El primer Rolls-Royce de la era BMW no es una versión agrandada de un Serie 7, sino un coche completamente nuevo fabricado con aluminio.
Como DaimlerChrysler ha hecho con la marca Maybach y Volkswagen hará con Bentley, BMW utiliza Rolls-Royce para estar en una categoría de coches aún más grandes y costosos que un Audi A8, un BMW Serie 7, un Jaguar XJ o un Mercedes Clase S.
Mide 5.834 mm de largo, 1.632 mm de alto y 3.570 mm de batalla. Es decir, es semejante al Maybach 57, aunque se distingue porque la batalla es muy larga.
Otra medida impresionante son sus ruedas. Los neumáticos son de perfil más bien alto y de tipo PAX de Michelin (más información sobre este sistema); es el primer coche que los lleva como equipo de serie. El diámetro total de las ruedas es 790 mm.
Como en algunos Rolls-Royce clásicos, las puertas traseras se abren de delante hacia atrás (al revés de las delanteras). Las puertas se pueden cerrar mediante mandos eléctricos.
El suelo del coche debe estar más bien alto porque Rolls-Royce dice que el puesto de conducción está más bien elevado. Además, tiene el fondo casi plano, de forma que permite transitar con facilidad de un lado al otro del coche.
Tiene algunos detalles curiosos, como la figura sobre el radiador (el «Espíritu del éxtasis») que se puede guardar mediante un dispositivo eléctrico, un espacio para dejar el paraguas en cada puerta trasera y el escudo que hay en las ruedas, que no gira y está siempre en posición vertical.
El motor es una adaptación del nuevo V12 de BMW que —en principio— es exclusivo para Rolls-Royce, no estará en ningún BMW. Este motor lo fabrica BMW en Munich. La cilindrada es 6.749 cm³, el antiguo motor V8 de Rolls-Royce tenía 6.750 cm³. Como el doce cilindros del BMW 760, tiene distribución de tipo Valvetronic e inyección directa. La potencia máxima es 460 CV a 5.350 rpm, poco para la cilindrada que tiene (68 CV/litro).
La velocidad máxima está limitada a 240 km/h, la aceleración de 0 a 100 km/h es 5,9 s y el consumo medio, 15,9 l/100 km. Eso quiere decir que es más lento que un Maybach 57 y que gasta lo mismo, cosa rara para un coche que pesa algo menos y tiene un motor con Valvetronic (el consumo del 760 tampoco es bajo comparado con el de otros motores con Valvetronic).
El bastidor es de aluminio y, según señala BMW, es el mayor bastidor de aluminio que se ha construido hasta ahora. El bastidor del Phantom también se fabrica en Alemania, en la planta de Dingolfing.
La suspensión es neumática, con altura variable, y los amortiguadores tienen también dureza variable (automática o manualmente). Lleva paralelogramo deformable en los dos ejes.
BMW repite varias veces que se trata de un «auténtico Rolls-Royce», diseñado por británicos en un estudio situado en Londres, cerca de Hyde Park, y construido por británicos en una nueva factoría en Goodwood, Inglaterra.
Según Rolls-Royce, los diseñadores han tomado rasgos de los modelos Phantom I y II de la década de los 30, del Silver Cloud de 1950 y del Silver Shadow de 1960. Alguna de las características del diseño son un voladizo trasero corto con relación a la longitud, una batalla larga y un montante trasero muy ancho.
Su precio sin impuestos es 320.000 €. Con el tipo fiscal que hay en España para los automóviles, un Rolls-Royce Phantom costaría 409.600 €.