El i-Activesense está compuesto por lo siguientes dispositivos: detector de obstáculos en ángulo muerto (LKA), alerta de tráfico trasero (RCTA), detector de fatiga (DAA), la alerta por cambio involuntario de carril (que ahora actúa sobre la dirección, LDWS) y el asistente de frenada de emergencia (SBS). También tiene, como asistente a la frenada en ciudad delantero y trasero (SMCB F/R) y programador de velocidad activo (MRCC).

El detector de objetos en el ángulo muerto cambia sus siglas. Mazda lo llamaba RVM (Rear Vehicle Monitoring) y ahora BMS (Blind Spot Monitoring). La novedad que presenta es que detecta objetos a mayor distancia (uno 2 metros por detrás y 8 por los laterales).

La alerta de tráfico trasera utiliza los mismos sensores que el sistema señalado anteriormente, y controla los ángulos muertos que se pueden producir en las maniobras marcha atrás.

El detector de fatiga recomienda al conductor que tome un descanso. Actúa a velocidades superiores a 65 km/h, y antes de dar una posible señal de aviso, controla la forma de conducir durante unos 20 minutos. Esta información la toma de los movimientos que el conductor hace sobre el volante. Después de dos horas recomienda una parada de forma automática.

El asistente a la frenada en ciudad delantero y trasero activa los frenos tanto marcha atrás como hacia delante si hay riesgo de colisión. Hacia delante funciona entre 4 y 30 km/h y hasta 6 metros de distancia. Hacia atrás, funciona hasta dos metros de distancia y entre 2 y 8 km/h.

El sistema de frenado de emergencia detecta objetos y otros vehículos hasta 140 metros de distancia. Actúa entre 15 y 200 kilómetros hora. Funciona con varios niveles de asistencia. En un primero momento de peligro, avisa al conductor con una alerta sonora y precarga el sistema de frenos para que respondan con más celeridad ante la posible solicitud del conductor. En un segundo momento, si el conductor no reacciona, aplica los frenos con una intensidad creciente y proporcional al nivel de riesgo.

El programador de velocidad adaptativo, como otros sistemas de este tipo, mantiene una velocidad y distancia respecto al vehículo precedente. Está operativo entre 30 y 200 kilómetros por hora. 

Los faros led más costosos disponibles (ALH) tienen varias funciones interesantes. Por una parte, los distintos módulos de led que hacen la función de iluminación de largo alcance, se pueden conectar o desconectar de forma independiente: de esa forma se puede dejar en sombra la zona donde se encuentran otros vehículos para así no deslumbrarlos (imagen), mientras que el resto de módulos permanece encendido para que el conductor vea la carretera lo mejor posible. Además hay una función de luz de autopista que sube ligeramente los faros para dejar ver más lejos a alta velocidad (imagen). La función de alumbrado de corto alcance da un haz más ancho que en el modelo precedente, «para iluminar el conductor ve entre los pilares del parabrisas y los retrovisores», imagen.

Todos los dispositivos anteriormente descritos obtienen la información necesaria de las siguientes fuentes: un láser infrarrojo, dos radar (uno de 24 GHz y otro de 76 GHz), una cámara y sensores de ultrasonido. En esta imagen se puede ver un esquema de todos ellos.

Todos los sistemas señalados sólo están disponibles en las versiones más costosas y equipadas del Mazda CX-5 (Luxury); cuanto más básico es el nivel de acabado, menor número de dispositivos hay disponibles.