El habitáculo del 508 SW tiene dos ventajas frente al del 508 berlina: cinco centímetros más de altura libre hasta el techo en las plazas posteriores y un maletero con 43 litros más de capacidad. Salvo por estos detalles, todo lo que contamos en estas Impresiones del interior es perfectamente aplicable al 508 SW.

El maletero tiene un total de 530 litros y se encuentra en un término medio frente al de sus alternativas. Así hay modelos que tienen uno mucho más grande, como el Volkswagen Passat Variant (540 l) o el Škoda Superb Combi (660 l), y otros que tienen uno más pequeño, como el Mercedes-Benz Clase C Estate (460 l) o el Audi A4 Avant (495 l). Listado de turismos familiares de entre 4,7 y 5,0 metros de longitud, ordenado por capacidad de maletero.

Las formas del mismo son diáfanas y facilitan mucho el aprovechamiento del espacio disponible (imagen). El borde de carga está a 67 centímetros de altura, que es mucho para tratarse de una berlina familiar (en un Volkswagen Passat Variant, por ejemplo, está a 55 cm). De serie tiene algunos elementos que ayudan a mantener la carga organizada y bien sujeta, como unas argollas metálicas con aspecto muy robusto (hay cuatro, una en cada esquina), dos ganchos de plástico en cada una de las paredes laterales (imagen), un par de cintas elásticas (imagen) y un pequeño receptáculo en la parte interna del portón que sirve para guardar los triángulos de señalización (imagen). 

Adicionalmente se pueden pedir dos carriles de metal colocados longitudinalmente respecto a la marcha (para anclar argollas móviles o redes; imagen), una red para separar el espacio de carga del habitáculo (tanto por detrás de los asientos traseros como detrás de los delanteros; imagen) y una trampilla en el respaldo del asiento central posterior que facilita el transporte de objetos largos y estrechos (como unos esquís o una alfombra; imagen).

Los respaldos de los asientos posteriores están divididos en dos porciones (siguen las proporciones 60:40) y se pueden abatir mediante unos mandos que hay en la parte superior de los mismos (imagen) o mediante unos tiradores situados en las paredes laterales del maletero (imagen). Al llevar a cabo esta acción, el volumen disponible asciende hasta los 1780 litros, aunque la superficie resultante no queda completamente plana, sino en ligera pendiente ascendente (imagen). En el extremo de la base del maletero hay un listón de metal de unos seis centímetros de altura que impide que algunos objetos puedan salirse al abrir el portón, si se han desplazado durante la marcha.

No queda mucho espacio de carga por encima de la cortinilla que cubre el maletero. Eso se debe, al menos en parte, a que la altura total de la carrocería del Peugeot 508 SW es claramente menor que la de sus principales alternativas: 1420 mm (80 mm menos que un Ford Mondeo Sportbreak o un Opel Insignia Sports Tourer, por ejemplo; ficha comparativa). El portón puede estar motorizado y tener apertura con función manos libres.

Las puertas posteriores abren en un ángulo amplio, pero como no son altas, obligan a doblar el tronco más de lo normal para no golpear la cabeza contra el techo al acceder o salir del habitáculo (aunque en este sentido es claramente mejor que en la variante berlina). En las plazas traseras no falta espacio para que dos ocupantes adultos puedan viajar con comodidad, pero hay muchas alternativas de tamaño parecido que están mejor resueltas al respecto, como por ejemplo el Ford Mondeo Sportbreak, el Opel Insigna Sports Tourer y el Volkswagen Passat Variant.

La cota menos favorable es, sin lugar a dudas, la anchura entre puertas en las dos filas de asientos. En las plazas delanteras no supone un inconveniente, pero en las traseras impide acomodar con un mínimo nivel de confort a un tercer pasajero, incluso si éste es de tamaño menudo. Por altura libre al techo y por espacio longitudinal se encuentra en un término medio frente a sus rivales, como se puede observar en nuestro listado comparativo.

El puesto de conducción es idéntico al del 508 berlina y llama la atención, al menos inicialmente, por la organización de sus mandos. Bajo la denominación i-Cockpit, Peugeot engloba la disposición del cuadro de instrumentos por encima del volante (imagen), la forma y el diámetro de este (mucho más pequeño de lo normal y achatado por sus extremos inferior y susperior) y el empleo de una pantalla táctil en el centro de la consola para manejar la mayoría de las funciones del vehículo (imagen). En km77.com tenemos ejemplos de conductores que se sienten a gusto con esta disposición y otros a los que no le gusta nada, por lo que recomendamos probarla con detenimiento antes de tomar una decisión de compra. 

También comparte con el 508 berlina la sensación de estar encajonado, especialmente en las plazas delanteras. Este efecto, que habrá a quien le agrade y habrá a quien no, se debe a que la consola que divide los dos asientos es muy voluminosa, la cabeza queda cerca del marco de la puerta y la superficie acristalada no es demasiado grande. Además, como consecuencia de este último detalle y de la silueta de la carrocería, la visibilidad hacia el exterior no es especialmente buena, aunque las cámaras perimetrales que pueden tener algunas versiones ayudan mucho a la hora de realizar maniobras a baja velocidad (a pesar de que la calidad de imagen que proporcionan es mala; imagen).

La pantalla del sistema multimedia puede ser de 8 pulgadas o de 10, en función del nivel de equipamiento seleccionado. Por el momento solo hemos probado la de mayor tamaño y nos ha parecido buena por rapidez de respuesta y mediocre por resolución y organización de los menús. Bajo la misma hay una serie de botones de gran tamaño que sirven para acceder a las funciones más habituales (emisoras de radio, climatización, ajustes del vehículo o navegador, entre otros), una disposición que, en gran medida, evita tener que apartar mucho tiempo la vista de la carretera para consultarlas.

Hay muchos huecos portaobjetos para despejar los bolsillos y la mayoría de ellos están forrados de fieltro o goma para que los enseres depositados no hagan mucho ruido al moverse. El que hay entre los dos asientos delanteros, bajo el reposabrazos, es especialmente grande y además está iluminado (imagen), y el que hay por debajo de la consola puede tener un cargador inalámbrico para dispositivos móviles compatibles (aunque su acceso es complicado; imagen).

Los materiales que Peugeot ha utilizado para fabricar el habitáculo no son lujosos, pero causan una muy buena impresión tanto a la vista como al tacto. Además, durante la marcha no hay ruidos ni crujidos, incluso al circular sobre firmes en mal estado, por lo que los ajustes también están bien cuidados. En la unidad del 508 berlina que probamos hace unos meses había algunos desajustes en varias piezas que provocaban ruidos molestos en determinadas situaciones; ninguno de ellos ha estado presente en esta unidad del 508 SW.