Un alerón posterior, llantas de diseño exclusivo y el faldón delantero distinguen desde lejos al RS, la versión más potente del Octavia. En Škoda han hecho algo parecido a lo que ha sucedido en Seat. Hasta hace poco el modelo más potente de Seat era el Toledo de 150 CV, pero con el León turbo de 180 CV se superó esta barrera. El León puede tener cuatro ruedas motrices, el Octavia RS de momento no, pero no hay que descartarlo para dentro de uno o dos años. El precio de esta versión es 3.941.684 pesetas.

El Škoda más potente utiliza el mismo motor que el Seat más potente: el cuatro cilindros turboalimentado, de cinco válvulas por cilindro y 180 CV. Pude probar el coche durante sólo tres vueltas al circuito de Hungaroring (no conocía el circuito ni el coche; después de sólo tres vueltas sigo sin saber casi nada del circuito y poco del coche).

El motor de 180 CV va bien, pero la diferencia con el de 150 CV no es tan grande como podría hacer pensar ese incremento de un 20 por ciento de la potencia máxima. A medio régimen ambos motores resultan muy parecidos. Lo que me sorprendió en el circuito es lo bien que frenaba el coche y la resistencia a la utilización intensiva de los frenos. Los cuatro discos ventilados cumplen muy bien con su cometido.

La estabilidad también resulta buena. Si bien los requerimientos de un circuito nada tienen que ver con lo que se necesita sobre carretera abierta, por lo que el juicio rotundo en este apartado también deberá esperar a que lo probemos en serio. Las oscilaciones de la carrocería para un coche de calle siempre resultan excesivas en una pista de carreras. Aun así, el balanceo del RS me ha parecido moderado.

Para conseguir una buena estabilidad, la carrocería del RS es 15 mm más baja que la del resto de los Škoda Octavia. Esta menor altura de la carrocería, el faldón delantero y el alerón posterior permiten obtener un coeficiente de penetración aerodinámico de 0,29, frente a los 0,30 del resto de la gama. Las llantas opcionales de 17 pulgadas y los neumáticos (también opcionales) 205/50 R 17 ayudan a mantener con precisión la trayectoria. El equipo de neumáticos de serie son unos 205/55 R16.

En el interior el RS lleva pedales con recubrimiento metálico, a juego con el pomo de la palanca y los estribos de las puertas. El volante de tres radios está forrado con cuero y los asientos, exclusivos para este modelo, tienen los bordes del respaldo y la banqueta más abultados que el resto de modelos, para sujetar mejor el cuerpo en las curvas. Se podrá adquirir en tres colores: rojo, plata o negro.