Renault ha simplificado la gama del Laguna reduciendo el número de versiones y ampliando los motores disponibles para la variante con cuatro ruedas directrices («GT 4Control»). Los cambios afectan tanto a la berlina como al familiar («Grand Tour») y al cupé.

Con carrocería berlina, el Laguna está en venta desde 20.900 € (todos los precios). Es una alternativa a modelos como el Citroën C5, el Ford Mondeo, el Opel Insignia, Peugeot 407, el SEAT Exeo o el Toyota Avensis, entre otros.

Es un coche muy seguro y estable en carreteras con buen piso, aunque no tiene el tacto y la precisión de otras berlinas (la versión «GT 4Control» no entra en esta consideración porque tiene un comportamiento muy diferente al resto). No nos gusta la forma de reaccionar en carreteras bacheadas por el fuerte golpeteo que las irregularidades transmiten a la dirección. Con relación a la anterior generación del Laguna (más información), tiene una suspensión algo más dura que hace que la carrocería se mueva menos, pero también que ciertas irregularidades se noten más (más información técnica).

Está disponible con tres motores de gasolina, de entre 140 y 204 CV, y cuatro Diesel, de 110 a 178 CV.

Gasolina		Diesel
2.0	140 CV	1.5 dCi	110 CV
2.0T	170 CV	2.0 dCi	131 CV
2.0T	204 CV	2.0 dCi	150 CV
		2.0 dCi	178 CV

Todos los motores llevan una caja de cambios manual de seis velocidades, salvo el 2.0T de 170 CV que va acoplado a una transmisión automática de seis relaciones. El Diesel de 150 CV también puede tener este mismo tipo de cambio.

La versión con dirección en las cuatro ruedas tiene un sistema («4Control») que facilita las maniobras a baja velocidad e incrementa la estabilidad a alta velocidad (más información). Este dispositivo va asociado a cuatro motores diferentes, tres Diesel (2.0 dCi de 131, 150 y 178 CV) y uno de gasolina (2.0T de 204 CV). Todos ellos también están disponibles sin el «4Control».

En términos generales, el Laguna no es un coche costoso y, a diferencia de alguna de sus alternativas, tiene tres años de garantía ó 150.000 km. La versión 2.0 dCi de 131 CV tiene un precio algo superior al del C5, el Exeo o el Mondeo, los tres con motores Diesel de entre 140 y 143 CV, pero el Laguna tiene mayor equipamiento (ficha comparativa). El Ford y el Citroën son algo más espaciosos que el Renault, no así el SEAT.

Con el Laguna se puede viajar con muy poco ruido dentro de un margen de velocidad muy amplio. Hemos probado dos versiones con motor Diesel, el 1.5 dCi de 110 CV y el 2.0 dCi de 150 CV —con carrocería familiar también hemos podido conducir la versión 2.0 dCi de 173 CV (más información)—. Con estos motores, el Laguna tiene una suavidad de funcionamiento muy grande y contribuye a que sea una de las berlinas en las que menos se nota que es Diesel.

Hay una diferencia definitiva de aceleración entre ambos motores. Esta diferencia de aceleración puede ser definitiva cuando se circula por carreteras donde hay que adelantar en poco espacio. No obstante, la versión de 110 CV no es desaconsejable por lento. De hecho, este motor tiene una respuesta muy buena y permite viajar con cierto desahogo.

El Laguna con carrocería de cinco puertas no es especialmente amplio. Cuatro personas viajan bien si las que van sentadas atrás no son altas; si lo son, falta altura al techo. Un quinto ocupante tiene que ser un niño o alguien de muy corta estatura para que no golpee con la cabeza en el techo y porque la anchura disponible no es grande. El maletero tiene una capacidad de 450 l. Es más bien pequeño para un coche de su tamaño.

El Laguna mide 4,69 m de largo, menos que otras berlinas de similares características, como el Citroën C5, el Ford Mondeo o el Audi A4. Esta característica se aprecia en el tamaño interior, pero también en la capacidad de maniobra: un Mondeo necesita 0,40 m más que el Renault para hacer un giro de 180º.

Del habitáculo del Laguna no nos han gustado mucho los asientos, porque recogen poco el cuerpo. Las versiones «GT 4Control» tienen otros mejores en opción. El resto de los aspectos del interior están bien resueltos (más impresiones del interior).

Equipamiento

El Laguna no tiene ningún elemento de equipamiento particularmente novedoso, pero algunos de ellos están bien resueltos y funcionan muy bien, como el sistema de acceso, arranque y cierre manos libres o el freno de estacionamiento automático. El mando plano de apertura y cierre de las puertas tipo tarjeta (imagen), sin el sistema de manos libres, es de serie para todas las versiones.

Desde octubre de 2009, el Laguna se puede elegir con cinco niveles de equipamiento diferentes: «Authentique», «Expression TomTom», «GT 4Control», «Privilége» e «Initiale» (fichas de equipamiento).

Las versiones menos equipadas («Authentique») carecen de algunos elementos más o menos importantes, como climatizador de dos zonas (opcional), navegador, control de la presión de los neumáticos o faros de xenón (los faros halógenos de serie dan una iluminación suficiente). Es muy positivo que el sistema manos libres Bluetooth sea de serie en toda la gama.

Además, hay varios paquetes para completar el equipamiento en determinadas versiones: «Pack Confort», «Pack Easy Drive», «Pack Technology», «Pack Asientos» y «Pack Look».

Según las previsiones de Renault, las versiones «Expression TomTom» representarán un 60% de las ventas de la gama Laguna, mientras que las variantes «GT 4Control» supondrán un 20% del total.

Esta es la tercera generación del Laguna. La primera llegó al mercado en 1994 y la segunda en 2001 (más información).