Mercedes-Benz CLA Coupé (2013) | Impresiones de conducción

13/08/2015 |Enrique Calle (@QuiqueCalle)

En relación con un Clase C, el CLA Coupé tiene unas reacciones más ágiles en zonas de carreteras de curvas además de un tacto de dirección preferible. De hecho, creo que se ubica como una de las berlinas de este tamaño que sobresalen por su buen balance entre agrado de conducción, facilidad para entrar en los virajes a buena velocidad y agilidad en curvas lentas o medias.


Creo que la conducción de este modelo ofrece buenas sensaciones tanto para quien quiera sentir la aceleración lateral en curvas, como para quien conduzca a ritmo tranquilo por cualquier tipo de vía. El Clase C es distinto. A mi juicio está más especializado que el CLA para vías rápidas, como por ejemplo las autopistas. De hecho, no conozco ninguna otra berlina de tamaño similar que sea tan suave y segura de reacciones frente a movimientos bruscos con el volante o con el pedal del freno cuando se circula a alta velocidad. Sin embargo, el Clase C es menos ágil, tiene unas reacciones más lentas y peor tacto en curvas que el CLA Coupé.


El CLA Coupé que he probado en profundidad tenía instalada la suspensión de deportiva, aunque también he conducido durante unos pocos kilómetros (hace varias semanas, durante la presentación internacional a la prensa) varias unidades con la de serie. No he tenido oportunidad de llevar el CLA con las dos configuraciones por las mismas carreteras, pero creo que la de serie es la más interesante. Ofrece un excelente compromiso entre capacidad para aislar a los ocupantes del estado del piso y contención de los movimientos de la carrocería.

Aunque creo que la suspensión de serie está muy bien conseguida y es quizá la opción más adecuada para la mayor parte de los usos, la deportiva no es incómoda y por ello no es desaconsejable. En un Clase A, conviene probar la suspensión deportiva antes de pedir el coche pues es muy dura; esto me parece menos necesario en el CLA.

El CLA Coupé que hemos probado en profundidad tenía neumáticos de medidas 225/40 R18 de la marca y modelo Continental ContiSportContact5 SSR. Estas ruedas están previstas para rodar sin presión durante un periodo limitado. Son ruedas opcionales; las de serie (que son de las mismas medidas), son normales.


En la presentación de este modelo a los medios los coches que conduje tenían ruedas normales y no recuerdo grandes diferencias de comodidad en relación a esta unidad que ahora he probado con detenimiento.

Opcionalmente se pueden instalar sin coste neumáticos 225/45 R17 (también puede llevar unas 205/50 R17, aunque estas últimas sólo con neumáticos de invierno). No puede llevar rueda de repuesto ni en opción, solo un kit de reparación de pinchazos.

La suspensión deportiva disponible en opción para el CLA Coupé implica, además de mayor dureza de muelles y amortiguadores, que la carrocería queda rebajada en 15 milímetros (delante) y 10 milímetros (detrás). No se puede adquirir de forma independiente, sino que viene obligatoriamente cuando se elige la línea de equipamiento «Urban» o «AMG Line», opción que también incluye discos de freno delanteros perforados.

El motor del CLA 220 CDI Coupé en su variante de 170 CV (aún no hemos probado la versión de 177 lanzada al mercado a finales de 2015 y que desde julio de 2015 se llama CLA 220 d Coupé) responde bien y consume poco, pero no es especialmente refinado. Es un motor áspero y transmite vibraciones al interior, especialmente en frio y circulando a baja velocidad. En el mercado hay muchos competidores más silenciosos de precio más bajo que este Mercedes-Benz. Esta falta de refinamiento se hace aún más patente cada vez que el sistema de arranque y parada automático del motor hace su función. Esa aspereza desaparece a medida que el coche gana velocidad.



La relación entre lo que es capaz de acelerar y lo que gasta es muy buena. En nuestro recorrido de referencia (más detalles), consumió 6,0 l/100 km (reales), aunque por un error de cálculo, lo completamos dos minutos antes de lo previsto (en 1h 9 minutos 50 segundos, que corresponde a una media real de 123 kilómetros por hora, cuando realmente buscamos una media de 120 km/h).

A pesar de esa desviación en la velocidad media, esos 6,0 l/100 km es un buen valor para un coche de 170 caballos de potencia. Sin embargo, está superado por el que obtuvimos con el BMW Serie 3 320d de 184 caballos, que en el mismo recorrido y a la media estipulada de 120 km/h, consumió 5,4 l/100 km.

En este recorrido de consumo influye de forma definitiva la resistencia aerodinámica al avance (SCx). Este valor en la versión probada es 0,53, que es posiblemente el mejor que actualmente tiene actualmente un Mercedes-Benz y también es muy bueno si miramos en modelos de otros fabricantes. Por ejemplo, el mencionado BMW 320d tiene un valor SCx peor, 0,59. Con todo, este modelo de BMW gastó claramente menos, algo sorprendente no solo porque tiene más resistencia aerodinámica al avance, sino porque el valor oficial de consumo extraurbano también da ligera ventaja al modelo de Mercedes-Benz (ficha comparativa de ambos modelos).

El otro dato de consumo que puedo dar del CLA 220 CDI Coupéde 170 CV es el que he obtenido durante los 1250 kilómetros que recorrí durante la semana de prueba, que fue 6,6 l/100 km. Este consumo corresponde a una utilización de todo tipo, con más kilómetros por carretera que por ciudad y en su mayor parte a ritmo moderado pero sin tener especial cuidado en gastar poco.

El depósito tiene 50 litros de capacidad. En el caso de una versión Diesel, es una capacidad suficiente para que las paradas a repostar sean poco frecuentes, pero en el caso de las potentes de gasolina quizá dé una autonomía escasa.



El CLA Coupé con el motor de gasolina de 156 CV (versión denominada 200 y que lleva un motor de gasolina de 1,6 litros) da muy buena aceleración en toda la gama de revoluciones; es decir, el conductor siempre tiene la sensación de tener buen empuje, sin necesidad de preocuparse mucho por el régimen de giro del motor. Puede ser una buena alternativa al 220 CDI para quien valore una mayor suavidad de funcionamiento especialmente en conducción urbana y que esté dispuesto a asumir un consumo claramente mayor. Si bien los datos oficiales anuncian un consumo muy bajo (5,5 l/100 km), lo que observé durante los pocos kilómetros que lo conduje, es que el gasto real puede estar entre 8 y 9 l/100 km en un uso variado por todo tipo de carreteras, sin conducir con brusquedad y sin especial cuidado por gastar poco. A buen seguro, puede consumir muchos menos a velocidad constante, pero si el ritmo no es uniforme el consumo.