El Suzuki iM-4 es un prototipo de todoterreno híbrido cuyo diseño, según Suzuki, está en parte inspirado en dos antiguos cupés de la marca, el Fronte Coupé y el Cervo. Su plataforma adelanta algunas soluciones técnicas de futuros modelos de Suzuki.

Mide 3,69 m de largo, 1,70 m de ancho y 1,56 m de alto, que son unas medidas parecidas a las de un Suzuki Jimny o un Lada 4x4. No hay todoterrenos de reciente lanzamiento de tan pequeño tamaño en el mercado. Las llantas son de 18 pulgadas.

El sistema de propulsión es híbrido (Suzuki lo denomina «SHVS», acrónimo de Smart Hybrid Vehicle by Suzuki). Tiene un motor eléctrico alimentado por una batería de iones de litio que se recarga mediante un sistema de frenada regenerativa (un sistema similar al que podría equipar un vehículo de producción basado en el prototipo Suzuki iK-2, presentado simultáneamente en el Salón de Ginebra de 2015), y un motor de gasolina de 1,2 litros empleado en el Suzuki Swift actual. Suzuki no ha dado detalles sobre potencia ni consumo de ambos motores por separado ni en conjunción.

La plataforma es totalmente nueva y será empleada en futuros modelos de la marca. Es la primera de un total de tres plataformas modulares que sustituirán a las cuatro plataformas actuales para disminuir los costes de fabricación. Suzuki no ha mencionado nada sobre un posible modelo de producción basado en el iM-4.