Nissan Qashqai (2011) | Impresiones del interior

27/02/2012 |Enrique Calle

La primera sensación que me dejaron los asientos delanteros fue que su mullido era blando, pero a medida que han pasado los kilómetros me he sentido muy cómodo en ellos. Además sujetan muy bien el cuerpo.

El puesto de conducción también es muy satisfactorio porque casi todo está colocado al alcance del conductor y como los retrovisores exteriores son grandes, la visibilidad hacia detrás es muy buena.

La visibilidad por el espejo retrovisor interior en tres cuartos traseros es peor porque el montante que une la luneta y las ventanillas es muy grueso. Eso se aprecia al salir de un aparcamiento en batería, ya que puede haber dificultades para ver bien. La cámara de aparcamiento que hay en opción viene muy bien aunque da una imagen con poca resolución (imagen). Es especialmente útil para ver objetos de poca altura que están justo detrás de la carrocería y que por lo tanto quedan fuera del alcance del conductor. Funciona bien incluso con poca luz, por ejemplo, en garajes. Desde septiembre de 2011 se puede pedir un sistema de visión panorámica («Arround View Monitor»), muy útil para realizar maniobras (más información).

Los asientos de las plazas traseras tienen una banqueta y respaldos muy planos (imagen) y dejan prácticamente suelto el cuerpo de los ocupantes. En comparación con un turismo de su tamaño (como un Ford Focus) su espacio interior es normal, con la diferencia de que los asientos del Nissan van más altos.

Comparado con algunos todoterrenos de un tamaño más o menos parecido, el Qashqai destaca negativamente porque es estrecho. Por esta razón, para transportar ocupantes en las plazas traseras es mucho mejor un Toyota RAV 4.

Un posible inconveniente que pueden encontrar las personas voluminosas es que el acceso a las plazas traseras no es completamente cómodo porque las puertas dejan un acceso relativamente pequeño.

El interior está bien realizado por ajuste, materiales y calidad de tacto de los mandos (abundan los plásticos laminados o acolchados). Tiene la calidad de acabado de los Nissan de precio alto (un Tiida tenía recubrimientos de peor calidad visual que el Qashqai).

He encontrado al menos dos cosas mejorables en su equipamiento. Una, que las puertas no se cierran automáticamente al comenzar la marcha. Dos, que en la instrumentación (imagen) no es posible ver una información resumida del navegador y sería muy útil porque la pantalla del navegador queda en una posición tal que hay que desviar mucho la vista de la carretera para consultarla.

Maletero

El maletero tiene un volumen relativamente grande, 400 l. Tiene varios inconvenientes para cargarlo con comodidad: hay un escalón de unos 15 cm entre el marco del portón y el piso del maletero, y el borde de carga (imagen) está alto: 78 cm del suelo.

Puede ampliarse plegando los asientos traseros. Cuando se hace, no queda una superficie plana en el maletero sino que hay un escalón entre el piso del maletero y el respaldo del asiento (imagen).

El maletero del Qashqai+2 es más grande y más fácil de cargar porque el borde de carga está enrasado con el fondo (más información)