Skoda Kodiaq (2017) | Información general
El Kodiaq tiene una carrocería de tipo todoterreno. Es el primer modelo que hizo Škoda con ese tipo de carrocería (dado que el Yeti es más bien un monovolumen), pero no el primero con más de cinco plazas (el Škoda 1203 de finales de los años 1960 tenía capacidad para ocho pasajeros). Salió a la venta en noviembre de 2016 y las primeras entregas comenzaron en marzo de 2017. Hay versiones con cinco y con siete plazas (listado de precios).
En febrero de 2018, Škoda anuncia el lanzamiento de un nuevo nivel de equipamiento denominado Laurin & Klement, que está más orientado hacia el lujo. Tiene de serie elementos de equipamiento que son opcionales con otros acabados (lleva asientos eléctricos tapizados en piel o un sistema de sonido con mejores prestaciones) y un aspecto ligeramente distinto (nuevos parachoques y llantas de 19 pulgadas).
Sus virtudes dinámicas son la suavidad y el confort de marcha, que superan a las de un BMW X3 (modelo 2014, aún no hemos probado el modelo 2018) y un Toyota RAV4. Es, sin embargo, menos ágil en carreteras de curvas que un Volkswagen Tiguan o el citado todoterreno de BMW. Su interior tiene una amplitud normal, está fabricado con materiales de buena calidad, aspecto cuidado y su equipamiento puede ser muy amplio. Comparte plataforma con el Volkswagen Tiguan Allspace, al que también se parece dinámicamente.
Cinco son los motores posibles, tres de gasolina —TSI de 125, 150 y 190 CV— y dos Diesel — TDI de 150 y 190 CV—. En febrero de 2018, Škoda anuncia la llegada de un nuevo motor de gasolina de 1,5 litros de cilindrada y 150 CV de potencia que sustituye al de 1,4 litros e idéntica potencia que se vendía hasta la fecha (en ambos casos, motores con un sistema de desconexión de cilindros). También anuncia un pequeño aumento de potencia para el motor de gasolina 2.0 TSI (pasa de 179 a 190 CV).
El precio de partida es 25 730 euros, que corresponde a la versión con motor de gasolina de 125 caballos y cinco plazas. El modelo más parecido en el mercado es el Peugeot 5008, que tiene un tamaño muy cercano (4,64 m), y la versión básica equivalente (gasolina de 131 CV) es más barata, más ligera, tiene siete plazas de serie, unas prestaciones discretamente inferiores y gasta un litro menos de carburante de media (ficha técnica comparativa). El Kodiaq nos satisface más dinámicamente y por ergonomía del habitáculo, y el Peugeot por insonorización.
El Ford Kuga 2017 de gasolina y 120 caballos de potencia cuesta 22 490 euros. El Škoda Kodiaq es más grande, más veloz y gasta menos carburante (ficha comparativa). El Hyundai Tucson y el KIA Sportage, ambos con motor de gasolina de 132 caballos, son claramente más asequibles que el Kodiaq, pero su tamaño es menor (no llegan a 4,5 metros de longitud, mientras que el Škoda llega a 4,7 metros). A pesar de la ventaja de potencia de los modelos de Hyundai y KIA, no son más veloces y gastan más carburante según los datos oficiales (ficha técnica comparativa). El Karoq, segundo todoterreno de Škoda por orden de llegada al mercado, es más pequeño (4,38 m) y la versión básica es 3240 € más barata que la equivalente del Kodiaq (ficha comparativa).
Con motor Diesel de 150 caballos, tracción total y cambio de marchas manual, cuesta 31 330 euros, un precio en la media de este listado de todoterrenos con características parecidas. Si se elige con tracción delantera y cambio de marchas automático DSG cuesta 900 € más, pero tiene, como mínimo, un nivel de equipamiento superior (ficha comparativa).
Está disponible con cinco o siete plazas, siempre con la misma longitud de carrocería, 4,70 metros. El espacio disponible para los pasajeros es similar al de otros todoterreno de tamaño comparable —como el Nissan X-Trail (4,63 metros), el KIA Sorento (4,78 metros), el Hyundai Santa Fe (4,66 metros) y el Mitsubishi Outlander (4,69 metros)— y el maletero es uno de los de mayor capacidad de entre los todoterrenos que miden menos de 4,8 metros de largo (mediciones del interior). Hay más información sobre la amplitud del habitáculo y el maletero en el apartado Impresiones del interior.
Hemos probado dos versiones del Kodiaq, la más reciente con el motor Diesel de 150 caballos, tracción total y cambio automático. La primera que probamos (que es la que aparece en las imágenes de este texto) también tenía tracción total y cambio automático, combinados con el motor de gasolina de 150 caballos. Según nuestra tabla comparativa de prestaciones, el de gasolina es más veloz en todas las mediciones de aceleración y el que tiene unas prestaciones más acordes a su peso y potencia. La diferencia de consumo en autovía a 120 km/h ha sido de 2,6 l/100 km (6,6 en el Diesel y 9,2 en el gasolina).
El Diesel tiene un funcionamiento correcto en cuanto a vibraciones y ruido, mientras que el de gasolina es ejemplar en este sentido. Ambos tienen fuerza suficiente para mover el vehículo con cierta agilidad, siempre y cuando el uso no sea demasiado exigente. Si se van a utilizar todas las plazas de manera habitual o se circula por carreteras con muchos desniveles, es posible que, sobre todo el Diesel, resulte escaso.
