Mercedes-Benz Viano (2004) | Motores y bastidor

10/07/2003 |Juan Manuel Pichardo

La primera decisión de Mercedes-Benz fue aumentar el tamaño del Clase V y la furgoneta Vito. Como consecuencia de ello, la tracción trasera era obligada; una furgoneta con esta capacidad de carga y este tamaño tendría problemas de motricidad si fuera tracción delantera. Por ejemplo, en una cuesta arriba resbaladiza, y con la carga situada muy atrás, sería muy difícil que pudiera arrancar.

Hay dos inconvenientes que plantea la tracción trasera: uno es la estabilidad y otro la altura del plano de carga. El primero lo han resuelto satisfactoriamente; el Viano y la Vito van muy bien, y tienen el respaldo del control de estabilidad (que es equipo de serie).

Para resolver (o limitar) el segundo inconveniente, Mercedes-Benz ha colocado el árbol de transmisión todo lo bajo que es posible, y ha utilizado un tipo de suspensión que roba muy poco espacio vertical.

Es básicamente una suspensión trasera de rueda tirada por triángulo de eje oblicuo (básicamente la que tenían los Mercedes-Benz antes de llevar la suspensión de cinco brazos), con un elemento de unión muy bajo y plano, un muelle corto y un amortiguador muy inclinado.

Si tiene tracción trasera y motor delantero, debe ir colocado longitudinalmente. Para no restar mucho espacio, este vehículo está diseñado de manera que no caben motores largos. Actualmente los tiene de cuatro cilindros en línea o de seis cilindros en V a 90°.

Parece ser que no le caben motores más largos, como los Diesel de cinco o seis cilindros en línea que tienen las berlinas de Mercedes. Está previsto un motor Diesel más potente para 2006, pero será un V6 de 3 litros de cilindrada 190 CV de potencia máxima y 400 Nm de par máximo.

El motor Diesel que tiene el Viano es un 2,1 l (2.148 cm³) con alimentación por conducto común (hasta 1.600 bares), turbocompresor variable e intercooler. Hay una versión de 109 CV y otra de 150; las diferencias entre ellas son la presión máxima de sobrealimentación y el tamaño del intercooler, además del control electrónico adecuado en cada caso (en este momento no sé qué presión máxima de alimentación tiene cada uno, pero está preguntado y me lo dirán).

El motor más potente lo tienen varias berlinas de Mercedes, el de 109 —de momento— solo lo llevan el Viano y la Vito.

Los dos motores de gasolina también son básicamente iguales entre sí: seis cilindros en V a 90°, 3.199 cm³ de cilindrada, culatas de tres válvulas por cilindro y 10ª 1 de relación de compresión. Las diferencias entre ellos, según parece, están sólo en el control electrónico.