BMW Serie 5 (2007) | Impresiones del interior

14/08/2007 |Alfonso Herrero

El BMW Serie 5 es una berlina satisfactoria para que la ocupen cuatro pasajeros siempre que no necesiten mucho espacio para las piernas en las plazas traseras. Quien use normalmente las cinco plazas y esté preocupado por la comodidad de los que van detrás, mejor que elija otro coche porque el túnel central de la transmisión hace que el pasajero del centro tenga que ir con las piernas muy abiertas y, por tanto, resta espacio a los otros dos. Además, si una persona se sienta en el centro, las otras dos quedan desplazadas hacia una parte de la banqueta que no es horizontal, de forma que deben viajar un poco inclinadas.

En el puesto de conducción hay espacio bastante para que una persona alta no tenga problemas ni de espacio para las piernas ni de altura (incluso con la opción del techo corredizo). Detrás tiene el espacio normal en una berlina de este tamaño. Quienes prefieran una posición de conducción elevada se encontrarán cómodos en este asiento, porque también es posible ir de esa forma y, además, con una buena altura libre hasta el techo.

El asiento de la unidad que hemos conducido era el opcional denominado Comfort con regulación eléctrica. Estos asientos tienen un relleno más bien blando y un contorno que se adapta perfectamente al cuerpo. Son muy cómodos por la sujeción lateral que dan y porque tienden a cansar menos al conductor que otros asientos después de conducir muchas horas seguidas. Entre otras cosas, tienen regulación eléctrica de la longitud de la banqueta, de los contornos laterales y del reposacabezas. También se puede regular independientemente la inclinación de la mitad superior del respaldo.


Dado lo costosos que son, hay que plantearse si estos asientos merecen la pena frente a los de serie o a otros opcionales más económicos, como los deportivos (que no hemos probado).

Los asientos también pueden ser ventilados y/o calefactados y también los hay con regulación activa de los contornos laterales o con función de masaje.

En todo caso, es un coche donde es fácil sujetarse, bien contra el amplio apoyo del pie izquierdo, o bien apoyando lateralmente la pierna derecha.

El cinturón de seguridad no tiene ajuste de altura. Yo, que mido algo más de 1,90 m, he ido cómodo. En el manual de coche no explica cómo hay que colocar el asiento para que el cinturón quede correctamente ajustado en altura según la talla del ocupante.

Alrededor del conductor hay varios lugares donde dejar los objetos que se llevan habitualmente en el coche. Hay un cajón en el lado izquierdo del salpicadero, de gran tamaño (cabe sin problemas una cartera, el mando del garaje y unas llaves) o un pequeño receptáculo en la consola (sirve para dejar el teléfono móvil). También hay un reposabrazos delantero abatible y deslizable, con un compartimento doble y refrigerado. Si el coche lleva preinstalación de teléfono, este compartimento queda casi completamente ocupado.

En la repisa que queda delante de la pantalla de la consola también se pueden dejar algunas pequeñas cosas (por ejemplo, la tarjeta de crédito para los peajes) porque la superficie está inclinada y recubierta de goma. El inconveniente de la pantalla es que, dependiendo de cómo entra la luz a habitáculo, se pueden producir muchos reflejos.

El tipo de plástico que se puede encontrar en el interior es de muy buena calidad, el peor que se puede ver está en los botones del salpicadero. Casi todos los huecos son de un plástico pintado de tacto suave o están tapizados con tejido.


El «i-Drive» centraliza en un solo mando muchas funciones y creo que en general es fácil de comprender y de utilizar con un cierto periodo de adaptación, aunque quien lo maneje por primera vez puede sentirse desbordado. Hay funciones que sólo se pueden manejar desde el i-Drive y que llegar hasta ellas supone pasar por varios menús intermedios.

En la consola hay ocho botones programables a los que se puede asignar una fución del equipo de sonido o del navegador. Al acercar el dedo a cada botón, antes de pulsarlo, en una pequeña pantalla que hay encima se indica la función programada.

El sistema de ventilación funciona muy bien por capacidad para ventilar sin hacer ruido, por cómo compensa las condiciones exteriores y por las posibilidades de configuración que tiene (que se manejan con el mando central del iDrive y requieren ser estudiadas y probadas).

El sistema de climatización que tiene de serie permite calentar el habitáculo con el motor parado, siempre que el calor residual del motor lo permita y que el nivel de carga de la batería no baje de un cierto límite.