El Ford Mondeo con el motor 1.8 16v de 125 CV 4p resulta agradable de conducir, no consume mucho, transmite una elevada sensación de seguridad, es amplio, funcional y muy cómodo. No se distingue por un enérgico empuje a medio régimen, pero sí tiene una buena capacidad de aceleración. En autovía o autopista es fácil mantener una velocidad de crucero alta y en carretera permite rodar a un ritmo ágil siempre y cuando el motor no caiga por debajo de 3.000 rpm. En tal situación, se muestra muy lento y es recomendable reducir alguna marcha para disponer de mayor aceleración.

Comparando nuestros datos de mediciones entre el Mondeo 1.8 16V de 125 CV y el Mondeo 2.0 TDdi de 115 CV encontramos que el modelo turbodiésel es más rápido en recuperación pero no en nuestra medición de aceleración. Si bien esto podría hacer más recomendable la compra del modelo TDdi, hay otros aspectos que también pueden hacer más interesante el Mondeo de gasolina: es más silencioso y el motor vibra menos, lo que le convierte en un coche más cómodo a la hora de viajar. Además, el 1.8 16v ofrece opcionalmente control de estabilidad, un elemento que no está disponible en el modelo TDdi.

Poco más se puede contar en este modelo que no se haya dicho ya en la prueba del Ford Mondeo 2.0 TDdi 4p. Su estabilidad es excelente, incluso un poco mejor que la del turbodiésel gracias a su menor peso (1.298 kg frente a 1.416 kg). El eje delantero es ligeramente más ágil y preciso a la hora de entrar en las curvas, y también las distancias de frenado son un poco más cortas (casi inapreciable) y se incrementa la resistencia a la fatiga.

A diferencia del 2.0 TDdi, el Mondeo 1.8 16V sólo está disponible con el nivel de equipamiento Trend; no existe versión Ghia con este motor de gasolina. Con relación a sus rivales, destaca en elementos de seguridad (airbag de cabeza de serie) y —sobre todo— en habitabilidad, capacidad de maletero y precio.

Pincha aquí para comparar el Mondeo Trend 1.8 16V y el Mondeo Trend 2.0 TDdi.