de otros coches eléctricos en km77.com. Los 100 km de autonomía del Twizy 80 son según la norma ECE15, que corresponde a un ciclo urbano (el Twizy no pasa, en el mejor de los casos, de 80 km/h, así que es imposible hacer el recorrido mixto en el que el coche debe circular a 120 km/h).

Por lo que he visto en la presentación, una carga completa de la batería da para recorrer un mínimo de unos 50 km por carretera. Siendo cuidadoso, no debería ser difícil alcanzar los 70 km. Como el Twizy no tiene ningún sistema de climatización que gaste energía de la batería, la autonomía disponible no variará con la epoca del año por este motivo. Sí cambirá porque las baterías pierden rendimiento cuando las temperaturas son extremas (mucho frío o mucho calor)..

El habitáculo queda expuesto al exterior porque el Twizy no tiene puertas. Éstas se pueden colocar como accesorio (unos 500 euros). Son de plástico, una parte coloreado y otra transparente. Se abren hacia adelante y hacia arriba, formando un ángulo de más de 90º (imagen), sin tener que hacer apenas fuerza (el mecanismo me parece que está muy bien conseguido). En el exterior no hay tirador para abrirlas; como no hay ventanilla, no es complicado accionar el tirador del interior. Que las puertas se abran hacia arriba permite aparcar el coche cerca de una pared u otro obstáculo.

Si llueve, el agua moja el habitáculo y, por tanto, a sus ocupantes. Algo que también ocurre con el agua del limpiaparabrisas, que acaba escurriendo por una especie de derivabrisas de plástico transparente que hay en la puerta, junto al marco del parabrisas. El agua que hay en la calzada también puede acabar entrando al interior al ser proyectada por las ruedas traseras si no se circula despacio. Así que, como en las motos, hay que abrigarse convenientemente para conducirlo cuando hace frío.

El parabrisas puede tener una resistencia eléctica para desempañarlo. El limpiaparabrisas es de serie.

Hay dos asientos. Acceder al trasero no es cómodo pero una vez en él se va cómodo (siempre que se tenga una talla normal). El ocupante del trasero va con las piernas abiertas, colocadas a los lados del asiento delantero. Éste tiene un único ajuste, el de proximidad al salpicadero; el respaldo es fijo y el apoyacabezas también. El mullido de los dos asientos es duro pero no me ha parecido incómodo durante los recorridos que he hecho con el Twizy. A mí no me ha dado sensación de claustrofobia porque las puertas quedan muy alejadas de los hombros y la altura es suficiente para un conductor de casi dos metros de estatura.

En la parte superior del salpicadero hay dos guanteras, la de la derecha con llave y la del lado contrario sin (y con una toma de corriente de 12 V). Ahí caben cosas como la gafas, unas llaves o unos guantes. Si se lleva un bolso, la única posibilidad de dejarlo en un sitio del que no lo puedan coger mientras se está parado en un semáforo, es en un hueco que hay tras el respaldo trasero. La pieza que hace de mullido del respaldo es la tapa y se puede bloquear con llave. Ese espacio tiene 31 litros de capacidad. El Twizy no tiene un compartimento exterior que haga de maletero pero hay un accesorio que sirve de maleta-mochila y que se coloca en el asiento trasero.

Otros modelos eléctricos de pequeño tamaño (mayor que el Renault) a la venta en España son el Tazzari Zero, el smart fortwo electric drive, el Think City, el Citroën C-Zero, el Mitsubishi i-MiEV o el Peugeot iOn. Todos se matriculan como turismos excepto el Tazzari, que es también un cuadriciclo.

El Twizy se fabrica en la planta que Renault tiene en Valladolid (España). Galería con imágenes del proceso de fabricación.