El Mondeo es el primer modelo de Ford que utiliza en España la versión de 240 CV del motor 2.0 EcoBoost. Sobre esta misma base existe la versión de 203 CV, también disponible en el S-MAX y el Galaxy.La mayor diferencia entre las dos versiones está en los colectores de escape.

El de la versión de 240 CV está basado en el que se monta en la versión de 203 CV, pero modificado para aguantar las mayores temperaturas generadas por la mayor potencia producida. También se ha mejorado el flujo de gases de escape para accionar con mayor eficacia el turbocompresor Borg Warner K03, de baja inercia, que supera 200 000 rpm.

Es un motor construido totalmente en aluminio, con inyección directa —inyectores de siete agujeros— a una presión máxima de 150 bares y doble distribución variable independiente de válvulas. Puede adelantar o retrasar 50 grados el árbol de levas de admisión y el de escape. Además de estas modificaciones, un cambio en la gestión electrónica del motor permite obtener los 37 caballos de diferencia.

La potencia máxima de 240 CV se alcanza a 6000 rpm y el par máximo de 340 Nm es constante entre 1900 y 3000 rpm. El par máximo puede llegar a 360 Nm, durante unos segundos que Ford no especifica, cuando se acelera al máximo.

Además de los cambios en las partes mecánicas y en la electrónica, Ford ha introducido también el sistema «Sound Symposer» que también utiliza en los Focus RSde 2009, para amplificar una gama de sonidos del motor y transmitirlos al habitáculo mediante una conexión entre el colector de admisión y la zona delantera del salpicadero.

Según Ford, a plena aceleración, el «Symposer» aumenta el sonido una media de 3 dB (A), lo cual resulta en un sonido percibido más potente y deportivo que en la versión de 203 CV.

Detector de objetos en el ángulo muerto

El sistema de aviso de vehículos situados en el ángulo muerto de los retrovisores utiliza dos «radares de rayo múltiple» situados en las esquinas posteriores del coche, en el paragolpes. Las zonas de punto ciego definidas por Ford se sitúan en los espacios laterales del coche, desde los retrovisores exteriores hasta tres metros por detrás del coche y otros tres metros en dirección perpendicular a cada costado del vehículo.