En km77.com ya hemos probado otras versiones del Renault Clio. A continuación expongo lo dicho en aquellas pruebas, con alguna modificación.

El Clio actual es mejor funcionalmente que el anterior. En lo que más ha ganado es en número y situación de huecos para dejar cosas. Hay un sitio en la parte izquierda del salpicadero donde las monedas y las llaves no se caen, salvo que estén amontonadas. El hueco que hay delante de la palanca de cambios es grande, está bien para un teléfono, pero es profundo para cosas más pequeñas, como el mando del garaje. En la puerta hay bolsas laterales rígidas que son amplias, pero que tienen una boca pequeña. Algo como un mapa es fácil de meter y sacar, pero si se deja ahí un objeto pequeño y se va hasta la parte de atrás de la bolsa, resulta muy incómodo cogerlo. Algo parecido ocurre con los cajones o bandejas bajo los asientos. Son cómodos para la documentación o cosas así, pero no para cosas pequeñas.

La calidad de materiales de este Clio es acorde con su precio, e incluso mejor que la de alguno de sus competidores. El acabado Privilege, que tiene tonos claros para la tapicería y algunos plásticos de color claro, da una sensación agradable. La calidad de remate, en cambio, es mediana. Hay algún plástico con borde filoso y la guantera no ajusta bien, aunque su luz sí se apaga; en las primeras unidades se quedaba encendida (ahora se apaga porque han añadido un suplemento de goma en la tapa).

El puesto de conducción es bueno, a pesar de que el volante está algo tendido y, en la versión Dynamique, el asiento recoge bien el cuerpo. En los Privilege sujeta un poco menos, pero también es muy cómodo. Tiene un apoyo grande para el pie izquierdo y los pedales me parecen mejor situados que en un Peugeot 206 (por ejemplo).
La visibilidad es buena de día, porque no tiene grandes ángulos muertos y los retrovisores cubren bien el contorno del coche.

Nuestra unidad de pruebas tenia faros de xenón de serie. Daban luz muy clara e intensa (más que con una bombilla halógena) pero no tenían mucho alcance, quizá por un problema de la regulación mecánica. Observaremos este aspecto en sucesivas unidades.

Con este motor y equipamiento «Dynamique» (5p) cuesta 11.350 €; con equipamiento «Privilege» cuesta 13.300 €. Esta diferencia (1.950 €) se debe a que el Privilege tiene de serie climatizador automático, faros de xenón con conexión automática, sensor de lluvia, cargador de CD y parabrisas atérmico. También se diferencia porque la tapicería, la parte baja del salpicadero y puertas son de un tono más claro. Los asientos no tienen tanta sujeción lateral como en el acabado «Dynamique» (aún así sujetan bien), y el diseño del pequeño alerón al final del techo es algo diferente en estas dos versiones.