Mercedes-Benz Clase A (2005) | Impresiones de conducción: más seguro y más cómodo
Dinámicamente, la diferencia más perceptible entre este Clase A y el anterior es que éste es mucho más cómodo de suspensión. También me parece muy cómodo con relación a otros monovolúmenes pequeños, e incluso comparado con coches de mayor tamaño.
La suspensión parece que absorbe bien los baches, el balanceo de la carrocería no es grande y el coche no se mueve mucho cuando circula sobre carreteras rápidas con suelo poco uniforme. Lo cómoda que es la suspensión se nota en las plazas delanteras y también en las traseras, que es donde más se notaba lo dura que era la suspensión del anterior Clase A.
En carretera rápida mantiene mejor la trayectoria que otros coches de su tamaño, por lo que he visto en autopistas alemanas donde se podía ir a fondo durante largo rato.
En carreteras lentas no he tenido ocasión de ver claramente cómo va; la dirección parece tener buen tacto y no reacciona con brusquedad; parece un coche subvirador en toda circunstancia. Las tres unidades que he conducido tenían unos neumáticos Michelin Primacy que daban poco agarre en seco (en mojado no lo sé).
Sólo he podido conducir dos versiones: 180 CDI y 200 CDI, este último con cambio manual y automático «Autotronic». Los dos motores dan la impresión de tener mucha fuerza, aunque hay una diferencia notable a favor del más grande (son 140 CV contra 109).
Sin haber medido prestaciones, me parece que el 180 es completamente satisfactorio para quien haga un uso normal del coche, principalmente por ciudad y alrededores. No sólo tiene una aceleración que considero suficiente para moverse con agilidad, también resulta más suave y silencioso que el A 200 CDI.
A falta de un prueba más, y si tenemos en cuenta que el A 180 CDI cuesta 3.900 € menos que el 200 CDI, el primero me parece mucho más recomendable en casi cualquier caso.
Puede que para quien vaya a usar el coche intensamente por carretera resulte más satisfactorio el 200 CDI, si se busca una aceleración grande y la posibilidad de circular con agilidad a una velocidad a la que no llega el 180 CDI. Por la impresión que me ha dado, creo que acelera más que otros coches con motor Diesel de 140 CV, como un Audi A3 (la diferencia de peso entre ambos es sólo 75 a favor del Mercedes-Benz).
La caja de cambios que tienen de serie el 180 y el 200 CDI es manual de seis velocidades. Por lo que he podido ver en esta primera toma de contacto, me parece correcta desde casi todo punto de vista (rapidez, precisión y tacto). Lo que no me parece del todo acertado es el escalonamiento; tiene un salto excesivo entre segunda y tercera (1,6 a 1) y no muy grande entre quinta y sexta (1,1 a 1).
La caja de cambio automática Autotronic me parece muy cómoda, suave y útil. Hay que acostumbrarse, no obstante, al hecho de que no haya relaciones fijas. Hay ocasiones en que el motor sube de régimen sin que se sienta una aceleración proporcional.
A diferencia de otras cajas con variador continuo, la Autotronic no selecciona el desarrollo necesario para alcanzar la potencia máxima cuando el conductor pisa el acelerador a fondo. Este sería el procedimiento adecuado para conseguir la máxima aceleración.
Según Mercedes-Benz, el propósito de esto es que el conductor tenga una percepción del funcionamiento y del ruido más semejante al de un cambio con relaciones fijas. Me parece una buena idea porque efectivamente hay quien se queja del ruido en las cajas con variador, que efectivamente es distinto en el Autotronic que en otras cajas de este tipo. Pero creo que habría sido aún mejor con la posibilidad de obtener la máxima aceleración (por ejemplo, con un interruptor al final del recorrido del acelerador).
Existe la posibilidad de seleccionar manualmente siete relaciones fijas, como ocurre en otras cajas de variador. No acabo de ver qué ventaja tiene esta función.