Frenada anti colisiones múltiples

El Golf es el primer modelo de Volkswagen (no del Grupo Volkswagen, ya que lo estrenó el Audi A3) con el sistema de «Frenada anti colisiones múltiples». Cuando reconoce una colisión (mediante los sensores del airbag) aplica los frenos de manera automática. De este modo se trata de evitar golpes secundarios. El frenado se desactiva si el conductor acelera, si frena con mayor intensidad (el dispositivo aplica una deceleración de 0,6g, 5,88 m/s²) o al reducir la velocidad por debajo de 10 km/h (para permitir dirigir el coche a baja velocidad). Según los estudios a los que se refiere Volkswagen, una cuarta parte de los accidentes con heridos pertenecen a este grupo de accidentes, en el que una buena frenada puede reducir los daños en la segunda o sucesivas colisiones.

Protección activa de los pasajeros antes del posible accidente («PreCrash»)

Ante una situación de riesgo los cinturones delanteros se tensan. Si el dispositivo considera crítica la situación, también cierra las ventanillas (y el techo corredizo) aunque no por completo porque, según Volkswagen,  así es cómo mejor desarrollan su función los airbags laterales y de cabeza.

Programador de velocidad activo («ACC»)

Por fin, el Golf tiene un programador de velocidad activo. Para la generación anterior se anunció pero nunca llegó a comercializarse (en realidad en Alemania hay unas pocas unidades circulando que sí lo tienen) por problemas de fiabilidad. Ahora, el nuevo sistema funciona mediante un radar en vez de un láser.

Es posible conectarlo entre 30 y 160 km/h en las versiones con cambio manual y de 0 a 160 km/h en las automáticas. En éstas, es capaz de reiniciar la marcha por sí solo tras un paro, por ejemplo en un atasco.

Asistente de frenada («Front Assist»)

El radar del programador de velocidad también se emplea para detectar obstáculos y así poder avisar al conductor si se despista y no trata de evitarlos.  En una primera fase, lo advierte mediante señales acústicas y visuales y precarga el circuito hidráulico de los frenos para poder ofrecer la mayor potencia de frenada al conductor. Si ésta frena pero lo hace con una intensidad insuficiente, aplica por sí solo la presión necesaria en los frenos para evitar el golpe. En el caso de que el conductor no reaccione a los avisos, frena automáticamente. Este sistema también funciona a menos de 30 km/h, sea con cambio manual o automático, por lo que puede ser muy útil en ciudad para evitar ciertos golpes por despiste.

Detección de fatiga

Un programa informático evalúa el grado de atención del conductor (básicamente analizando el movimiento del volante). Si considera que está cansado, lo advierte (un sonido y un testigo iluminado en el cuadro). Si al cabo de 15 minutos, el conductor no detiene el coche, vuelve a ser avisado. También activa automáticamente el aviso tras cuatro horas de viaje.

Asistente de mantenimiento de carril (Lane Assist).

Actúa sobre la dirección para evitar que el coche abandone el carril involuntariamente (sin que el conductor accione el intermitente). Puede corregir puntualmente o ayudar continuamente a mantener el coche en las curvas (es una ayuda, no es capaz de mantener en todo tipo de situaciones el coche en su carril). Una cámara situada en el parabrisas reconoce las líneas de la calzada y un ordenador procesa esa información.

Asistente de luces largas

Lo hay de dos tipos. Uno básico («Light Assist»), en las versiones que no tienen alumbrado activo en curva, que conecta o desconecta las luces largas. Sabe cuándo debe hacerlo gracias a las imágenes que recoge una cámara (la misma que emplea el asistente de mantenimiento de carril),  y que  son analizadas para detectar las luces de otros vehículos en las proximidades. Funciona en vías sin iluminar a una velocidad superior a 65 km/h.

El otro asistente («Dynamic Light Assist») está más evolucionado. La forma de funcionar es similar al del sistema más sencillo pero en este caso, el haz que se proyecta se puede modificar para no iluminar únicamente la zona donde está el vehículo a cuyo conductor se puede deslumbrar. Volkswagen lo consigue mediante un filtro móvil colocado entre la lente y el reflector. Cada faro se gestiona de forma independiente. Por ejemplo, si viene un coche por el carril contrario, el faro derecho puede dar un haz largo desviándose ligeramente a la derecha, mientras que el izquierdo se acorta.

Reconocimiento de señales de tráfico

La cámara “lee” las señales de límite de velocidad y de prohibición de adelantar. Estas aparecen dibujadas en el cuadro y en la pantalla del navegador.

Sistema de aparcamiento automático

Puede aparcar el coche en línea o en batería sin necesidad de que el conductor mueva el volante. Detecta los huecos disponibles (circulando a menos de 40 km/h) y avisa si el espacio es suficiente (para aparcar en línea necesita 80 cm más que la longitud del coche).