Peugeot 207 SW (2009) | Impresiones del interior

25/10/2011 |Jaime Arruz

El 207 SW tiene un habitáculo espacioso y está realizado con materiales de calidad. Todas las piezas quedan bien ajustadas, ya que no hay holguras o uniones mal solucionadas. Los mandos tienen buen tacto, igual que los recubrimientos de la consola central y el salpicadero. El único que desentona un poco es el plástico duro de la tapa de la guantera (imagen), más por tacto que por sensación de calidad.

Un aspecto criticable del interior del 207 SW, así como del resto de versiones del 207, es que algunos mandos sean los mismos que llevan antiguos modelos de Peugeot como el 206 o el 307 —desarrollados a finales de los años 90—. Es el caso de los mandos de los limpiaparabrisas, los intermitentes (imagen) o los elevalunas (imagen), además de los que hay tras el volante para manejar el equipo de sonido (imagen).

El 207 SW es espacioso para cuatro ocupantes. En caso de viajar dos adultos de talla normal en las plazas posteriores, la central es estrecha. Sí pueden acomodarse mejor un niño y dos adultos de talla pequeña o tres niños.

Con un conductor y un acompañante delantero de unos 1,80 m de altura, en las plazas traseras hay espacio suficiente para ocupantes de la misma estatura —sus rodillas no pegarán contra el respaldo delantero—.

Además, es posible ir muy erguido y colocar los pies bajo la banqueta delantera, lo que contribuye a incrementar la sensación de amplitud. La altura es suficiente para personas de hasta unos 1,85 m (mediciones interiores).

El puesto de conducción es bueno en términos generales porque todos los mandos están bien situados y porque es sencillo encontrar una posición cómoda gracias a los reglajes en altura y profundidad del volante y la banqueta del asiento. Los asientos tienen un buen relleno y sujetan el cuerpo correctamente.

El acceso a todas las plazas es cómodo y sencillo gracias al gran ángulo de apertura de las puertas. Un inconveniente a la hora de salir del habitáculo desde los asientos delanteros es que los tiradores de apertura de las puertas quedan un poco lejos, en la parte más próxima a la bisagra y junto a salpicadero (imagen) —para accionarlo, hay que despegar la espalda del respaldo del asiento—.

Hay muchos huecos para depositar objetos repartidos por todo el interior, como en la parte baja de las puertas, delante de la palanca de cambios y bajo el equipo de sonido (imagen), por encima de la doble salida central del sistema de climatización (imagen) o bajo la palanca del freno de mano. La mayoría de ellos están recubiertos de goma antideslizante para evitar que los objetos se dañen y/o se desplacen cuando el coche está en marcha. Incluso, es posible transportar objetos de pequeño tamaño en el espacio que queda entre el salpicadero y la tapa de la guantera (imagen).

Una opción interesante es el techo panorámico de cristal (imagen), tanto porque incrementa la sensación de amplitud como porque aumenta la luminosidad del habitáculo. Eso sí, tiene una característica que puede suponer un problema para algunos conductores: para retirar o poner la cortinilla eléctrica que lleva, es necesario mantener pulsado el botón que lo acciona durante toda la operación —dura varios segundos—.

Maletero

EL 207 SW tiene un maletero de 337 l. Es una cifra inferior a la de modelos de similares características como el Škoda Fabia Combi (480 l), el Renault Clio Grand Tour (439 l), el SEAT Ibiza ST (430 l) o el TATA Indigo (410 l). Se puede acceder a él abriendo el portón o únicamente la luneta (imagen).

Aún así, permite transportar tres maletas de tamaño grande, mediano y pequeño, además de una mochila (imagen). Sus formas regulares facilitan la colocación de la carga. En su interior se pueden llevar objetos de hasta 79 cm de alto, aprovechando el espacio entre el piso y el guarnecido del techo, y de hasta 89 cm de profundidad (mediciones del maletero).

El espacio libre entre el suelo y el portón, cuando éste se abre, es de 1,90 m, por lo que personas de hasta esa estatura podrán cargar y descargar objetos del maletero sin tener que agacharse.

El espacio de carga se puede aumentar si se reclinan los respaldos de los asiento traseros —en una proporción 60/40 (imagen)—. En este caso, queda un fondo plano que facilita el transporte de objetos de gran longitud (imagen).

Para ocultar los objetos que se transportan en el interior del maletero hay una bandeja que se pliega en tres partes (imagen). Es útil para, por ejemplo, coger algo abriendo únicamente la luneta, no todo el portón.

Para facilitar el transporte de diferentes objetos, hay cuatro argollas en el respaldo de los asientos posteriores y dos en la parte más próxima al portón con los que asegurar la carga. Esta última zona tiene un recubrimiento metálico para no dañar los plásticos. Además, el maletero tiene dos ganchos portabolsas, uno a cada lado.

En la zona izquierda hay dos cintas elásticas que permiten asegurar diferentes objetos, como por ejemplo los triángulos de emergencia (imagen). A la derecha hay un pequeño hueco con una red elástica (imagen). Sólo permiten dejar objetos de reducido tamaño. Si se desea llevar en el maletero algún elemento que necesite corriente, como por ejemplo una nevera portátil, es posible conectarlo a la toma de 12 V que hay junto al reposacabezas izquierdo de las plazas traseras (imagen).

Bajo el piso del maletero hay una rueda de repuesto del mismo tamaño que las otras cuatro (imagen).