KIA Carens (2002) | Cinco o seis plazas

18/09/2002 |Enrique Calle

El aspecto de los plásticos parece ahora mejor, aunque el salpicadero sigue siendo de plástico duro. No es refinado pero tampoco pobre. Carece de bordes cortantes en lugares donde sí los tienen otros coches de bajo precio. Varios huecos están cubiertos con una superficie de goma.

De serie tiene cinco plazas (dos filas de asientos), la opción de seis plazas (tres filas de dos) cuesta 301 €. No es posible que tenga siete plazas.

Con cinco plazas, la fila trasera da cabida a tres personas (tiene tres cinturones de seguridad de tres puntos de anclaje cada uno) y no tiene reposabrazos.

Con tres filas de asientos, en la segunda fila sólo pueden ir dos personas (sólo tiene dos cinturones de seguridad) y tiene tres reposabrazos plegables (uno a cada lado y otro en el medio). A diferencia de otros monovolúmenes, el Carens no tiene butacas individuales en ninguna de sus filas de asientos traseros; son bancos corridos y abatibles en partes desiguales.

En el Carens de cinco plazas, tanto la banqueta como el respaldo se pueden abatir sobre los respaldos de las plazas delanteras, pero no se pueden desmontar. Así, el maletero queda completamente enrasado con el habitáculo.

Otra peculiaridad de esta versión es que el maletero (420 litros) tiene un falso piso que aloja un cajón de plástico (relativamente ligero y fácilmente lavable) con huecos de diferentes formas y tamaños, para colocar distintos objetos. Debajo de este cajón está la rueda de repuesto, que es igual que las otras cuatro.

En la versión de seis plazas, la banqueta central se puede desplazar hacia delante (mediante un muelle) y el respaldo se pliega sobre la banqueta (pero no queda completamente enrasada) para facilitar el paso a las plazas traseras.

Incluso así, el acceso a las plazas traseras es estrecho y complicado para una persona normal. El espacio disponible para las piernas es insuficiente para que un adulto viaje cómodamente durante un trayecto de un cierto número de kilómetros. Anchura hay de sobra y altura la justa. En estas condiciones, el espacio para equipaje prácticamente desaparece. Los pasajeros de todas las filas de asientos tiene huecos en los laterales para colocar objetos.

 

Teniendo en cuenta su longitud, el espacio disponible en la segunda fila de asientos es de las más pequeñas por anchura y por espacio para las piernas.

La versión LX es 1.743 € más cara que la EX. Esta diferencia se justifica porque el más equipado tiene airbag lateral, faros antiniebla delanteros, climatizador (en lugar de aire acondicionado), llantas de aleación y la consola central tiene un acabado de color parecido al titanio.