El espacio, la apariencia y los materiales del habitáculo del Peugeot 4008 son los mismos que los del Citroën C4 Aircross (impresiones del interior) y Mitsubishi ASX (impresiones del interior). Por tanto, es amplio, poco vistoso y de buena calidad.

El umbral que hay que salvar para acceder al habitáculo es ancho y, en caso de que éste esté sucio (con barro por ejemplo), hay que ser especialmente precavido para no manchar los pantalones por la zona de los gemelos. Este hecho causa más problemas a las personas de menor estatura porque, además de tener que evitar el umbral, deben subirse a un asiento situado más alto de lo habitual en un turismo. Y todo esto es todavía más problemático cuando se accede a la fila trasera de asientos, porque el espacio que dejan las puertas es pequeño.

Personas de diferente talla no tendrán problemas para encontrar una postura de conducción cómoda. Los recorridos de las regulaciones de los asientos delanteros son amplios —en sentido longitudinal y en la inclinación del respaldo. El del conductor tiene además ajuste en altura—. También se puede variar la altura y la cercanía del volante.

Los asientos tienen poco mullido y no sujetan el cuerpo con firmeza, pero resultan cómodos en el uso diario y después de estar mucho tiempo sentado en ellos.

En la fila trasera hay espacio para que dos personas de alrededor de 1,80 metros viajen con holgura. No es recomendable instalar el techo de cristal (opcional) si se prevé que las personas que viajen detrás sobrepasarán dicha estatura, ya que sus cabezas rozarán con el techo. La plaza central es incómoda porque su asiento es muy duro y el túnel de transmisión es muy prominente. Por otro lado, la poca anchura disponible —una de las peores entre sus alternativas (mediciones del interior)— hace que esta fila no sea adecuada para transportar con comodidad a tres adultos de complexión normal.

Los materiales utilizados en el salpicadero y su ajuste dan en general una buena impresión visual y táctil y transmiten sensación de solidez. No obstante, no es un modelo refinado en este aspecto y hay una serie de detalles que desfavorecen el resultado final. Por ejemplo, la unión del tapizado del techo con la parte superior del parabrisas no está bien hecha, la zona alrededor de los plafones se hunde con facilidad al hacer presión con el dedo, las piezas de plástico que cubren interiormente los rieles de la cortinilla del techo solar no están bien encajadas y la guantera no está iluminada (imagen).

Huecos y maletero

Hay muchos huecos y de buen tamaño para dejar objetos de uso cotidiano. Delante de la palanca del cambio hay uno en el que caben un monedero, un teléfono móvil y un juego de llaves. A la izquierda del freno de mano hay otro de grandes dimensiones y debajo del reposabrazos hay un espacio muy amplio. Las puertas delanteras tienen bolsillos —imagen; en las traseras no hay— y en la parte posterior de los respaldos delanteros hay dos bolsas donde se pueden meter revistas (imagen).

El maletero tiene un volumen de 442 litros en las versiones con equipo de reparación de pinchazos y 416 litros en las versiones con rueda de repuesto de emergencia. No es mucho si lo comparamos con otros todoterrenos de similar longitud de carrocería (listado comparativo ordenado por volumen de maletero). Si se tumban los respaldos de los asientos traseros —abatibles en una proporción 60/40— y se aprovecha todo el espacio que hay hasta el techo, caben 1193 litros. Debajo del piso hay una rueda de repuesto de emergencia (de serie). El borde de carga está alto (a 79 centímetros del suelo).

A ambos lados del maletero hay un hueco sin tapa donde se pueden dejar objetos de pequeño tamaño, como una botella de limpieza de un litro y unos trapos (imagen). También se pueden dejar objetos pequeños en los espacios libres que deja la rueda de repuesto. Esto es útil cuando se abre el portón y no se quiere dejar a la vista determinadas cosas.