Lexus LS (2007) | Control de estabilidad y otros dispositivos de seguridad activa

10/10/2008 |Alfonso Herrero

Dentro de las ayudas a la conducción, la más importante entre las que tiene el LS 460 es el control de estabilidad VDIM. Tiene integradas las funciones de control electrohidráulico de los frenos (más información técnica sobre este sistema), antibloqueo de frenos, repartidor de frenada y control de tracción. Además, interviene en funciones de elementos como la dirección de desmultiplicación variable, la asistencia eléctrica de la dirección y la amortiguación de dureza variable.

El control que tiene el VDIM sobre los elementos de propulsión es mayor que en cualquier otro modelo; en caso necesario, determina la carga del motor y la selección de marchas. Hasta ahora, todas estas funciones no habían estado integradas en el mismo sistema.


El control de estabilidad no tiene un límite a partir del cual comienza a funcionar, sino que lo hace en varias fases y antes de que se alcance ese límite. Esto es posible porque actúa independientemente en los frenos de las cuatro ruedas y ajusta la presión de frenado de forma progresiva. Es decir, va más allá de la operación normal de un sistema de frenado que sólo tiene tres actuaciones posibles: generar presión de frenado, mantenerla constante o disminuirla.

El VDIM tiene una tecla para desconectarlo, pero se conecta automáticamente al superar 60 km/h. En algunos casos puede ser aconsejable desconectar el control de estabilidad en condiciones de muy baja adherencia, para aumentar la capacidad de tracción. En este caso, el coche tiene más capacidad de tracción con el VDIM conectado porque el control de tracción hace la función de un diferencial de deslizamiento limitado. Si se intenta poner el coche en movimiento con una rueda en una superficie muy deslizante (por ejemplo, una cuneta helada), con el VDIM es posible (lo hace con gran seguridad) y sin él no lo es, porque la rueda sin adherencia patina.

Tampoco es necesario en este caso desconectar el control de estabilidad si el coche lleva cadenas para nieve, porque el VDIM tiene una programación que lo tiene en cuenta y adapta su funcionamiento. Lo único que tendría sentido con ese botón es desconectar el antibloqueo de frenos, para los raros casos en los que así el coche frene mejor (al circular sobre nieve profunda). Pero ocurre que lo único que permanece en funcionamiento cuando se desconecta el VDIM es precisamente el antibloqueo de frenos.


Cuando se desconecta el VDIM el coche es mucho más torpe en una maniobra de emergencia, según hemos podido comprobar. Con el VDIM desconectado, la amortiguación no se endurece en caso necesario y la dirección pierde las funciones de desmultiplicación variable y asistencia. En consecuencia, el movimiento de la carrocería en una maniobra de esquive, por ejemplo, es mucho más amplio. Con la pérdida de las funciones de dirección, hay que mover mucho más el volante para conseguir el mismo giro.

Esta función de asistencia suplementaria aplica una cierta cantidad de par en la dirección en que se deben mover las ruedas, de acuerdo con los cálculos del VDIM. Por ejemplo, si se acelera sobre superficies desiguales, el VIDIM corrige la dirección con un ligero contravolante. En una prueba específica para ello en una pista de pruebas, pude observar que la dirección se mueve por sí misma si se suelta el volante.

En caso de sobreviraje, la dirección eléctrica hace fuerza para facilitar el contravolante. En caso de subviraje, si el conductor gira demasiado la dirección, la asistencia eléctrica hace fuerza para que el conductor gire menos. En todo caso, el ángulo de las ruedas lo determina el conductor con el volante, no puede ocurrir que el volante gire en un sentido y las ruedas en otro.