En el Peugeot 3008 (así como en otros modelos de Peugeot recientes), el cuadro de instrumentos se ve por encima del aro del volante (imagen), no a través del él. Para conseguir esto, Peugeot ha recurrido a un volante pequeño, achatado por su parte superior (también con la inferior) y con una regulación en altura bastante limitada (queda más bien bajo incluso en su posición más elevada.
Este volante no puede ir muy alejado de los pedales. Por eso, algunos conductores notarán que llevan las rodillas más flexionadas de la cuenta. Hay incluso quienes hemos notado que la plataforma de los pedales están dispuestas para ser pisadas, más que empujadas (que sería lo más natural), y eso hace que, a veces, algunos hayamos puesto la punta del pie en la palanca del freno en lugar de en la propia plataforma.
En las versiones con mayor equipamiento el cuadro de instrumentos (imagen) es una pantalla de 12,3 pulgadas (en las versiones menos costosas la instrumentación es tradicional). Es una pantalla con buena resolución y nitidez que muestra la información de forma clara. Lo que se puede ver varía en función de cinco posibles configuraciones: mínimo, cuadrantes, navegación, conducción y personal.
En la personal, el velocímetro queda en el centro y el conductor puede elegir qué ver a cada lado de este. Los elementos que se pueden ver son: ordenador de viaje, cuentarrevoluciones, indicaciones del navegador, temperatura del motor, indicador de «fuerzas G» (aceleración en sentido longitudinal y transversal), indicador de uso de la potencia del motor y visualización del funcionamiento de las ayudas a la conducción. En esta imagen la instrumentación está configurada en personal, con visualización de las ayudas a la conducción a la izquierda y el ordenador de viaje a la derecha. Esta instrumentación funciona bien y también se consulta con facilidad, aunque sería mejor si el cambio entre las distintas configuraciones fuera más inmediato (pasan unos 3-4 segundos entre que el conductor pulsa el mando que cambia de menú y la instrumentación muestra el menú elegido).
El sistema multimedia se maneja a través de una pantalla táctil de ocho pulgadas (imagen). Su uso es sencillo y su velocidad de respuesta correcta. No es una pantalla que entusiasme (está lejos de tener el manejo fluido y certero de una tableta de buena calidad) pero responde bien tanto a las órdenes táctiles como a las dadas con los botones. Este sistema multimedia es compatible con el sistema operativo CarPlay de Apple y con el Android Auto de Google. Bajo la pantalla hay una serie de botones dispuestos en horizontal (imagen) que dan acceso directo a algunas funciones, como la radio, el navegador, el climatizador o el teléfono móvil.
El sistema de climatización caldea el habitáculo con rapidez aunque el coche haya pasado varias horas a la intemperie con temperaturas bajas y hace poco ruido una vez que alcanza la temperatura elegida. En todos los 3008 que hemos conducido, hay que llevar la temperatura dos o tres grados por debajo de lo habitual para no pasar calor (si lo habitual es entre 22 y 23 grados, en el 3008 hay que ajustarla a 20 o 21)
Los asientos delanteros opcionales de los niveles de equipamiento Allure y GT-Line (llamados Asientos delanteros ergonómicos) tienen un mullido firme y unas formas que dan una buena sujeción al cuerpo en las curvas. Nos han gustado más los que van tapizados en tela que en piel. La piel confiere al interior un aspecto lujoso (imagen), pero a la vez hace que los asientos resulten menos acogedores puesto que resbalan más. Esta tapicería tiene un coste de 2800 euros y los dibujos cosidos tanto en la banqueta como en el respaldo se acaban notando en el cuerpo si se conduce con ropa fina.
Los asientos opcionales delanteros también incluyen calefacción, regulaciones eléctricas, una banqueta que puede alargarse manualmente (imagen). La calefacción también se puede pedir para los asientos de serie, así como la función de masaje: los hay de cinco tipos y se puede regular su intensidad.
En la fila posterior del Peugeot 3008 hay entre uno y dos centímetros menos de espacio para las piernas que en el Hyundai Tucson, el SEAT Ateca, el Nissan Qashqai y el Renault Kadjar. Sin embargo, la anchura entre puertas (medida a la altura de los hombros) es superior a la de todos los modelos citados y da la impresión de que tres adultos que no sean especialmente corpulentos pueden acomodarse con razonable confort. Tabla comparativa de mediciones del interior.
