El Grand Cherokee año modelo 2008 se distingue del anterior por las ligeras variaciones que Jeep ha efectuado en su aspecto, tanto en el exterior como en el habitáculo (más información), por el equipamiento que puede tener (más información) y por los cambios en la gama de motores.

Es un todo terreno de 4,75 m de largo con carrocería de cinco puertas. Sólo está disponible con el motor Diesel 3.0 CRD de 218 CV y con el de gasolina de 6.1 l y 426 CV (SRT8; información de la versión anterior). Los otros motores de gasolina que tenía el modelo de 2005 ya no se comercializan en España.

El Diesel tiene tres niveles de equipamiento posibles: Laredo, Limited y Overland. El SRT8 tiene diversos cambios estéticos y funcionales que limitan su funcionamiento fuera del asfalto (imagen). Todos tienen tracción total (hay dos tipos), cambio automático y reductora (excepto el SRT8).

Este modelo continúa siendo uno de los todo terreno más amplios de su tamaño, sobre todo por la anchura disponible: detrás hay espacio para tres adultos. La única medición en la que falla es en la altura libre en las plazas delanteras, algo justa para personas de más de 1,90 m; este inconveniente se agrava si lleva techo practicable.

Jeep ha corregido en la gama 2008 la ausencia del reglaje en profundidad del volante que tenía la gama anterior. De este modo es más fácil encontrar una postura correcta para conducir. Además, todas las versiones, excepto el Laredo, permiten regular eléctricamente la distancia a la que están los pedales con lo que aún resulta más sencillo encontrar la posición más adecuada.

En el habitáculo hay numerosos huecos donde dejar objetos, bien sea en las puertas o en el salpicadero. El aspecto del salpicadero ha mejorado respecto al modelo de 2005; también me han parecido mejores los ajustes, aunque siguen sin estar al mismo nivel que los de otros modelos de sus características y precio.

Dinámicamente, el Grand Cherokee destaca por la elevada capacidad de absorción que proporciona su suspensión, por encima de modelos como el BMW X5 o el Volkswagen Touareg, y que proporciona un confort muy elevado tanto en carretera como en pistas de tierra. Un Range Rover Sport es al menos tan confortable como este Jeep, pero tiene una suspensión más sofisticada (muelles neumáticos). Sigue sin convencerme el tacto de la dirección: está muy asistida e informa poco de lo que ocurre.

El motor Diesel de 218 CV (el mismo que emplea Mercedes-Benz, pero menos potente) es de los mejores que hay por prestaciones, ruido y suavidad de funcionamiento. Además, en el momento de iniciar la marcha, no se percibe la falta de fuerza que tiene el motor 2.7 TDV6 que llevan algunos modelos de Land Rover, si bien el del Jeep no logra un funcionamiento tan suave. Desde dentro se oye poco y, además, no llega un sonido típicamente Diesel. Las vibraciones que transmite al interior cuando funciona a ralentí son mínimas.

Según los datos de la marca, el Grand Cherokee CRD alcanza 200 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 9,0 s. El consumo medio homologado es 10,2 l/100 km. Sus prestaciones y consumo son peores que las de un BMW X5 3.0d o un Mercedes-Benz ML 320 CDI (que tiene el mismo motor que el Jeep pero algunas modificaciones que lo hacen más potente); las de un Volkswagen Touareg son muy semejantes (tabla comparativa).

Hay cambios en el sistema de tracción frente al Grand Cherokee de 2005: el denominado Quadra Drive II, que tiene los tres diferenciales bloqueables, sólo es equipo de serie en la versión Overland aunque, opcionalmente, pueden tenerlo las versiones Laredo y Limited. El sistema Quadra Drive II proporciona una capacidad de tracción muy alta y funciona con mucha suavidad, al estilo del sistema de tracción del Range Rover Sport.

Laredo, Limited y SRT8 vienen de fábrica con el sistema Quadra Trac II: este dispositivo sólo lleva bloqueo longitudinal (el diferencial central), y es el control de tracción el que se encarga de frenar la rueda que patina en cada eje, simulando una especie de bloqueo de los diferenciales delantero y trasero (más información de los sistemas de tracción en el apartado de información técnica).

El Grand Cherokee tiene un sistema de control de velocidad en descensos («Hill Descent Control» HDC), activable sólo si se circula con la reductora, y uno de asistencia al arranque en rampa («Hill Start Assist», HSA) que mantiene el coche frenado durante 2 s después de que el conductor levante el pie del pedal del freno. El control de estabilidad tiene una función para estabilizar un remolque.

El equipamiento de serie de la versión más sencilla (Laredo) tiene cuatro airbags, control de estabilidad con función antivuelco, climatizador de dos zonas u ordenador, entre otros. El Limited tiene, además, faros antiniebla, pedales ajustables, asientos con regulación eléctrica, tapicería de cuero y pantalla táctil (sin el navegador, que es opcional). El Overland trae además techo practicable de cristal, faros de xenón, cámara trasera de ayuda al aparcamiento, navegador, conexión Bluetooth y unas protecciones para los bajos.

Estas protecciones están disponibles para el resto de las versiones conjuntamente con el sistema de tracción Quadra-Drive II (1.088 €).

Al igual que otros modelos de DaimlerChrysler (como el Dodge Avenger), el Grand Cherokee puede tener una pantalla táctil en color que engloba los mandos del sistema de navegación, equipo de sonido y teléfono. Este sistema incluye un disco duro de 20 GB de capacidad, para almacenar música o imágenes.

El Grand Cherokee tiene un bastidor autoportante, suspensión delantera independiente y trasera de eje rígido. El primer Grand Cherokee se comercializó en España en el año 1993.