El Mitsubishi Space Runner es un monovolumen de cinco plazas que por tamaño se sitúa entre el Space Star y el Space Wagon, también de Mitsubishi. Se vende con un motor de 2.0 litros de cilindrada y 133 CV de potencia máxima, el precio es 3.050.000 para la versión menos equipada y 3.425.000 pesetas cuesta el más caro.

Mide 4,29 m de largo, 1,69 m de ancho y 1,65 m de alto. Tiene proporciones similares a las de un Mazda Premacy, Renault Scenic, Chrysler PT Cruiser, Xsara Picasso o Nissan Almera Tino. La batalla mide 2,55 m, un poco menos que sus competidores.

Presenta alguna característica que no tienen sus rivales; sólo tiene una puerta para las plazas traseras, que es corrediza. Mitsubishi asegura que los asientos se pueden desplazar para colocarlos como más convenga, aunque no indica cómo ni en qué medida.

Se vende con un solo motor pero con dos acabados diferentes, uno denominado 2.0 16V y otro 2.0 16V GLX. Entre ambos hay 375.000 pesetas de diferencia, GLX tiene llantas de aleación, ABS, barras portaequipajes en el techo y espejos en el color de la carrocería. Ninguno de estos elementos se pueden montar individualmente en la versión más barata, lo que es un inconveniente. La única opción que se puede adquirir en el 2.0 16V es pintura metalizada y en el GLX pintura metalizada y navegador.

El motor es el que monta el Mitsubishi Galant, tiene 133 CV de potencia máxima a 6.000 rpm, 175 Nm de par a 4.500 rpm y 16 válvulas movidas por un solo árbol de levas. El consumo medio es 8,2 litros cada 100 km. Alcanza 185 km/h de velocidad máxima y acelera hasta 100 km/h en 11,0 segundos.

El Space Runner pesa 1.435 kg, más incluso que un Opel Zafira, que es algo más grande y tiene siete plazas. La velocidad máxima —185 km/h— no es alta en comparación con otros monovolúmenes incluso de menor potencia, lo que hace pensar que la aerodinámica no es muy buena. Mitsubishi no ha facilitado el coeficiente aerodinámico ni la superficie frontal.