La distancia que separa los anclajes ISOFIX internos es 44 centímetros, mientras que en un KIA Sportage y en un SEAT Ateca es 40. Por lo tanto, con dos sillas infantiles instaladas en la segunda fila de asientos, la persona que viaje entre medias tendrá 4 cm más de anchura en el Peugeot que en el KIA y en el SEAT. En anclaje para el Top Tether (la cinta adicional para evitar el vuelco de la silla) está oculto bajo el tapizado del respaldo y hay que hurgar en él para poder anclar la silla.
Con el techo solar panorámico, la altura entre la banqueta y el techo es 93 centímetros, lo mismo que en un Tucson y más que en un Kadjar y un Qashqai, todos ellos igualmente con techo. Sin el techo, hay disponibles 7 centímetros más de altura, es decir, en total hay 100 cm. Es más de lo que hay en un KIA Sportage y en un Ford Kuga (1 y 3 cm respectivamente) y menos (1 cm) que en un SEAT Ateca. Con el techo de cristal, una persona de 1,85 metros de estatura no se puede sentar y estirar la espalda; sin el techo este problema no existe. Conviene tenerlo en cuenta y probarlo si se tiene esa estatura o más.
Los huecos de los que disponen los pasajeros son numerosos. En las cuatro puertas hay unos bolsillos, y también hay huecos pequeños o medianos por delante del selector del cambio (imagen) y por detrás (imagen). En la superficie que hay por delante de la palanca de cambios también puede haber una zona de recarga inalámbrica para teléfonos móvil. El espacio que queda por debajo del reposabrazos central es muy grande, está iluminado y refrigerado. Las dimensiones de la guantera (imagen) son suficientes para guardar en ella la documentación del vehículo y un par de chalecos de alta visibilidad.
El volumen del maletero es 520 litros, exactamente el mismo que el del Volkswagen Tiguan y mayor que el de cualquier otro todoterreno que mida entre 4,30 y 4,60 metros de longitud (listado comparativo). El del SEAT Ateca tiene 510 litros, el del KIA Sportage 503, el del Hyundai Tucson 488 y el del Renault Kadjar 472. Además de ser grande, tiene unas formas rectilíneas, sin recovecos, que facilitan el aprovechamiento del espacio disponible. Hay una tabla rígida que se puede colocar a dos alturas (imagen), de manera que se crean dos espacios diferenciados, la zona principal y el doble fondo. Debajo de esta tabla hay una rueda de repuesto de emergencia (imagen). Hemos echando en falta unos ganchos para poder colgar bolsas y que estas no se desplacen por el maletero.
Los respaldos de los asientos posteriores están divididos en dos partes en proporción 1/3 y 2/3. Se pueden abatir tirando de unas palancas que hay en las paredes del maletero, o bien, pulsando un botón que hay en cada una de las partes. La superficie del maletero queda enrasada (y en ligera pendiente; imagen) con los asientos cuando la tabla divisoria comentada anteriormente se coloca en la posición superior. Si se coloca en la inferior, queda un escalón de unos 10 cm. Con los respaldos abatidos y el asiento del acompañante lo más adelantado posible, se pueden cargar objetos de unos 180 cm de longitud.
En caso de necesitar más espacio en sentido longitudinal, es posible abatir el respaldo del asiento del acompañante (imagen), que es de serie en todos los 3008. De ese modo, la longitud de carga llega hasta unos 265 cm desde el borde exterior del maletero al salpicadero. El punto más bajo del portón cuando está abierto queda a 180 cm del suelo.
De serie o en opción, según el nivel de equipamiento, el portón del maletero puede tener un sistema de apertura y cierre automáticos con función manos libres (al pasar el pie por debajo del parachoques trasero, se abre o cierra) que funciona mejor de lo habitual porque responde (casi) siempre a la primera. En cambio, el sistema de apertura/cierre sin llave de las puertas requiere en ocasiones acercar la mano más tiempo de lo deseable, algo que también ocurre con el botón de arranque y parada del motor: hay que tenerlo pulsado durante un rato, no basta una sola pulsación, para que ponga en marcha el motor o lo detenga.
Nos ha gustado que las puertas envuelvan la carrocería hasta abajo del todo. Así evitan que el marco se ensucie y este manche el pantalón o la falda al bajarse del coche. En la base de los retrovisores hay una luz que se proyecta hacia el suelo para iluminar la zona más cercana al coche. La luz interior es de ledes y alumbra de forma muy focalizada, dejando mal iluminadas algunas zonas.