Citroën C5 (2001) | Información general

27/03/2001 |Juan Manuel Pichardo

Lo que ha conseguido Citroën con el C5 es un coche cómodo y espacioso. A quien busque eso y —además— motores Diesel suaves y poco ruidosos, les puede resultar más satisfactorio que cualquier otro competidor.

Ahora bien, para ser un coche nuevo, ha nacido cojo porque —todavía— no puede tener control de estabilidad ni en opción. Sus motores no son en ningún caso un prodigio de fuerza y la impresión de calidad que da —sin ser mala— no está a la altura de los mejores.

Al escribir esto, el «descuento» (se hincha el precio de tarifa para ganar a los clientes que se sienten atraídos por «rebaja» grande) que hace Citroën en el C5 es 300.000 pesetas; pulsa aquí para ver el descuento vigente.


El precio resultante es ligeramente superior al que tienen un Mondeo o un Laguna. El C5 que será el más vendido —HDi 110 CV SX (realmente 109 CV)— cuesta con descuento casi 3,4 millones; un Ford Mondeo Trend 2.0 TDdi 115cv 4p cuesta 3,3 millones y un Renault Laguna 1.9 dCi 110cv Authentique 3,4 millones, pero con más equipamiento. Hay una versión menos costosa y equipada del C5 (X, en vez de SX), que está con descuento en 3,3 millones.

Con el C5, Citroën adopta la forma de nombrar los coches de marcas como Audi, BMW, Mercedes o Volvo: una combinación de números y letras en lugar de un nombre. El objeto de este procedimiento, más germánico que latino, es resaltar la marca más bien que el modelo. Otros modelos de Citroën tendrán también este tipo de nombre, como el C6 (futuro sustituto del XM basado en el 607) o el C3 (Saxo).

Una de las características del C5 es precisamente su tamaño, superior al de cualquier otra berlina actual de esta clase, salvo el nuevo Ford Mondeo y el Volkswagen Passat. La distancia entre ejes es muy larga, mayor que la del Passat o el Laguna II, y casi al mismo nivel que la del nuevo Mondeo. Pero la cota que más distingue al C5 es la altura, muy superior a la de sus competidores.


Citroën mantiene algunas características del Xantia: es un coche con portón, aunque disimulado en una silueta de tres volúmenes y con tercer acristalamiento lateral, y tiene una versión revisada y mejorada de la suspensión hidroneumática.

Puede tener hasta seis airbags, cinturones con limitador de presión en las plazas laterales traseras (además de en las delanteras) o detección de neumáticos deshinchados. Entre los automatismos de la carrocería, el C5 tiene algunos que no son nuevos pero sí poco frecuentes aún, como un detector de lluvia que conecta las luces automáticamente cuando es muy intensa. Lo que sí es nuevo es que, si nota que llueve, puede cerrar automáticamente las cuatro ventanillas y el techo corredizo.