La conducción del Kodiaq es agradable porque circula con mucha suavidad y silencio y porque todos los mandos se accionan con poco esfuerzo. Con la suspensión opcional adaptativa (DCC), que es la que tenían las unidades que hemos conducido, es un vehículo con un compromiso especialmente bueno entre estabilidad y comodidad. No se siente especialmente ágil a la hora de circular por carreteras lentas, pero sus reacciones son siempre muy seguras. Aunque el Kodiaq no está pensando para ser usado como todoterreno, su altura libre al suelo (194 mm) y la tracción total permiten circular por zonas relativamente complicadas. Más información sobre este y otros aspectos en el apartado Impresiones de conducción.
El Kodiaq tiene soluciones ingeniosas, como un paraguas en el interior de cada una de las puertas delanteras, una linterna con imán y un sistema que protege los cantos de las puertas para evitar dañarlas contra una pared o dañar el coche que está aparcado al lado. Este sistema es similar al que emplea Ford en el Focus y consta de una pieza de plástico que al abrir la puerta, pivota desde el interior protegiendo el borde de la puerta (imagen de esta pieza en el vídeo).
La tracción total conectable automáticamente —mediante un embrague multidisco que se acopla cuando las ruedas delanteras patinan— está disponible para los motores de 150 CV o más potencia; la delantera es la única posible en el de 125 CV y una posibilidad en los de 150 CV. Con la caja de cambios ocurre como con los sistemas de tracción: el cambio manual es el único disponible para el motor de 125 CV y una alternativa en los de 150 CV; el automático, de doble embrague con siete velocidades, es de serie en los de 179 y 190 CV y opcional en los de 150 CV.
En opción para todas las versiones hay un selector de modos de conducción que altera, entre otras cosas, la velocidad de respuesta del motor, el funcionamiento de la caja de cambios automática (en caso de tenerla), el funcionamiento del sistema de climatización, el de la dirección asistida y la dureza de la amortiguación (en caso de contar con la suspensión DCC). Los modos disponibles son Normal, Eco, Sport, Individual y Snow. El modo Snow es exclusivo de las versiones con tracción a las cuatro ruedas y modifica el funcionamiento de distintos sistemas del coche (desactiva el ABS y el control de estabilidad, reduce la sensibilidad del pedal del acelerador y activa el control de descenso de pendientes, entre otros) para incrementar la adherencia en superficies con poco agarre.
En el mejor de los casos, el Kodiaq más ligero pesa 1502 kg (un Outlander y un X-Trail, 1505 kg, y un 5008, 1440 kg; ficha técnica comparativa) y el coeficiente aerodinámico es 0,33 (el del X-Trail es 0,32). Puede remolcar hasta 2500 kg y se ofrece un sistema para facilitar las maniobras de aparcamiento con remolque —lo estrenó el Audi Q7— en el que girando el mando de ajuste de los retrovisores se guía el remolque accionando de manera automática la dirección del coche.
Hay más sistemas de ayuda a la conducción. El Kodiaq tiene, de serie u opcionalmente, la alerta por cambio involuntario de carril, el detector de vehículos en el ángulo muerto, el programador de velocidad activo, un sistema de aparcamiento semi-automático, un conjunto de cuatro cámaras que generan una vista cenital del vehículo y sus alrededores (Škoda lo denomina «Area View»), frenado automático al retroceder si aparece un obstáculo y el frenado de emergencia en ciudad, adicionalmente con detección de peatones.
Hay cuatro sistemas multimedia distintos: Swing, Bolero, Amundsen y Columbus. Con algunos de ellos es posible crear una red wifi dentro del coche. También hay una aplicación que permite, desde un teléfono móvil, localizar el coche, ver algunos datos como la autonomía, enviar direcciones o puntos de interés al navegador del coche o conectar la agenda personal para que, en función de la información del tráfico, avise a qué hora hay que iniciar el viaje para llegar a tiempo a la cita. En opción se puede pedir un sistema de recarga inalámbrica para el móvil.
El Škoda Kodiaq está construido sobre la plataforma modular MQB, la que usa el Grupo Volkswagen para sus nuevos modelos de motor transversal, como es el caso del Tiguan y el SEAT Ateca (la batalla del Kodiaq —2,79 m— es mayor que la de estos—2,68 y 2,64 m respectivamente—).
Las llantas pueden ser de 17, 18 o 19 pulgadas. La denominación Kodiaq viene del oso Kodiak, que vive en la isla del mismo nombre de Alaska y en otras zonas cercanas.
En el comparador de seguros de coches hemos calculado el precio de una póliza a todo riesgo sin franquicia para un Kodiaq 4x4 1.4 TSI de 150 caballos con cambio de marchas manual. El tomador es una persona de 36 años, casada, que vive en Madrid, guarda el coche en un garaje colectivo y recorre unos 20 000 kilómetros anuales. Lleva más de 10 años asegurado en otra compañía (Ocaso) y nunca ha tenido siniestros. Con estas condiciones, el precio más bajo lo ofrece Mapfre por 1395 euros con una calidad de póliza de 7,02 puntos sobre 10.