Opel Vectra 5p 1.9 CDTi 16V 150 CV (2006) | Está bien terminado y su espacio está en consonancia con la longitud de su carrocería

05/12/2005 |Enrique Calle

El Opel Vectra da una sensación de buen acabado y solidez. Esta sensación viene dada por lo bien que parecen unidas las piezas, por el buen aspecto que dan algunas de ellas y por el agradable tacto de los distintos mandos y ruletas.

En el interior hay distintos tipos de plástico. El mejor es el plástico blando de la parte superior del salpicadero (que ahora tiene una textura distinta a la gama Vectra anterior) y el plástico pintado en el que están recubiertos los asideros de las puertas y el que hay alrededor de los mandos que regulan los elevalunas y el cierre automático de puertas. Las versiones «Cosmo» tienen de serie parte del guarnecido de las puertas tapizado en cuero.

Hay plástico completamente duro y menos cuidado en la parte baja de las puertas, en la mitad inferior del salpicadero y en la consola central.

Los huecos destinados para depositar objetos tienen un fondo de goma y la guantera está tapizada en una tela con cierto parecido al terciopelo. La mayor parte de los mandos y ruletas tienen un accionamiento muy agradable y están recubiertos de goma. Desde las dos ruletas principales de la consola central se pueden manejar casi todas las funciones del sistema del navegador, de los ordenadores de viaje, del sistema de sonido, del teléfono y de la ventilación. También se pueden controlar estas mismas funciones desde los mandos del volante.

Los asientos de la versión «Elegance» y «Cosmo» no dan mucha sujección lateral (los de las versiones «Sport» sí: Opel los denomina «deportivos» y sólo los puede tener esta versión). Me han parecido mejores con el paso de los kilómetros que al principio. Con el paso de los kilómetros he ido cómodo y suficientemente sujeto. Estos asientos tienen un relleno de espuma más bien duro y en el «Cosmo» están tapizados en piel y tela.

La banqueta de las plazas delanteras tiene doble regulación independiente (dos palancas situadas en su base regulan la altura y la inclinación de la misma, imagen); también tienen ajuste lumbar. Los asientos en ningún caso pueden ir cerca del suelo, pero el techo y sus montantes quedan relativamente lejos de la cabeza de los ocupantes de las plazas delanteras, incluso para aquellos que sean altos. El ajuste longitudinal también es grande; el asiento puede ir cerca del volante o muy lejos. Las plazas delanteras se adaptan bien a tallas muy distintas.

En las plazas traseras, el espacio longitudinal y la altura libre al techo está bien para personas de talla media o ligeramente por encima. Los reposacabezas traseros tienen una amplia regulación en altura y quedan bien ajustados y cerca de la cabeza de los ocupantes.

Las plazas traseras están provistas de una salida orientable de aire, una toma de corriente y, en el borde de la plaza central, una plataforma para colocar envases de bebida, imagen. En el techo de estas plazas hay un plafón que da poca luz para leer bien durante la noche.

El maletero tiene 500 l y una rueda de repuesto del mismo tamaño que las otras. En el fondo del maletero hay cuatro argollas y dos cajones con tapa en los laterales: en uno de ellos están alojados lo fusibles y tiene un fondo de plástico; el fondo del otro es la propia chapa de la carrocería (imagen).