Mitsubishi Colt CZ3 (2005) | Impresiones de conducción y del interior

27/01/2005 |Alfonso Herrero

De la gama del Colt tres puertas he conducido las versiones 1,3 l 16v y 1,5 DI-D, ambos de 95 CV y el CZT, de 150 CV.

El interior es similar a las versiones de cinco puertas y los plásticos tienen una calidad adecuada a su precio. Los asientos de los CZ3 dan una sujección suficiente a velocidades normales.

El acceso a las plazas traseras se hace levantando un tirador en el lateral del asiento que libera el enclavamiento que permite abatir el respaldo y desplazar hacia delante el asiento. El hueco que queda libre es amplio, lo que facilita el entrar o salir.

El CZ3 sigue teniendo la banqueta trasera deslizable (recorrido de 15 cm) que llevaba el cinco puertas, algo muy útil. A diferencia de otros coches que también tienen este sistema, en la posición más adelantada de la banqueta queda parte del maletero a la vista, ya que no tiene nada para cubrir ese hueco.

Todos los CZ3 que probé tenían una dirección muy dura. No recuerdo haber conducido un coche con dirección asistida (en el caso del Colt, eléctrica) que hiciese falta tanto esfuerzo para maniobrar con ella.

En marcha, esta característica pasaba desapercibida, pero en parado era necesario hacer mucha fuerza sobre el volante, tanto más cuanto más rapido se intenta mover el volante. El Colt Di-D tiene tres vueltas de volante, el CZT 2,8.

Los dos de 95 CV me han parecido coches recomendables para ciudad o carretera por comodidad y potencia. El gasolina tiene la ventaja de que es mucho más suave y tiene un sonido más agradable que el Diesel, aunque no es precisamente un motor silencioso. El del ruido del motor es un inconveniente que se agrava con la necesidad de llevarlo en la zona alta para que se mueva con la agilidad que se supone en un coche de esa potencia.

En cambio, el Diesel ofrece más fuerza a bajo y medio régimen con lo que no hay que estar apurando el motor constantemente (sube con facilidad hasta 4.500 rpm) pero resulta más molesto por las vibraciones y el ruido.

En carretera no pude probarlos a fondo pero me ha parecido que los CZ3 van de forma muy similar a la versión cinco puertas. El Diesel me dio la sensación de ser más subvirador y que le costaba entrar algo más en las curvas que al gasolina, posiblemente a causa del peso (la diferencia entre un 1.3 16v Invite y un 1.5 Di-D Invite es de 115 kg).