BMW M1 Homage prototipo (2008) | Información general

01/05/2008 |Jaime Arruz

El BMW M1 Homage se inspira en las líneas que definieron al M1 diseñado por  Giorgio Giugiaro y producido entre 1978 y 1981. Su carrocería conserva unas medidas similares a las de su predecesor, aunque con mayor distancia entre ejes.

Este prototipo, que no anticipa ningún modelo que se vaya a vender, fue presentado en el «Concorso d'Eleganza Villa d'Este 2008», donde también se pudieron contemplar modelos como el Bugatti Veyron Fbg Hermès, el Lexus LF-A, el Bentley Zagato Continental GTZ, el Mercedes-Benz F700 o el Maserati Quattroporte Bellagio fastback.

La carrocería tiene una silueta muy afilada, y está definida por líneas rectas y ángulos muy marcados. En los laterales de las aletas traseras hay dos grandes branquias que hipotéticamente contribuirían a mejorar la aerodinámica y a refrigerar el motor, que iría ubicado en posición central. BMW no ha aportado ningún dato sobre las características del motor.


BMW ha usado para el exterior una mezcla de colores naranjas y negros que reinterpretan las tonalidades del primer M1. Tiene una pequeña parrilla de forma muy similar a la de los últimos BMW y unos faros que prácticamente sólo son visibles si están encendidos (imagen).

El BMW M1 Homage tiene unas llantas de diseño muy parecido a las que montaba el M1 al que homenajea y una luna «enrejada», cuyas aberturas hacen las veces de pequeños alerones e impiden ver el motor desde el exterior (al contrario de lo que ocurre, por ejemplo, en un Audi R8, imagen). En la parte trasera también destacan las dos insignias de la marca, situadas en ambos extremos de la carrocería, como en el M1 de 1978.

El BMW M1 de 1.978

El primer BMW M1 fue presentado durante la 64 edición del Salón de París, en el otoño de 1978, como evolución del prototipo realizado seis años antes por Paul Bracq, el BMW Turbo (entre otras características tenía un motor con turbocompresor y dos puertas de tipo «alas de gaviota», imagen).

En los cuatro años que estuvo el M1 en el mercado, entre 1978 y 1981, se produjeron poco más de 450 unidades, ya que el precio que había que pagar por él, 100.000 marcos alemanes de la época, era el equivalente al de cuatro BMW 323is con un par de opciones.

Las medidas de este cupé de dos plazas eran: 4,36 metros de largo, 1,82 de ancho y únicamente 1,14 de alto. Un Lamborghini Gallardo Coupé tiene la misma longitud, pero es ligeramente más ancho (1,9 m) y más alto (1,17 m).


El M1 tenía un motor de seis cilindros en línea de 3,5 l de cilindrada, colocado en posición longitudinal trasera (detrás de los asientos, pero delante del eje trasero y paralelo a la marcha). Daba 277 CV y una relación peso-potencia de 4,7 kg/CV que era capaz de llevar al M1 hasta los 264 km/h, con una aceleración de 0 a 100 en 5,6 segundos. La caja de cambios era manual de cinco marchas y doble disco de embrague en seco. La tracción era a las ruedas traseras y tenía un diferencial autoblocante.

La culata era de dos piezas, la parte inferior formaba las cámaras de combustión y de refrigeración, mientras que la parte superior tenía los cojinetes de los árboles de levas y los taqués. La lubricación era por cárter seco y la gasolina se almacenaba en dos depósitos a la derecha e izquierda delante del eje trasero, cada uno con una capacidad de 58 litros.

Sus neumáticos eran grandes para la época (pero pequeños para lo que se lleva actualmente), de medidas 205/50 VR 16 en el eje delantero y 225/50 VR 16 en el trasero. La suspensión era de paralelogramo deformable en los dos ejes.

El conductor y el pasajero estaban protegidos por una estructura de acero de sección rectangular, recubierta de un plástico rígido remachado. Al tratarse de un coche deportivo, su equipamiento no era lujoso, pero entre las opciones destacaba el aire acondicionado. El maletero, ubicado bajo el capó, podía acoger el equipaje de dos personas para un fin de semana.

El M1 fue concebido y fabricado desde un principio como un automóvil destinado a la competición. En concreto, el proyecto «E26», como se le conocía cuando aún no había sido denominado como M1, arrancó en 1976 como el primer coche verdaderamente exclusivo construido por BMW Motorsport GmbH, la filial para competición fundada por la firma de Munich en 1972.

De acuerdo con la normativa vigente por entonces, para poder participar en las carreras del «Grupo Cuatro de Gran Turismo» (GT), los fabricantes debían producir al menos 400 unidades en 24 meses consecutivos del vehículo de calle. Además, el modelo destinado a la competición tenía que parecerse realmente al de producción en serie.


Al comienzo de su fabricación, Lamborghini no pudo hacerse cargo del montaje como inicialmente estaba previsto, por lo que «Baur», una empresa especializada en autocares, asumió el ensamblaje de los sistemas y componentes mecánicos del coche. Marchesi construyó el bastidor, T.I.R la carrocería de plástico reforzado con fibra de vidrio e ItalDesign (la compañía de Giorgio Giugiaro) montó estas dos piezas esenciales y añadió el equipamiento y revestimientos interiores. Ahí comenzó la corta vida del M1 y su camino hacia las carreras.

Este BMW ha sido conducido por pilotos de Fórmula 1 como Niki Lauda o Nelson Piquet en la «M1 Procar», una competición perteneciente al Grupo 4 de GT creada en 1979 por BMW Motorsport GmbH con el apoyo de Bernie Ecclestone y Max Mosley. El objetivo era agilizar la llegada del M1 a los circuitos, aunque fuese a través de un campeonato propio.

Esta competición, en la que los M1 disponían de motores preparados capaces de llegar hasta los 470 CV, se celebraba justo antes de la mayoría del los Grandes Premios de Fórmula 1 en Europa y fue ganada por Lauda en 1979 y por Piquet en 1980. El M1 también llegó a competir en la categoría «Grupo 5 de GT», en 1981, con un motor atmosférico que alcanzaba una potencia máxima de casi 500 CV.

Ese mismo año formó parte de la parrilla del campeonato estadounidense «IMSA GTO», en el que los pilotos Dave Cowart y Kenper Millar lograron la victoria en12 de las 16 carreras. Además, el deportivo de BMW participó en las 24 horas de Le Mans de 1979, donde finalizó en sexta posición, con una decoración realizada por Andy Warhol.